Iniciado por
Taylor Swift
Domingo del empujacarritos:
-A las 7 toca diana. Los críos ya están dando por culo corriendo por la casa y gritando como si les estuviesen degollando, adiós a sus débiles esperanzas de poder dormir aunque sea una hora más. Se levanta dando traspiés, ojeroso y con el cansancio aún acumulado de toda la semana. La Charo ya lleva un buen rato levantada, con cara de mala hostia y unos cuantos reproches preparados que irán saliendo durante la mañana.
-Desayuna bollería industrial mojada en el café de la Nespresso que le costó medio sueldo (capricho de la Charo) mientras Izan y Enzo siguen gritando; sube el volumen de la tele para no escucharlos. El vecino golpea la pared. El empujacarritos suspira y se levanta. Va a su cuarto, se viste lentamente y mira la cama con deseo ante la perspectiva que tiene por delante.
-Como cada domingo de los últimos años, pasará la mañana en el centro comercial esperando de tienda en tienda cada vez que a la parienta se le antoja probarse uno de esos modelitos que hace veinte años que no son para ella. Aún así dos o tres caerán, y como siempre le tocará a él sacar la tarjeta. Con un ojo en las larvas que no dejan de correr y otro en el grupo del whatsapp, no deja de envidiar al soltero del grupo que manda fotos de su barbacoa con los colegas.
-Hora de comer, venga, todos al Mc Donald's. Mientras da cuenta de su Happy Meal mira a su alrededor y su lánguida mirada se cruza con las de otros empujacarritos, en un reconocimiento mutuo de su propia infelicidad. Paradójicamente le reconforta un poco saberse acompañado en su desdicha, pero esta sensación se desvanece al levantarse de la mesa.
-De camino a casa en el SUV blanco de segunda mano sugiere tímidamente que podrían dejar a los niños en casa de su madre y salir al cine y a cenar de restaurante (a un chino con menú), pero la Charo dice que está cansada y que solo tiene ganas de llegar a casa, quitarse los zapatos y tumbarse en el sofá, que los juanetes la están matando.
-Llegan a casa, encierran a los críos en su carto, encienden la tele y ahí se quedan hasta la hora de cenar, sentados en el sofá sin decirse nada mientras miran a ratos el telefilm alemán de la tarde.
-A las 21 se levanta, fríe unos huevos y unos frankfurts del Mercadona y lo engullen todo frente a la tele mientras Jordi Évole le explica que él tiene la culpa de los problemas del mundo. Mira el reloj con ansia. ¡Pronto será la hora de dormir!
-Tumbado en la cama, con la Charo roncando a su lado y la alarma puesta a las 6:30, mira al techo fijamente y una lágrima solitaria resbala por su mejilla. ¿En qué momento su vida se torció así?
Mi domingo como soltero:
-Me levanto a las 11 cuando mi cuerpo lo pide, con toda la calma, plenamente recuperado de la semana de trabajo y del ligero pedo de anoche con los gin tonics que me tomé mientras jugaba al Borderlands 2. Buen juego, sí señor, mucho mejor que el primero.
-Decido que me apetece peli, concretamente hoy tengo ganas de intriga. Pongo a descargar The Clovehitch Killer mientras me preparo el desayuno, me tumbo en el sofá y la veo comiéndome las tostadas y el zumo de naranja recién exprimido.
-Termina la película. ¿Qué hora es? ¿Las 14 ya? Da igual, caliento las sobras de ayer (unas lentejas con carne cojonudas) y me las como mientras foreo un rato. JAjajAj me parto con este hilo, hacía tiempo que no veía una recopilación de memes demigrantes.
-Llega mi compañero de piso de comer con sus padres y salimos un rato con las bicis. Hace un día de los que me gustan, nublados y ligeramente fríos pero que aún invitan a salir. Por el camino vamos parando y aprovecho para tumbar unos gimnasios en el pokémon go. De vuelta a casa paramos a tomar unas cervezas y unas bravas, me siento generoso e invito yo.
-Son las 19 de la tarde, me pongo a trastear con el editor de fotos que estoy aprendiendo a usar y cuando me doy cuenta casi es la hora de cenar. O no, eso lo decido yo. No tengo mucha hambre y me hago una ensalada rápida que como mientras veo un vídeo de Mister Jagger.
-Ha sido un buen día, voy a compartirlo en en foro. ¿Por qué no?
-Me dispongo a cerrar el ordenador y me tumbaré en la cama a leer hasta que me venza el sueño, que como esta semana trabajo en el turno de tarde será a las 3 o las 4 como muy pronto.
-Una sonrisa se dibuja en mi cara ante la perspectiva. A veces la vida puede estar bien.
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