Iniciado por
AdolfHipster
He pensado en escribir un pequeño artículo sobre el tema "Estar solo vs. sentirse solo" a partir de la magistral chorrada que impunemente ha posteado el OP. Espero que muchos lo leáis y os sea útil. No es mi intención animaros a abandonar a vuestros amigos y familia, lo único que intento es hacerles la existencia más llevadera a aquellos que han tomado o están tomando la Pastilla Roja, cuyo sabor puede ser ciertamente amargo al principio. Creo que una de las cosas más difíciles de tomar la pastilla roja es saber cómo enfrentarse a ciertas necesidades fisiológicas (aquí no os puedo ayudar) y el miedo a la soledad.
Todo está en tu cabeza
"Estar solo requiere fortaleza, y depender de la presencia de otros es una debilidad. Un hombre que necesita a una masa de gente para sentirse bien consigo mismo está mucho más solo de lo que se imagina". - Paul Brunton
"Los grandes hombres son como las águilas. Construyen su nido en soledad". -Arthur Schopenhauer
¿Cuál es la diferencia entre estar solo y sentirse solo? Por si no estuviese lo suficientemente claro, imagínate a dos hombres viviendo solos en el bosque. Su entorno y circunstancias son exactamente las mismas, pero uno de ellos está solo, vive y disfruta su vida, mientras que el otro se siente solo. ¿Puedes ver la diferencia? La única diferencia está dentro de su cabeza.
Una persona que se siente sola se siente así porque necesita de la validación externa y se define a sí mismo mediante su interacción con otras personas: se preocupa de lo que estas personas piensan de él. Su autoestima, felicidad y autorealización dependen de factores externos. Toda felicidad que dependa de factores externos es frágil y temporal, con lo que solo puede derivar en desilusión.
Una persona que escoge estar sola encuentra validación en ella misma y se define a sí misma mediante su propio conjunto de creencias y valores. Disfruta de su propia compañía, y ha aprendido a apreciar la tranquilidad de estar solo consigo mismo. Su autoestima , felicidad y sentido de la autorrealización se definen mediante factores internos. Por ejemplo, si valora cosas como la honestidad y cree que está siendo deshonesto se cambiará a sí mismo para su propio beneficio y estar en paz consigo mismo en lugar de hacerlo para satisfacer a los demás.
Programado para sentirse roto
"Cada hombre es su propio mejor amigo y tiene el deber de amarse al máximo y disfrutar de su privacidad, allí donde otros hombres sin habilidad o virtud están aterrados de la soledad y son sus peores enemigos". – Aristóteles
"El amor es una grave enfermedad mental". - Platón
¿Cómo llegaron los hombres a esta situación? Fácil, se les hizo creer que estaban rotos o incompletos cuando se encuentran perfectamente desde el principio.
Los medios le han infundido al hombre la creencia de que el amor y una relación con una mujer es lo más grande que puede conseguir. Su bienestar físico y emocional se sacrifica en la búsqueda del amor. Hoy en día es muy extraño encontrar una película sin una trama secundaria romántica, y de hecho el argumento de la gran mayoría de películas trata sobre encontrar el amor. Este bombardeo constante ha creado generaciones enteras de hombres que se sienten insignificantes porque nadie los ha amado nunca.
¿Cuántas veces he escuchado a los hombres decirle a su pareja "tú me completas"? Esta declaración pone de manifiesto que este hombre se ha vuelto adicto a esta mujer, la necesita por encima de todas las cosas. A las mujeres les encantan semejantes comentarios porque les hacen sentirse importantes, igual que un anillo de compromiso caro se utiliza para justificar todo lo que ella "vale".
Los hombres de hoy se sienten rotos, perdedores, incompletos o patéticos porque los valores de la sociedad han cambiado, pero ellos no. Los hombres de hoy todavía valoran cosas como la virtud, la honestidad, la lealtad, la capacidad, la inteligencia y el coraje. La sociedad actual y las mujeres ya no valoran estas cosas, lo que importa es el materialismo, el consumismo y el placer o la satisfacción inmediata. La prueba está en cuantas mujeres admiran a Paris Hilton. Así que como resultado tenemos a un gran número de hombres preguntándose "¿qué coño pasa conmigo?", cuando en realidad deberían preguntarse, "¿qué coño pasa con ellas?".
