Hilo dedicado a Manuel Vázquez

Hace poco estuve viendo la película "El Gran Vázquez", protagonizada por Santiago Segura y basada en la vida del dibujante e historietista Manuel Vazquez Gallego más conocido como "Vázquez". La película no está nada mal, pero lo que me sorprendió es que hubiera realmente alguien que pudiera vivir así, al margen de todo, debiendo dinero a todo el mundo, con engañifas y en definitiva, riéndose en la cara de la sociedad de su tiempo.




Manuel Vázquez Gallego (Madrid, 1930 - Barcelona, 1995) fue un historietista cómico español perteneciente a la primera o segunda generación de la Escuela Bruguera, sin que haya un consenso total entre los especialistas sobre su adscripción. Sus series más famosas son Las hermanas Gilda (1949), La familia Cebolleta (1951) y Anacleto, agente secreto (1965).






La vida de Vázquez está envuelta en una leyenda que él mismo y sus conocidos contribuyeron a forjar. No en vano, creó la serie "Los cuentos del Tío Vázquez" donde presentaba una visión exagerada de sí mismo. Vázquez tampoco se tomaba en serio las entrevistas y afirmaba por ejemplo que sus abuelos habían sido sastres de la Casa Real, aunque al parecer estos eran realmente los antecedentes familiares de su mujer Aurora y no de él. Vázquez afirmó también que se casó en siete ocasiones. La primera de ellas -y probablemente única- fue con Aurora Medrano; vivió con ella tres años en un hotel en Barcelona e intentó recuperar la relación en sus últimos años de vida. Con esta y otras mujeres tuvo 11 hijos; el menor de ellos, Manolito, trabaja en el mundo de la historieta como rotulista en Ediciones Glènat. Afirmaba que estuvo tres veces en la cárcel, una de ellas por bigamia, aunque por poco tiempo (la condena más alta fueron de seis meses). El crítico Antoni Guiral afirma, sin embargo, que no existen datos sobre la posibilidad de que haya sido encarcelado.



Vázquez fue siempre irreverente, marginal, bohemio e ideológicamente anarquista. Su falta de disciplina le privó de lograr un mayor reconocimiento popular. Siempre atravesó problemas económicos, de los que salía con un descomunal talento para el sablazo y un ingenio fuera de lo común, y de lo que siempre se sintió orgulloso.


Aquí vídeo de una entrevista sin desperdicio alguno:

Aquí el "entierro" a sus personajes de cómic:

El reencuentro

En definitiva, el puto amo

De pequeño leí muchos tebeos y revistas de burguera y ediciones B que llegaban a mis manos, y así conocí a muchos de sus personajes y a él mismo, que solía caricaturizarse en sus historietas. Vázquez se retrataba a sí mismo como un jeta de mucho cuidado, una genialidad.



Se tendría que reivindicar la cultura del tebeo de este país. Hubo mucho grande y a día de hoy se ignora.