Mi diario personal, capítulo I.

Primer revolcón (1983)

Estando un lunes de aguas de borrachera con la edad de 14 o 15 años, me dijo un parroquiano que le gustaba a otra parroquiana por nombre de Ascensión, hija creo que de un militar y me enrollé con ella dándonos un revolcón. Cuando se me pasó la borrachera me olvidé de ella y esto supuso el detonante para que los hijos de perra de los parroquianos me hicieran la vida imposible riéndose continuamente de mí, sabiendo como sabían que me estaban envenenando.

Luego vino la relación con la putilla María Isabel Hernández Vicente que me miraba a los ojos como si viese a un loco. Así trabajan la mente. No quería ir de la mano conmigo y evitaba mis arrumacos diciendo que le dolía la espalda. Decía que tenía gafas tóricas para el estrabismo de ahí que pretendan dejarme ciego.

Espero que tu diario acabe asi:

e decidio acabar con esto, no soporto mas el odio de las personas ni el sentirme tan solo por las mañanas y por las tardes. A los usuarios de foroparalelo no les importan mis problemas asi como a mi familia. Este es el fin de mi efimera existencia en este mundo