Historia El Islám invade Francia, año: 732
-
ForoParalelo: Miembro
El Islám invade Francia, año: 732
En el año 732 una fuerza islámica invade Francia. Le sale al paso una hueste franca a las órdenes de Carlos Martel -mitificado tras la Batalla-. En la batalla de Poitiers los cristianos derrotan a los mahometanos. Algunos dicen que es una de las batallas decisivas de la historia mundial, dado que impidió que Europa pasara del cristianismo al islamismo.
A continuación, os dejo un relato de la batalla:
Corría el año 732. El caudillo musulmán Abderramán decide invadir Aquitania. Su objetivo es tantear las defensas del país, obtener la mayor cantidad posible de botín, pero sin conquistar la totalidad de Francia. Empero, parece que no era reacio a la idea de unir "Italia, Alemania y el Imperio de los griegos a los ya vastos dominios de los paladines del Corán". Concentró el grueso de su ejército en las fuentes del Ebro, siguió la ruta de Pamplona, cruzó el Bidasoa por Irún y avanzó hasta el interior de Gascuña. No es posible que su ejército fuera muy numeroso, porque, según se cuenta, avanzaba en columna. Mientras se desplaza hacia el norte, se destaca una fuerza independiente con la misión de conquistar Arlés, con el fin de distraer al enemigo y sembrar el terror en Aquitania.
No se sabe mucho de la fuerza de la hueste islámica. Se entiende que la mayoría de las tropas eran de caballería, que usaban poco el arco y sí mucho la lanza y la espada, que el grueso de los soldados eran moros, y que prescindían de armaduras. Gran cantidad de mulas acompañaba a la fuerza, más bien para cargar botín que viveres, dado que los guerreros de la media luna vivían sobre el país. Seguía a la fuerza militar regular una hueste de merodeadores. La táctica del ejército eran lanzar impetuosas cargas en línea recta contra el enemigo.
Avanzan los mahometanos por los fértiles campos de Francia. Penetran en Gascuña, se internan en Aquitania. Una tropa del duque Aquitania, Eudo, les sale al paso cerca de Burdeos y es completamente derrotada. Los musulmanes atacan Burdeos, la toman al asalto, la saquean e incendian. Abderramán decide avanzar hacia el norte, hacia Tours, dado que está informado que allí hay una abadía que guarda inmensos tesoros.
Para darle más flexibilidad a su avance divide su hueste en varias columnas. En el camino llegan a Poitiers. Ante la resistencia que se les opone, los guerreros de Mahoma rebasan simplemente el punto y se dirigen a Tours, unos 90 kms. al norte de Poitiers.
Ante el imparable avance de las tropas islámicas, el duque de Aquitania, Eudo, se resigna a pedir ayuda. Acude a la ciudad de París, demanda al poderoso caudillo franco Carlos Martel su cooperación y éste le exige a cambio se sometimiento a la autoridad franca. Celebrado el pacto, Carlos Martel, con un poderoso ejército, cruza el Loira, al parecer por Orléans, y se dirige contra la hueste musulmana. Ante esto Abderramán retrocede hasta las cercanías de Poitiers.
El ejército franco tenía, como arma principal, la infantería. Estaba dividida en dos clase de combatientes: la hueste particular del general que debía emplearse de continuo dado que su recompensa era el botín obtenido, y las levas locales, milicias de hombres imperfectamente armados. La hueste era una fuerza de mucha experiencia dadas las numerosas campañas en que había participado; las levas se componían de forrajeros o poco menos. La organización de la fuerza era primitiva y sólo podía mantener cohesión en tanto se dispusiera de víveres suficientes. De no ocurrir así, se disolvía. La disciplina brillaba por su ausencia.
Las tropas francas usaban muy poco la caballería, exceptuando los nobles y aún así sólo en las marchas. Las armaduras se estaban poniendo otra vez de moda. Corazas protectoras del torso, yelmos, salvaron muchas vidas. El escudo era de uso general, y las armas consistían en espadas, puñales, venablos y dos clases de hacha, una para hendir y la otra arrojadiza: la francisca.
La súbita aparición de Carlos Martel, con su poderosa hueste, causó consternación entre los musulmanes, cuyo botín ya era tanto que habían perdido toda movilidad. Abderramán penso en abandonarlo, pero no se atrevió a cursar las órdenes, temeroso de que sus hombres rehusasen obedecerle, y al parecer dado que el caudillo franco no presionaba demasiado sobre él. Según se asegura, los dos ejércitos permanecieron siete días frente a frente, sin atacarse. Lo ocurrido en esa pausa es obvio: Abderramán hizo trasladar su botín al sur, mientras, por su parte, el general cristiano esperaba la llegada de las levas.
Poseemos escasos detalles de la batalla de Poitiers. No se sabe donde se libró concretamente. Se da como fecha octubre del año 732.Probablemente los ejércitos establecieron contacto cerca de Tours y durante algún tiempo se libraron algunas escaramuzas. Luego Abderramán retrocedió hasta Poitiers y al comprobar que su botín no había podido llegar más al sur, decidió presentar batalla, para proteger la retirada de aquél.
Como la fuerza musulmana tenía un carácter puramente ofensivo, careciendo de poder de defensa, ello significaba que cualquiera que fuese la situación, Abderraman debería atacar. Consciente de lo anterior, Carlos Martel formó a su ejército en una sólida falange, cuyo núcleo estaba formado por sus tropas francas.
Como era costumbre entre los musulmanes la batalla de Poitiers se inició con una furiosa carga de caballería, que se repitió una y otra vez; pero aún así, la falange franca permaneció inconmovible. Los hombres de Carlos Martel permanecieron firmes cual un muro que los comprendiera a todos y que no se pudiera disolver en tanto sus espadas diezmaban a los mahometanos. Los austrasianos de hombros robustos y mano poderosa, atacaban con furia; fueron ellos los que ubicaron e hicieron pedazos al rey sarraceno. Cuentan las crónicas que , a la caída de la tarde, el duque Eudo con sus aquitanos envolvieron uno de los flancos de los árabes, lanzando un ataque contra el campamento de Abderramán, en el que se hallaba todavía gran parte del botín. Los islámicos retrocedieron, descubriendo entonces que su caudillo había muerto. La batalla terminó al llegar la noche.
Al día siguiente Carlos Martel formó nuevamente su ejército para reemprender el combate, pero sus exploradores le informaron que los musulmanes habían abandonado el campo. Al parecer, presas del pánico por la muerte de su jefe, Abderramán, los mahometanos habían huido hacia el sur, abandonando el grueso del botín.
-
ForoParalelo: Miembro

Iniciado por
Movius
2 parte en el siglo XX/XXI
¿Te ha gustado el relato? ¿Te gustaría una segunda parte ambientada en la actualidad?
-
ForoParalelo: Miembro
Permisos de publicación
- No puedes crear nuevos temas
- No puedes responder temas
- No puedes subir archivos adjuntos
- No puedes editar tus mensajes
-
Reglas del foro
▲
▼
Atajos de Navegación Disponibles