se me da mal hacer arte. Pero bien analizarlo. Si lo piensas, raro es el arte que no dependa de una transformación sucesiva. Cuando Alejandro Sanz dice eso de ya lo ves que no hay dos sin tres y que la vida va y viene. Está usando fraseología al uso. Pero luego adiciona, lo hace de forma bella, compone y canta. No existe un arte desde cero realmente. Como lo prueba que el video de Guetta-Rowland tiene el mismo sample de piano que el de Coldplay. Al final todo son variantes. ¿ Donde menos se dan es en la ciencia?. ¡ Incluso allí!. Quizás de manera menos evidente. Un ejemplo son las ecuaciones sobre electromagnetismo. Hay analogías, similitudes, simetrías... Alguno podría afirmar que son verdades sobre el mundo que esconde una simetría. Pero son verdades parciales sobre el mundo que reflejan nuestra necesidad de simetría. Y esa simetría se rompe. Como sucede con la gravedad. La interacción depende de la distancia y ya no es el cuadrado sino la tercera, cuarta, quinta... potencia...

Ya se trate de lograr algo bello o algo útil, que lo haga significativo es que tenga simetría perfeccionada por alguna operación de combinación, adición jerarquizada, sustracción o ausencia, deformación o error, quizá incluso por inesperado. Así existe relación silogística entre sincopado ritmo y ruptura de cohesión.

Sólo es imaginable un creador en la medida que interpretador. Porque no hay origen ni final verdadero. Sólo transformaciones. El creador las parcela y combina para entender o dar a entender.