Historia es Destino. Porque la Historia es la Biografía de los pueblos. Una mañana cualquiera en Europa, surgirá un enano con las ideas claras y asco inmenso por la situación de un país que, pudiendo ser grande, está infestado de las tres grandes mierdas que son la corona, la iglesia y el comunismo. Un país que otrora fué un imperio y que, ahora mismo, es el bidé de Europa. Negros, moros, gitanos, chinos, pakistaníes, indios, putas y maricones. Y suma y sigue... Ese es el actual lobby de " matemos a la gallina de los huevos de oro". Étnicos campando a sus anchas con un pueblo, el nuestro, genuflexo, sometido y hasta despreciado.

Historia es Destino porque los vecinos son determinantes. Los norteamericanos tienen a los asequibles Canadienses al Norte y a los nada amenazadores Mexicanos al Sur. Inglaterra es una superisla en el Atlántico Norte con muy poco vecindario. El que les entra, lo controlan. La Alemania de Hitler tuvo que lidiar con vecindario extenso. Polonia fué puta por decreto de su ubicación. Y nosotros tenemos un lugar importante en la geoestrategia. Pero un poder que no se usa se vuelve contra uno, porque lo que no avanza retrocede.

Es la hora, queridos hermanos, de desvincularnos. De asesinar a la familia real, al perro rojo de mierda y de callarle la boca de una vez a esa ramera adaptativa que es la católica. Amén, y nunca mejor dicho, de todos esos grupúsculos de advenedizos de iglesias de sudamérica. Que quieren convencer como mercado a un pueblo que ya está curado de espanto de lo divino.

Es el momento, hermanos, de volver a ser lo que fuimos. De mandar negros, marrones, amarillos y cetrinos a mamarla a sus respectivos países. Cualquier iniciativa vale. Desde el simple gesto de negar un alquiler a un extranjero o de mandarle en dirección contraria al lugar por el cual nos ha preguntado hasta cosas mayores como quemar mezquitas y pegarle el tiro de gracia a uno de sus embajadores. Tenemos tecnología, cultura, paciencia, metodología y visión de conjunto. Tirar cabezas de cerdo es un gesto. Pero meterle fuego o explosivos a sus lugares de culto, mucho más.

No hace mucho, tan sólo unos dias, escuché a un grupo de gallinitas jóvenes decir: " no, moros no; negros sí". Reían entre ellas mientras hablaban de étnicos como posibles infestadores de sus matrices al servicio de la putrefacción genética de España. Tal es el talento de la mujer, que piensa que el doberman no le morderá por silencioso frente al más ladrador pitbull. Han hecho una política con el coño. La aldea global es la destrucción de la cultura y de nuestro país. La solución es la violencia contra lo que ha entrado y la expulsión. Eso incluye a los rojos y a la puta corona de los borbones. No nos toman en serio. Pero lo harán. Joder que si lo harán.

en vuestras manos, y en las mías como uno más, está la solución