Ahora la historia son gilipolleces.
Lo del 34 no fue obra de la República, sino contra la República, tanto el de Largo Caballero como el de Companys, y lo sofocó la República.
La revolución del 34 fue un error, como el mismísimo Indalecio Prieto reconoció. Un error que tiene su origen en un retroceso brutal en derechos ganados durante los primeros años de la República. Ni siquiera hubo unanimidad en el PSOE, hubo dos grupos dentro del partido, por un lado los moderados de Julián Besteiro y por otro los más radicales de Largo Caballero, que finalmente se impuso por contar con el apoyo de UGT que había recogido el monumental cabreo de la clase trabajadora a la que incluso se le bajaron los salarios.
Las conspiraciones tanto políticas como militares no eran contra la izquierda, sino contra la República. De hecho la derecha gobernó más tiempo que la izquierda durante este periodo republicano.
Lo de Cataluña fue en el 34, no en el 36, y mira lo que decía Azaña del independentismo catalán.