Resumen tio
Tengo dos angelitos de la guarda. Aunque las espaldas me las guarde yo, ellos me ayudan con su sabiduría desde el Pasado. Con sus consejos tengo todas las respuestas. Uno se llama Adolfo. El otro Alberto. Y aunque parecen como la noche y el dia, tienen mucho en común. Ambos son reduccionistas, unificadores y anhelaron el poder. Para lo que vivieron grandes, incompletas y malsanas vidas. Pero por encima del común de los mortales. Lo que los llevó a atravesar las cortinas del Tiempo.
Uno me dice que para brillar como el sol, primero tienes que arder como él ( astro rey). Otro me dice que no puedes engañar a la naturaleza pero sí ponerte de acuerdo con ella. Sangre para lo mundano y lamida de coño a la madre natura para ponerla a gemir. Parecen caminos incompatibles. Pero es tan sencillo como vislumbrar la ruta y recorrer luego los tramos correspondientes a cada momento.
En éstos putos tiempos conservadores que vivimos la moda de la guerra común no deja ver la vanguardia. La verdadera guerra sería la del individuo contra todos los demás. Eso no está al alcance de un Putin, condicionado por sus generales y comandantes. Algún esbirro menor le dará el disparo de gracia en su momento. Tampoco está al alcance de los científicos actuales. Que tras publicar libros de ciencia paradójica para hacer fama y dinero, terminan lamiendo sí. Pero bajo los faldones del Dalai Lama.
Hay otra analogía interesante. La que se puede establecer entre las carreras armamentísticas y las teorías científicas. Como no es posible ponerse de acuerdo con la Sociedad ( pero sí engañarla), el camino contra lo social no puede ser el entendimiento. Las armas y las estrategias correlacionan con los conceptos y las teorías. La maldad y el peligro ensanchan la mente. Wittgenstein, Newton, Heidegger... todos esos eran adictos a la soledad en una cabaña o choza abandonada de la mano de Dios. Porque conocer es pecar. Y la inmoralidad se lleva mejor en soledad.
En un nivel muy alto del armamento, el arma definitiva sería el control del campo volitivo ajeno. Lo que nos llevaría a las suaves praderas del engaño. Igual que existen fuerzas físicas, las hay psíquicas. La hipnosis a distancia, que hoy en dia está al nivel de las muñecas para follar del siglo pasado, no tardará en alcanzar un nivel de estado del arte. Si controlas la voluntad ajena, lo tienes todo. Convencer al prójimo enemigo para que cruce la calle sin mirar. Convencer a la prójima de que tiene un deseo ( como propio suyo, natural y tal) de acostarse contigo o de darte los bienes familiares. Incluso ordenar a los mosquitos que se suiciden volando directos a la charca...
La guerra colectiva se basa en idealismos trasnochados. Ya no se estila el nacionalismo furioso con su correspondiente rapiña y violación de los derechos del enemigo. ¿ Y qué soldado puede luchar sin esa brutalidad?. Tan sólo un vegetariano como el General Ursus es capaz de mantener una dieta correcta. Pero masacrar y violar son las mejores cosas de la vida. Pretenden una guerra observada internacionalmente y depurada de las bestialidades de la emoción del odio. Matar sin odiar es complicado. Matemos en nombre del Logos. Y que sean ellos mismos los que se salten las tapas de los sesos...
Última edición por Mr Jo; 07/03/2023 a las 09:55
la violencia precisa de un acomodo* sostenible más que de una negación directaEl mensaje está oculto porque el usuario está en tu lista de ignorados.
* ya veo venir el chiste
No añadiré nadaEl mensaje está oculto porque el usuario está en tu lista de ignorados.