
Iniciado por
Peter Turbo
Todavía estoy en shock.
Tengo más de 30 años y llevo independizado aproximadamente una década. Vivo fuera de mi comunidad autónoma y lo que he vivido ayer me ha revuelto las tripas hasta el punto de que no se como me va a afectar psicológicamente o las decisiones que voy a tomar a largo plazo.
Mis padres, ambos con más de 60 años se han divorciado hace unos meses. Simplemente se han cansado uno del otro pero se llevan bien.
Mi padre vive ahora con mi tío, que también está divorciado y como son hermanos y les gustan las mismas cosas pues no se queja. Van a pescar, ven el fútbol o fabrican alguna mierda con palets que consiguen por ahí y que luego empiezan a intentar encasquetarle a la gente. Que si mesitas, bancos de trabajo o cuadros. Le digo que no quiero esas historias y me dice que queda muy industrial. Mis cojones.
Mi madre vive en lo que fue "nuestra" casa toda la vida. Nunca trabajó fuera de lo que es ser ama de casa y ahora se mantiene ya que la casa está pagada y los gastos de suministros los sigue pagando mi padre, ya que la casa está a nombre de él. Además le da una paga voluntariamente de 500€ para sus cosas ya que el no los necesita y tampoco es de salir ni de tener muchos gastos como os he comentado.
Dicho esto para poneros en situación, viene el show.
Llego ayer de visita y empiezo a ver cosas raras, pero sin entender muy bien o a darme cuenta. Como detalles sin importancia pero que al final tienen conexión... Y tanta...
Primero veo un chisme con incienso como muy morube. Olía la casa como una tetería del barrio de granada. Mi madre nunca fue de poner incienso. Con el humo del tabaco siempre fue suficiente.
Lo siguiente que no me cuadró en absoluto fue que cuando llegué a lo que era mi habitación, y que sigue siendo en cierto modo, ya que está decorada tal y como la dejé, es que veo una alfombra como hecha un turulo en el suelo.
Mi madre siempre fue de cambiar el color de las paredes o ciertos detalles cada un par de años, así que aunque en ese momento no me cuadró del todo ver eso ahí tampoco le di importancia.
Dejo las cosas y voy a presentarme en condiciones. Hola madre, qué tal, como va todo, ya tenía ganas de venir a verte a ti y a papá, pero a él le veré mañana (osea hoy).
Me dice que bien y que está cambiando algunas cosas de su vida, que ya me contará en la cena.
Le digo que guay, que cambiar para mejorar siempre es algo bueno, mientras abro la nevera para cogerme una birra.
Abro la nevera y no hay.
-Vaya, no hay cerveza, iré a por un vaso de vino entonces.
-Ya, es que desde que no vive aquí tu padre ya no la compro y yo como no me la bebo.
Y vino no se si quedará, igual hay alguna de esas que compraste la última vez, pero están guardadas dentro del banco del salón.
-Ah, vaya. Oye y cómo es que ahora las guardas ahí? Si están como muy a desmano, ese es el sitio de las mantas y las cosas así, no?
-Bueno es que como yo no lo bebo...
-Da igual, tampoco es ningún drama. Por cierto, qué vas a hacer para cenar?
-Pues unas patatas alioli como te gustan y un par de filetes de ternera.
-Y las patatas son con jamón frito como siempre? Sabes que unas patatas sin jamón y huevos no son lo mismo.
-No, hoy no hay jamón, lo siento.
-Y salchichas?
-Salchichas tampoco.
Me voy a caraperro a ver un poco el tv y llega la hora de cenar. Me llama y voy a la mesa, observando que hay un plato más de la cuenta.
-Quien viene? Viene padre? Como os lleváis bien...
-No, viene un amigo que quiero que conozcas, y más te vale que te portes en condiciones, porque se como eres y no quiero discutir contigo, encima de que no te veo nada.
Me cago en la leche... Me va a tocar conocer al que se folla a mi puta madre. Ya me empiezo a poner nervioso.
Pican a la puerta y ella suelta un escueto "es él".
Y entonces entra por la puerta un mandingo de unos 40 años negro como los cojones de un burro y dice:
-Hola, soy Hakim.
Y me quedo paralizado. Mi cerebro empieza a unir cables. El incienso, el vino escondido, el jamón...la puta alfombra.
Y suelto murmurando con preocupación:
-Qué cojones está pasando?
Mi madre se echa a llorar diciendo que sabía que no lo iba a comprender y yo me pongo histérico y digo:
-Como va a salir bien si hay un fulano en mi casa y una puta alfombra en mi habitación!!!!!!
-Eh, un respeto a tu madre y a mi alfombra, que es para rezar y mi religión es muy importante para mí.
-Cabrón tu religión métela en tu puta casa y no en la de los demás, que ahora aquí no hay ni una cerveza ni un jodido trozo de jamón.
Ahí ya estaba histérico y es cuando el dice:
-Pero si yo vivo aquí, gilipollas!
No le pegué. Se me saltaron las lágrimas de los ojos y miré a mi madre, que estaba llorando. La miré a los ojos y dije:
-Que clase de madre mete a un negro en casa y le quita la comida a un hijo.
La pobre lloraba y era casi inentendible y me dijo:
-Es que me sentía muy sola...
Me fui de un portazo. Llamé a mi padre y no me lo cogía. Estaría pescando con mi tío y el teléfono en el coche, como siempre.
Así que fui al hotel más asqueroso de la zona y cogí una habitación. Pensaba que iba a calmarme y a asentar ideas, pero no ocurrió nada.
Hoy fui a ver a mi padre para contarle la situación.
Tras contárselo todo el muy sudas va y me dice:
-Pues Mira a ver si le llevas la mesita esta que hice con un palet, que me está ocupando mucho y así se siente como en casa.
Le miré con odio infernal, y me fui.
Y ahora os lo estoy contando.
[/LIST]