Tienes que entender una cosa.
Los héroes ejemplifican la virtud de sus sociedades.
- En Grecia era el mercenario putero Perseo.
- En Rusia, Péchorin el sinvergüenza guerrillero sanguinario.
- El emperador romano -asesino de su propia familia- Constantino, es santo en la onomástica católica.
- En Rumanía, Vlad Tepes el Guerrero de las estacas de madera, barba larga, manto de patricio romano y espinitas de atascar sombreros en la cabeza de invitados descorteses. Nada parecido a la imagen de ningún calendario.
Pero nada de nada, vaya.
One Piece terminará cuando
- el héroe ejemplifique los valores de la sociedad de hoy: ningunos. Porque la sociedad no se mueve por valores como motor, sino por impuestos de servicios públicos; o bien cuando
- se acabe el chorro de presupuesto en tinta y nómina en el departamento editorial.
Apuesto por lo 2º. Luffy no ha leído ni El Quijote ni la Odisea (donde no vencen los que tienen el Gear 9579 Aquíleo, sino los más
rastreros y sucios). Sus peripecias (las de One Piece) son temerarias y contraproducentes. Y peor aún: una huida ciega hacia delante. La rebeldía contra uno mismo en pos de una formación reglada y dispuesta al servicio es anécdota ridícula.
No hay libertad, sino estética y eternos fantasmas. Los bandos son, para aclarar:
- un corporativismo atroz (no te extrañe nada que los descendientes más adinerados hijos/as/es de empresarios se identifiquen con la banda)... o
- el caos de un ecosistema rendido ante la evidencia de sus propios artificios (tardígrados win).
El primero se combate razonando derechos con diálogo humano y escucha asertiva. Comprendiendo que no es estrictamente necesario empezar de 0, que el orden que uno/a/e imagina no tiene por qué ser mejor que lo que ya hay, y que no somos espectadores independientes u omniscientes. Asumiendo que
todo lo bueno está disponible únicamente bajo contrato, renta y pago regular en cómodas cuotas (incluidos los valores del héroe Wolverine entrenado con calistenia Pilates, dieta de verduras al vapor y champú suavizante muy vikingo nórdico...

).
Lo segundo se trata con antibióticos, higiene, salubridad y frugalidad (moderación, estoicismo, abstención) en los hábitos.
En ningún caso las katanas o las muelas rotas arreglan nada.
Es un cuento para nenes, es artificio, fanservice de Nami y Robin tetonas para no agobiar a las cisternas de cannabinoide en la vida real, una criba técnica ingeniosa; ten por seguro que no se mencionará la dependencia fósil en el cambio climático, los registros de huella de carbono en los análisis moleculares de las capas profundas en los glaciares, la propaganda engañosa y depredadora de la revolución industrial o los intentos -vanos- de escritores mucho mejores contra avances técnicos
inhumanos . Y no exagero un pelito.
