El incidente de Rubén ocurrió a las puertas de Bilindo y la chica lo estaba acosando.
La muchacha, con la que había salido el futbolista hace tiempo, presentaba síntomas de embriaguez y tuvo varios incidentes con los empleados del local, según testigos presenciales.
La supuesta agresión de Rubén Castro a su ex pareja tuvo lugar a altas horas de la madrugada del domingo al lunes a la salida de la sala Bilindo, en plena Avenida de la Palmera, donde el jugador acudió con unos amigos a celebrar el triunfo ante el Zaragoza.
Según testigos presenciales que han relatado los hechos a El Correo, la denunciante, que había sido pareja ocasional del futbolista bético hace un tiempo, presentaba evidentes síntomas de embriaguez y tuvo varias disputas con los encargados del local, que no la dejaban a acceder a la zona VIP donde el futbolista estaba con unos amigos, por lo que les insultaba a gritos y trataba de empujar.
Ante los llantos y la insistencia de la muchacha, y por intermediación del propio Rubén Castro, los porteros la dejaron entrar a la zona acotada, pero allí siguió acosando con gritos, llantos y algún empujón al futbolista bético, que tuvo que refugiarse en la cabina del disc-jockey ante la insistencia de su ex, bastante conocida en los ambientes nocturnos de Sevilla y que tiene prohibida la entrada en algún que otro local de moda.
En vista de la situación, sobre las 04.00 de la madrugada, Rubén Castro decidió abandonar el local y poco después lo hizo la denunciante. De lo que ocurrió en el exterior, ya en la Avenida de la Palmera, no hay, de momento, testigos presenciales.