Iniciado por
Manolo the Boss
Yo tiraría por el francés. Además, como bien apuntan varios, verás bastantes similitudes con el catalán a nivel léxico (finestra/fenêtre (ventana), cosí/cousin (primo), nebot/neveu (sobrino), llit/lit (cama), esquirol/écureuil (ardilla), cama/jambe (pierna), res/rien (nada)...) y a nivel gramatical (ambos usan la doble negación: jo no sé pas/je ne sais pas (yo no sé) y ambos tienen pronombres adverbiales: hi y en catalán; y y en en francés. Lo más jodido es la fonética, pero a base de práctica, va saliendo.
Hay un shur que dice que el italiano es más sencillo aún, pero yo no lo tengo tan claro. En similitudes léxicas y gramáticas está bastante parejo con el francés en relación al catalán y la fonética es más sencilla (de hecho, es casi calcada a la valenciana y catalana occidental), pero tiene sus complicaciones, como es el caso de los plurales, que son vocálicos: mano -> mani (mano y manos), donna -> donne (mujer y mujeres), uomo -> uomini (hombre y hombres), scatola -> scatole (caja y cajas)... y si acaba en vocal tónica, el plural no varía: università -> università (universidad y universidades).
Otra complicación del italiano es el artículo masculino: siempre es il (el), excepto si la palabra es masculina y empieza en vocal o en S+consonante y W, X, Y y Z, que entonces es lo, y si empieza en vocal, se elude la O (y la A en el artículo femenino), es decir:
-Se dice il pomodoro (el tomate) y el plural es i pomodori (los tomates).
-Pero no se dice il squalo, sino lo squalo (el tiburón), y el plural es gli squali (los tiburones).
Y hay algunos detalles más que hacen que el italiano, aún siendo fácil, sea más difícil de lo que el castellanohablante medio cree.
Conclusión: por mayor utilidad y por similitud, recomiendo el francés. También podrías tirar por el portugués, que es romance también, pero le veo más utilidad al francés a día de hoy, por mucho que el portugués se hable en Brasil, que es un país que promete mucho, pero que aún no es nada en comparación con Francia, país, éste último, cuya lengua te sirve para muchos más países (Francia, Suiza, Bélgica, Canadá y media África, principalmente, además de ser el tercer idioma más estudiado como idioma extranjero en el mundo, después del inglés y el castellano).