Oligofrenia o síndrome arcaico anormaligofrénico (del griego poca mente) o frenasténico es el término en desuso que se le daba antiguamente a la discapacidad intelectual grave causada por el desarrollo atípico de la inteligencia a muy corta edad. Dependiendo del nivel de incapacidad, se clasificaba en cuatro tipos, pero es una clasificación arcaica ya no aceptada, en la que muchos de los términos son peyorativos (véase discriminación):
Idiota: Incapaz de comunicarse, sin actividad física, imposible de educar. CI no superior a 30.
Imbécil: Incapaz de leer o escribir. CI no superior a 60.
Morón: Autosuficiente en las tareas manuales y con cierto desarrollo de memoria, pero sin la capacidad para desarrollar abstracciones mentales. CI no superior a 90.
Idiot-savant (literalmente "sabio-idiota", en francés): Autosuficiente para tareas manuales, aunque carente de criterio. Puede llegar a hilar 4 palabras seguidas, aunque no se le llega a entender. Hay "savants" no oligofrénicos, relacionados con el autismo y algunos pueden presentar algunas habilidades intelectuales en un grado sorprendente de desarrollo.1