cuando hace un milenio y tres siglos antes de Jesucristo se inventó el maniqueismo, amparado en un Dios moral llamado Ahura Mazda, se inició una leyenda como la del Dorado. algo buscado infructuosamente por muchos:
la leyenda del héroe
el protohéroe de zarathustra el profeta es de orden moral. El mazdeismo distingue la condición bueno/malo como regla básica del juego. Y pese a ser en su momento una evolución en lo religioso, constituye un modelo primitivo de contemplación de la vida
la liberación de Nietzsche es la liberación de la voluntad. Que ya no es prisionera sino del propio deseo y al margen de cualquier otra consideración institucionalmente impuesta
por desgracia seguimos en la cultura del héroe. Una moral laxa basada sólo en la propia supervivencia e interés genera un tipo no-querido, no-apreciado, de antihéroe que no es valorado socialmente. Aunque admirado en secreto
el éxito precisa incluso de contradicciones con uno mismo
la mayoría de vosotros está podrida ¡ oh hipócritas! pero seguíis valorando al héroe clásico que no se deja corromper!.
Deseáis y anheláis como hembras.