Totalmente cierto. No fake. Llevaba sin follar, sin probar, sin palpar, sin oler y sin mirar un higo de fruta desde hacía meses. Admito que muchos.
Todo empezó cuando me dirigía al centro, donde mis amigos y yo habíamos quedado para tomar algunas copas con su correspondiente tapa. (Un martes
)
Conforme iba pasando la noche, avisaron a mi colega por el móvil de que se iban a pasar su novia y un par de amigas para tomar algo porque tenían
ganas de salir y despejarse ya que están en época de exámenes. Hasta aquí todo normal... pero OH WAIT!! VINIERON 3 PERRAS. Mujeres de verdad, de carne
y hueso, no como esas que ves por la tele o esas diosas con un pene que ya quisiéramos nosotros.
Al final resultó que le molé a una, que ya me habían visto de antes por fotos y tal y pues empezamos a hablar, a bailar, a coquetear, y tras estos acontecimientos yo empecé a ponerme nervioso, a empalmarme, a ponerme con los ojos como un búho y a apretar los dientes mientras la muchacha estaba más suelta que las del Conforama. Hija de puta que niña mas guarra Manolo
Todo esto acabó en que nos fuimos a la casa: Mi colega y su novia, mi perra y servidor.
Después de tanto tiempo, mi pequeña máquina de coser todavía tenía algo de utilidad y agradeciendo a Dios, me empalmé. Pero me empalmé de forma natural,
supongo que cuando la polla ya no aguanta más, tiene que salir cual catalejo de submarino. Todo esto, por supuesto, sin utilizar ningun tipo de estimulante anal,
ni viagra ni la famosa brida en la base del tronco de la polla.
Y poco más shures, le metí unos cuantos viajes por aquí y por allá, unos cuantos jopazos por el este y el oeste y a dormir. Todo esto mientras cerraba el ojo izquierdo, no sabía por lo que hacía pero me daba las suficientes fuerzas para seguir adelante
La muy hija de puta no se limitó ni a comerme la cabezona.
Resumen: Anoche descubrí que tengo el ojo pipo cuando follo.