panzerismo

Somos civilizados para todo lo que haya que serlo. Pero en donde no, arrasamos. Estamos deseando ser animales. Al punto de que incluso, si nadie mira, somos animales en donde no deberíamos.

Homo sapiens sapiens mató a cien millones de los suyos propios el siglo pasado. Cuando te dicen que en el Pleistoceno éramos sapiens, neandertales, un grupo poco conocido llamado denisovanos y una cuarta población aún por determinar SÓLO PUEDES CONCLUIR QUE LA MEZCLA NO DILUYÓ LO SUFICIENTE. Taitantos miles o millones de años después seguimos CASI humanos. Pero todavía no.

La gente cuando alcanza el poder económico se entrega al placer y se compra bestias agresivas para demostrar poderío. Nadie le dá por hacerse ermitaño y tratar de desentrañar los secretos de Dios. Mmm...¿ Dije nadie?. ¡ Bueno!, estadísticamente casi nadie...



Y es que el final de la aventura humana se sitúa en la parte alta de los peldaños mundanos que se recorren con la manu militari de imponerse físicamente a los demás. Otrora eran sueños como los de Gengis Khan, Napoleón o Hitler. Pero ahora la gente se lo toma como dijo Groucho: " una pequeña mansión, una pequeña fortuna...". Incluso los que recorren los peldaños celestiales de la escalera de poder, con vehemencia mental de entender la naturaleza, y ponerse de acuerdo con ella mediante conceptos, caen en ese error. Y se agasajan con experiencias mundanas disfrazadas de cultura como viajar.

Nadie parece tener, una vez capitanes del ejército o doctores de la academia, ganas de jugar a saltarse la barrera de la inmanencia. Para eso existe el stop metafísico de Dios " no pensar". Ya sabe usted: " Dios sabrá". No especulan los guerreros porque eso se lo dejan a los pensadores ( aunque los mejores pensadores eran muy guerreros en la medida que anacoretas y ermitaños castos y castros) y no especulan los pensadores porque especular es señal de debilidad platónica. Y el platonismo debe ser escondido a toda costa.

Así el mundo es siempre un retorcerse sobre el fango primordial. El niño jesús nace en un portal con vaca, burro y buey. Drácula tiene colmillos. El Allien tiene colmillos de lamprea y para encontrar un ser literario con algo de distanciamiento de lo celular biológico sólo nos queda el ente que incuba sucubos en las chicas solitarias.

El referente animal que nos constituye no se lo salta nadie. Para hacerlo sólo es posible distanciamiento. Y distanciarse es riesgoso. Los intelectuales están prevenidos de tratar con entelequias. Los guerreros las manejan en forma de valores morales. La naturaleza no nos deja diferenciarnos de ella.

todo aquel que pretenda y luche por algo diferente a lo que es " en sí" la vida sea tomado como héroe

* Pretérito del verbo diluir, reducir un soluto al disolverlo en un disolvente