Increíble, me has puesto los pelos como escarpias. Sobre todo me alegro de no ser la única persona que percibe estas cosas.
También te diré otra cosa, aquí todos tenemos distintas piezas del puzzle. Tú me aportas. Yo te aporto. No hay condescendencia.
Si no lo tienes ya, pon un gato en tu vida.
Gato.