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todas tus multis
El tema central de El gran Gatsby y, en general, de su obra literaria es el temor a que la prosperidad del país fomentara un cambio de mentalidad en la sociedad. Durante los felices años veinte, la exuberancia y el dinero fácil estaban acabando con los valores de épocas anteriores: la moderación y el trabajo duro. Fitzgerald no se limitó a criticarlo, sino que reconoció su atractivo; de manera que sus obras combinan la inmersión con la crítica. En concreto, a través de esta novela, el autor refleja los sentimientos y las motivaciones de la clase alta de la sociedad de los años veinte de forma crítica y pesimista. En aquel momento, en este estrato social, se hacía una diferencia entre aquellos que eran ricos porque habían heredado dinero y aquellos que lo eran porque de algún modo habían adquirido grandes fortunas en poco tiempo. Por un lado, Tom Buchanan, el marido de Daisy, pertenece al primer grupo. Su vida acomodada alimenta su laxitud; Tom es infiel, y Daisy es infeliz, pues se resignó a casare con él únicamente por el dinero y sufre porque es conocedora de su deslealtad. Estos dos personajes representan la falta de moral de la sociedad. Por otro lado, Gatsby pertenece al segundo grupo. A diferencia de la pareja, este personaje es inconformista y derrocha optimismo; cree que todo se puede lograr y no pierde la esperanza nunca. Es un hombre que se ha hecho a sí mismo con el objetivo de alcanzar su sueño: recuperar al amor de su vida. De esta manera, el autor hace que Gatsby sea la encarnación del sueño americano, una de las principales creencias de la cultura norteamericana que establece que, en Estados Unidos, todo el mundo puede tener éxito y ser feliz si se esfuerza. Sin embargo, en este caso, el vacío moral de esa sociedad, que permanece oculto para Gatsby debido su espejismo con respecto a Daisy, termina corrompiéndolo.