El Duque de Bedlington

Desde aquel canis lupus hasta el perro actual, la selección artificial por la mano del hombre ha logrado modificaciones increíbles en el modelo original.



Para los pastores o para las mujeres con necesidad de una mascota-peluche, existen numerosas razas de perros con un parecido grande a la oveja. Un perro parecido a la oveja puede tener utilidad para ejercer de perro integrado o camuflado en el rebaño. También puede ser simplemente el horripilante capricho friki de una ricachona jugando a tener a la hija perfecta a la que putear con sesiones inacabables de peluquería para la señorita... El ser humano ha logrado cosas inauditas jugando con los cruces. Como también ha logrado bestias de matar como el dogo argentino.

Ahora viene la pregunta: el señor, o señorita, Bedlington ¿ es perro u oveja?. Me supongo que alguno dirá que esa mariconada no merece la consideración de perro sino de puta asquerosa oveja o ni tan siquiera eso... Pero lo esbozaré de otro modo:

ganáis 1 millón en el concurso

a) oveja
b) perro
c) elefante
d) extraterrestre

¿ comodín del público? ¿ comodín de la llamada? o simplemente decir la correcta...

Es un perro. Y punto.

pero... si la pregunta para el millón fuese:

¿ qué es Daniela Santiago?



a) hombre
b) mujer
c) elefante
d) extraterrestre

si dáis la respuesta científica correcta os arriesgáis que os la den por incorrecta por contradecir la solución correcta por la vía de la disposición legal que se enfrenta al sentido común.

es decir: existe una diferencia entre la realidad científica y la percepción social de la realidad. Que se ajusta por conveniencia de leyes y de modas. Y todo ello sobre la base de que, realmente, incluso la realidad científica no deja de ser un constructo en sí mismo. Pero si se determinan unas bases para la interpretación:

cromosomas XX mujer
cromosomas XY hombre

entonces, caso de mantener ese marco es imposible suscribir ejemplares por simple arbitrio.