Poco a poco
"Solo hay un camino hacia la felicidad, y ese es dejar de preocuparse de cosas que no dependen de nosotros.” – Epicteto
"No estropees lo que tienes deseando cosas que no tienes, recuerda que lo que ahora tienes perteneció hace tiempo a cosas que una vez deseaste". – Epicuro
"El secreto de la felicidad es la libertad. El secreto de la libertad es coraje”. – Thucydido
"La soledad es dolorosa cuando uno es joven, pero deliciosa cuando se es maduro". - Albert Einstein
Cambiar tu forma de pensar no sucede de un día para otro, lleva tiempo y esfuerzo. Pero es algo que los hombres deberían valorar más, el tiempo es aliado del hombre y enemigo de la mujer. Los hombres comienzan la carrera de la vida siendo menos felices pero van ganando en felicidad conforme van madurando, mientras que para las mujeres esto es al revés.
¿Por qué sucede esto? Porque mientras que el hombre madura, las cosas que antes le preocupaban dejan de parecerle importantes. Su conocimiento de la vida va mejorando y se vuelve más sabio. Las mujeres sin embargo han construido su vida apoyándose normalmente en factores externos y su felicidad depende por lo general de la atención que reciben, las cosas que consiguen a cambio y lo atractivas que son físicamente. Irónicamente estas tres cosas están interrelacionadas, a medida que pasa el tiempo y envejece, menos gente se interesa por ella porque su aspecto comienza a deteriorarse y por tanto va recibiendo menos "regalos" en su camino. Lo único que les queda al final es una personalidad amarga y un terrible sentido del porqueyolovalguismo. Por el contrario el futuro de los hombres mejora con la edad.
Aprender a disfrutar de la soledad requiere de coraje. Es duro cambiar tu manera de ver las cosas cuando te han programado desde la infancia a pensar de una manera concreta, pero puedes tomar estos puntos como referencia:
1. Aprecia lo que tienes. Recuerda que el mundo no te debe nada, por tanto todo lo que tienes, todo lo que posees, tu seguridad, el hecho de que estés vivo, etc. son cosas que tienes que valorar y apreciar. Nunca olvides que la hierba no es siempre más verde al otro lado, y por cada persona que desea estar casada, hay legiones de hombres casados que desearían no estarlo. La libertad y la soledad son dos cosas que muchos hombres solteros no aprecian realmente hasta que las pierden.
2. Disfruta todo lo que puedas. El mundo puede ser horrible, pero también puede ser un lugar maravilloso. Hay muchas cosas que este mundo te puede ofrecer y otras muchas que un hombre soltero puede llevar a cabo. Hay tantos lugares a los que viajar, comidas que disfrutar, vinos que saborear, cigarros por fumar, motos o coches que conducir, hobbies que realizar... la lista es interminable. Piensa sobre las cosas que te gusta hacer y hazlas.
3. Cuídate. Esto tiene que relación con el punto anterior. A los hombres se les han inculcado desde pequeños que tienen que sacrificarse por los demás. Aunque esto es algo muy noble, hay que recordar que en la sociedad de hoy a nadie le importa un comino el bienestar de los hombres. De hecho la persona que más tiene que preocuparse por ti eres tú mismo. Así que estudia / trabaja, invierte, ahorra, aliméntate bien y haz ejercicio. Encuentra ese equilibrio entre trabajo y diversión.
4. Sé feliz contigo mismo. Ésta es quizás una de las cosas más difíciles de llevar a cabo. Aprende a ser feliz por ser quien eres, no dependas de los demás (especialmente de las mujeres) para tu autoestima. Recuerda que nadie es perfecto, todos tenemos defectos y todos tenemos también fortalezas y virtudes. No te compares con otros o dependas de su juicio (a no ser que sea una crítica constructiva). Tú tienes tus propios valores y creencias, y mientras tú consideres que son congruentes con tu persona entonces sé feliz contigo mismo. Y si necesitas cambiar, hazlo porque tú lo creas oportuno, no para satisfacer a otros.