¿Qué demonios acabo de ver? Con un nombre como Assassination Classroom, uno esperaría algo oscuro, intenso, lleno de violencia y desesperación. Pero no. Lo que te encuentras es una comedia estudiantil tontorrona que parece más preocupada por hacer chistes malos que por tomarse en serio su propia premisa.
Tenemos a un pulpo amarillo sonriente, Koro-sensei, que supuestamente es una amenaza para la humanidad, pero en lugar de aterrar a los estudiantes, se dedica a darles clases como si fuera un coach motivacional barato. ¿En serio? ¿Este es el villano que ha destruido la Luna? Es más probable que me dé un ataque de risa antes de sentir algo de tensión.
Luego están los estudiantes, que son tan carismáticos como un ladrillo. Todos genéricos, planos y con cero personalidad en este primer episodio. Ni siquiera parecen entender la gravedad de la situación. ¿Tienen que matar a un monstruo que destruirá la Tierra en un año y lo único que hacen es lanzar ataques fallidos mientras sueltan chistes malos? La palabra “absurdo” se queda corta.
El tono es un desastre. Assassination Classroom parece no tener idea de lo que quiere ser. ¿Una comedia? ¿Un drama? ¿Un anime de acción? ¿Un capítulo de Doraemon con un poco de violencia light? Todo es demasiado infantil y ridículo para que alguien pueda tomarse en serio la trama, y el humor no es lo suficientemente bueno para justificar el cambio de tono.
El primer episodio es una gran pérdida de tiempo si lo que buscabas era algo sangriento, cruel o siquiera emocionante. Lo único que consigue este episodio es hacerte dudar de por qué estás invirtiendo tiempo en verlo. Una premisa tan interesante arruinada con gags insulsos y personajes sin chispa. Un desastre.
Tachada de mi lista.
