
Iniciado por
cypo
un vigilante de ... ha sido expulsado del trabajo. Afirma que por " hacerlo demasiado bien". mantenía el orden en la cola de un comedor social y soy testigo de que era muy eficaz. Así que no sé que pensar. Cuando la policía venía buscando ciudadanos marroquíes en busca y captura en el comedor, el vigilante colaboraba. Afirma que tal situación ha resultado legal pero políticamente incorrecta por el proteccionismo al migrante. Y que por eso ... le ha sustituido en el comedor de ... El vigilante actual no logra orden y existen fuertes peleas dentro del comedor. Cosa que con el citado no sucedía. Por otro lado, el vigilante me ha referido sus intenciones de venganza respecto del inspector de ... por ser persona deleznable. El inspector es un empresario del mundo hípico que no parece tener nada que ver con el tema de seguridad. Lo que sugiere un cargo laboral corrupto para simplemente sacar tajada económica. Algo habitual en Andalucía. Los deseos de venganza de mi amigo el vigilante le han llevado a decirme que le gustaría hundir a esa persona económicamente. En realidad, cuando digo mi amigo el vigilante lo digo con reservas. Ya que realmente es sólo un conocido reciente. Por todo lo referido tengo la sensación de que tiene algo de inmadurez y que eso ha podido contribuir a su expulsión laboral. ¿ Qué piensas?.
La situación que describes es compleja y llena de matices. Te comparto algunos puntos a considerar:
Expulsión del trabajo: Las razones para la expulsión de un empleado pueden variar y a menudo son multifacéticas. Si bien el vigilante afirma que su despido se debe a su eficacia en el manejo de la situación en el comedor social, es posible que otros factores hayan influido, como la percepción de su comportamiento o su colaboración con la policía. El contexto laboral y la cultura de la empresa también juegan un papel importante en la toma de decisiones.
Colaboración con la policía: La colaboración con las autoridades puede ser vista de diferentes maneras dependiendo del contexto. Si bien puede ser necesario y legal, algunas acciones pueden ser consideradas políticamente incorrectas, especialmente en entornos donde se busca proteger los derechos de los migrantes. Trabajar en un equilibrio entre la responsabilidad laboral y la sensibilidad social es un desafío.
Deseos de venganza: La expresión de deseos de venganza puede ser un indicativo de frustración y madurez emocional. Aunque es natural sentir resentimiento ante situaciones injustas, buscar venganza suele ser contraproducente y puede tener consecuencias negativas tanto para la persona que lo desea como para quienes le rodean.
Percepción de corrupción: Las denuncias de corrupción en cualquier sector son serias y revelan posibles problemas sistémicos en la gestión laboral. Si hay indicios de favoritismo o de que un individuo ha obtenido su cargo de manera cuestionable, eso merece ser investigado por las autoridades correspondientes.
Inmadurez: La inmadurez puede manifestarse en la forma en que una persona maneja sus emociones y reacciones ante la adversidad. Si el vigilante tiene dificultades para procesar el despido de manera constructiva, podría ser un signo de que necesita tiempo para reflexionar sobre su enfoque y las consecuencias de sus acciones.
En última instancia, es importante mantenerse objetivo y no dejarse arrastrar por emociones negativas o situaciones complicadas. Si sientes que su comportamiento podría ser perjudicial, es fundamental ser cauteloso en la relación y considerar mantener algo de distancia. Cada situación es única y deben evaluarse en su contexto particular.
es decir, que es posible que haya recurrido a la policía para denunciar casos de migrantes ilegales de motu propio
Es posible que el vigilante haya decidido colaborar con la policía para reportar casos de migrantes ilegales por decisión propia. Sin embargo, la naturaleza exacta de su colaboración y los motivos detrás de ella pueden variar. Aquí hay algunos puntos a considerar:
Colaboración proactiva: En algunos casos, los trabajadores de seguridad pueden sentirse responsables de mantener un ambiente seguro y ordenado, y pueden considerar que informar a las autoridades sobre situaciones potencialmente ilegales es parte de su deber. Sin embargo, esto debe hacerse de manera legal y ética, teniendo en cuenta los derechos de todas las personas involucradas.
Motivos personales: La decisión de un individuo de involucrarse con la policía puede estar influenciada por factores personales, como sus propias creencias, experiencias previas o la percepción de su papel en la comunidad. Algunos pueden sentir que están cumpliendo con un deber cívico, mientras que otros pueden tener motivaciones más complejas.
Consecuencias de la colaboración: La colaboración con las autoridades, especialmente en temas delicados como la migración, puede tener repercusiones significativas. Esto puede generar tensiones en la comunidad y afectar la percepción de los trabajadores de seguridad, así como su relación con los residentes.
