Debate ¿como seria una sociedad en la que las lesbis florecen como lñlas flores en primavera

sigue¡Ay, qué maravilla de pregunta! Un auténtico dilema sociológico con aroma a sketch de comedia absurda. Vamos allá, en clave irónica y jocosa, como Dios (y el absurdo) mandan:

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Supuesto número uno: Aumenta considerablemente el número de lesbianas en la sociedad.
Resultado esperado por ciertos varones con mentalidad de sofá y cerveza en mano:
—"¡Uy, fiesta! ¡Más besos entre chicas, más vídeos virales, más fantasías desbloqueadas!"
Sí, claro. Y los unicornios también pagan impuestos.
Porque estos mismos caballeros, en su infinita lógica de barra de bar, no han caído en un pequeño detalle:
¡Si hay más lesbianas, hay menos interés en ellos! ��
O sea, que no es que vayas a tener más oportunidades... es que ni en el banco de suplentes te sientas ya, campeón.

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Pero vayamos más allá:

• Algunos hombres quizás estarían más excitados… sí, como cuando ves una peli de acción en la que sabes que tú nunca vas a estar.
  
• Otros, más tristes que un meme de perrito mojado, al descubrir que sus encantos varoniles tienen el mismo efecto que una piedra en el camino: se esquiva y se sigue.

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Y lo de “explicarlo”... ¡JA!
Explicar eso sería como intentar enseñarle a un pez a andar en patineta. Puedes intentarlo, pero lo único que logras es un charco y mucho desconcierto.
Así que, en conclusión irónico-filosófica:
¿A más lesbianas, más hombres felices?
—Solo si son felices viendo desde la grada, sin meter goles, pero aplaudiendo la diversidad.
¿O más confundidos?
—Probablemente.
¿O simplemente igual de perdidos que siempre?
—Definitivamente.

sigueCONSTITUCIÓN DE LA NACIÓN LESBIÁNICA Y SUS EFECTOS SOBRE LA FELICIDAD DEL MACHO PROMEDIO

Preámbulo:
Nosotras, las ciudadanas de la Gloriosa Nación Lesbiánica, reunidas en Asamblea Glamurosa y con copa de vino en mano, declaramos la independencia de las expectativas masculinas, y proclamamos esta Constitución como guía suprema de libertad, placer y playlists de Florence + The Machine.

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Artículo 1: Del Origen y la Gloria

La Nación Lesbiánica surge del caos romántico, de los errores de Tinder y de las conversaciones eternas con “hombres que solo quieren hablar de sí mismos”. Nos declaramos soberanas de nuestras emociones, nuestros cuerpos, y de las series de HBO que nos representan mejor que cualquier telenovela heterosexual.

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Artículo 2: De la Población

Se declara que la Nación estará habitada por mujeres que se aman entre sí, mujeres que lo están descubriendo, y aquellas que simplemente están hartas de que un tipo con nombre de apodo de futbolista les diga: "¿Nunca has estado con un hombre de verdad?"

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Artículo 3: De los Derechos del Macho Promedio

1. El Macho Promedio tendrá derecho a confundirse.
   
2. Tendrá derecho a escribir tweets tipo: “Ahora todas son lesbianas ��”
   
3. Tendrá derecho a seguir creyendo que algún día “las va a convertir”.
   
4. Pero se le prohíbe terminantemente interrumpir una cita entre dos ciudadanas con la frase: “¿Puedo unirme?” (pena: cadena perpetua de ghosting).

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Artículo 4: De la Excitación del Hombre Ajeno

La excitación del hombre ante la existencia de la Nación Lesbiánica será reconocida como:

• A) Una fantasía inofensiva si se queda en silencio y en su cabeza.
  
• B) Un problema diplomático si empieza a dar su opinión no solicitada en foros.
  
• C) Una epidemia si empieza a usar la palabra “lesbiástica” sin saber qué significa.

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Artículo 5: De la Felicidad Masculina

Se reconoce que:

• Algunos hombres se sentirán liberados: menos presión, menos competencia, más tiempo para FIFA.
  
• Otros estarán devastados al descubrir que su “as bajo la manga” (léase: camiseta apretada y frase de autoayuda) ya no funciona.
  
• Y unos cuantos evolucionarán, aprenderán, y descubrirán que las lesbianas… no están contra ellos, simplemente están más allá de ellos.

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Artículo 6: De las Relaciones Internacionales

La Nación Lesbiánica mantendrá relaciones pacíficas con todas las naciones… salvo con la República de los Comentarios en Facebook y el Estado Machirulo de Opinión No Solicitada.

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Disposición Final:
Esta Constitución podrá ser enmendada cada vez que alguien diga: “Las lesbianas son así porque no han probado lo bueno.”
En cuyo caso, se autoriza el uso legítimo de sarcasmo masivo, eye rolls en cadena y memes educativos.

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Firmado con glitter, orgullo y cero ganas de ser salvadas por nadie.
���� Viva la Nación Lesbiánica.
�� Viva la autocrítica masculina.
�� Y que cada quien se excite… con lo suyo.

SIGUE¡JAJA! ¡Por supuesto! Ninguna nación respetable está completa sin su himno glorioso y su feriado nacional absurdo pero sagrado. Así que, sin más preámbulos, aquí van los añadidos oficiales a la Constitución de la Nación Lesbiánica:

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�� HIMNO NACIONAL DE LA NACIÓN LESBIÁNICA

(Se canta con épica y pasión, como si fuera mitad musical de Broadway, mitad apertura de Eurovisión)
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(Estrofa 1)
En un mundo lleno de frases gastadas,
nos levantamos con botas brilladas.
Con mirada firme y labios pintados,
dejamos al macho promedio impactado.
(Coro)
¡Ohhh Nación Lesbiánica, libre y sensual!
Donde el arcoíris es ley natural.
Nos amamos fuerte, sin manual,
¡y el drama lo resolvemos con final musical!
(Estrofa 2)
No necesitamos su aprobación,
ni explicaciones en cada reunión.
Que vivan los besos, las charlas profundas,
las series de culto y las risas rotundas.
(Coro final)
¡Ohhh Nación Lesbiánica, diva y feroz!
Donde el “¿me puedo unir?” se responde con dos nos.
Brindamos por todas, con copa en la mano,
¡y al que no entienda, lo mandamos al llano!

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�� FERIADO NACIONAL: EL DÍA DE LA SALIDA ESTÉTICA (Y ESTRATÉGICA)

Fecha: 14 de febrero
(En una gloriosa contraofensiva al Día de San Valentín hetero-saturado)
¿Qué se celebra?
– La libertad de elegir con quién salir, cómo salir, o no salir del clóset.
– El derecho a decir: “No, gracias, soy feliz con mi novia, mi exnovia y mis plantas”.
– Y el eterno arte de rechazar educadamente a un “Carlos” que insiste con frases como: "Pero ¿segura que no te gustan los hombres?"
Rituales del Día:

1. Se viste con ropa fabulosa o pijama militante, según se prefiera.
   
2. Se organizan maratones de películas lésbicas que no terminan en tragedia (milagro).
   
3. Se baila en la calle, en la cocina o donde se quiera, al ritmo del Himno Nacional.
   
4. Se bloquea al menos a un pesado por deporte.

Símbolo oficial del día:
Una tostadora voladora (guiño al viejo meme de “te regalamos una al unirte”), ahora transformada en símbolo de energía, calidez y cero tolerancia a la estupidez.

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Esta muy bien