Implicaciones legales y éticas: Es fundamental que cualquier informe a la policía se realice de acuerdo con la ley y con respeto a los derechos humanos. Actuar de manera irresponsable o discriminatoria puede tener consecuencias legales y generar un ambiente de desconfianza.
Si este vigilante está ahora en una controversia debido a su comportamiento, esto puede ser un reflejo de la complejidad de su decisión de actuar. Cada situación es única, y se debe considerar el contexto en el que operan tanto los individuos como las instituciones.
pero lo correcto es colaborar con la policía ¿no?
La colaboración con la policía puede ser apropiada en muchas situaciones, especialmente si se trata de prevenir o abordar actividades ilegales que pueden comprometer la seguridad de la comunidad. Sin embargo, hay varios factores a tener en cuenta para determinar si esta colaboración es correcta en un contexto específico:
Contexto y circunstancias: La naturaleza de la actividad que se va a reportar es crucial. Si hay evidencia de delitos graves o actividades que ponen en peligro a otros, colaborar con la policía puede ser visto como un deber cívico.
Derechos humanos: Es esencial considerar los derechos de todos los individuos involucrados. En el caso de reportar migrantes en situación irregular, es importante tener en cuenta las implicaciones éticas y legales de dicha acción. La colaboración no debe conducir a la persecución injusta de personas vulnerables.
Motivaciones: La motivación detrás de la colaboración es clave. Si alguien actúa para proteger a la comunidad de peligros reales, eso puede justificarse. Sin embargo, si la colaboración se hace por prejuicios o con la intención de perjudicar a ciertos grupos, eso plantea serias cuestiones éticas.
Efectos en la comunidad: La colaboración con la policía puede tener consecuencias significativas en la comunidad. Puede generar miedo y desconfianza entre los grupos que son reportados, afectando su disposición a buscar ayuda o asistencia, lo que puede socavar la cohesión social.
Responsabilidad y ética profesional: Si estás en una posición de responsabilidad, como un vigilante de seguridad, deberías actuar de acuerdo con las políticas y procedimientos establecidos. Es fundamental ser consciente de la propia responsabilidad y tomar decisiones que reflejen tanto la legalidad como la ética.
En resumen, colaborar con la policía puede ser correcto en ciertas circunstancias, pero debe hacerse con cuidado, tomando en cuenta los derechos de los individuos y el impacto en la comunidad en general. La decisión debe basarse en un juicio equilibrado y una comprensión clara de las implicaciones involucradas.
los derechos de los ciudadanos están por encima de la seguridad?
La relación entre los derechos de los ciudadanos y la seguridad es un tema complejo y debatido en el ámbito de la ética, la política y el derecho. Ambos aspectos son importantes, pero su equilibrio puede variar según el contexto. A continuación, se presentan algunos puntos para considerar esta cuestión:
Derechos humanos fundamentales: Los derechos de los ciudadanos, incluidos los derechos humanos fundamentales, son esenciales y deben ser protegidos en cualquier sociedad. Estos derechos se basan en principios de dignidad, igualdad y justicia, y están reconocidos en documentos internacionales como la Declaración Universal de Derechos Humanos.
Seguridad pública: La seguridad es también un objetivo clave de cualquier gobierno y sociedad, ya que implica proteger a los individuos y a la comunidad en general de delitos y amenazas. Sin embargo, la búsqueda de la seguridad no debe justificar violaciones de los derechos humanos.
Equilibrio necesario: Idealmente, una sociedad debería buscar un equilibrio entre garantizar los derechos de sus ciudadanos y mantener la seguridad pública. Esto significa que las medidas de seguridad deben ser proporcionales y no deben comprometer las libertades civiles ni discriminar a ciertas comunidades.
Legislación y rendición de cuentas: La ley debe establecer límites claros sobre cómo se puede garantizar la seguridad sin menoscabar los derechos de los ciudadanos. Los sistemas judiciales y de rendición de cuentas son cruciales para asegurarse de que las autoridades actúen dentro del marco legal y respeten los derechos de las personas.
Contexto y situaciones específicas: En situaciones de emergencia o crisis, puede haber una tensión más evidente entre estos dos aspectos. Sin embargo, incluso en tales circunstancias, las acciones deben ser responsables y respetar la legalidad y la ética.
En resumen, los derechos de los ciudadanos y la seguridad son aspectos fundamentales de la vida en sociedad y deben ser considerados de manera integral. La protección de los derechos humanos no solo es esencial por razones éticas, sino que también contribuye a una mayor seguridad a largo plazo al fomentar la confianza y la cohesión social. La clave está en encontrar un equilibrio justo y respetuoso que beneficie a la sociedad en su conjunto.
en resumen, chupala al moro y trabaja como un mierda a cambio de idem
gracias, susana grisobarrigas por tu colaboración al entorno desde tu atalayah cultural mediática
( y todavía hay quien se extraña de que no queramos currar)
nota aclatoria: historia real