Plataforma Reseña cinematográfica 1.

Muchas gracias, @zu_u_ti. Me encantan las películas de gángsters de esa época, sobre todo las de Cagney.

Me encanta que reseñéis películas que he visto, me hacen recordar y re-disfrutarlas.

Iniciado por zu_u_ti

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La reseñita de la semana...
La mujer del cuadro (1945)
De Fritz Lang, el director de Metrópolis, El vampiro de Dusseldorf, La mujer en la Luna, Perversidad, Secreto tras la puerta...es que no sabría ni como mencionar sólo una y obviar el resto, un delito.
Pues eso, en su etapa americana y ya sonora, tenemos La mujer del cuadro. Cine negro del clásico, nos muestra la perdición de un hombre por una mujer. Además le añade un toque de psicoanálisis ,que por aquella época se ponía muy de moda en la cultura popular. Unas cuantas películas lo reflejaban, pero no todas con tanta fortuna como esta. Aunque unas cuantas se merecen una reseña en otro momento.
No quiero destripar mucho de esta.
Los protas, Edward G. Robinson, el gangster por antonomasia que aquí hace de forero medio y Joan Bennett, esa mujer inalcanzable por la que todo hombre arriesgaría su cómoda vida.
Hacer mención a que la censura del código Hays estaba en todo su apogeo, así que a los más jóvenes os parecerá un poco ingenua ya que algunos aspectos deberían no ser tan blancos en la historia
[SPOILER]y que mejor que jugar con trampas oníricas para resolver la película[/SPOILER]
Esto para mi gusto, fue un poco lo que sobraba, pero para los que no la hayáis visto todavía casi mejor que no leer lo de las fotos que adjunto tampoco, por si os da demasiada información ; )
Espero que algún día le deis una oportunidad los que no la conocíais y a los que sí, pues disfrutad con el recuerdo.


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Excelente reseña y obra, yo iré dejando algunas esta noche.

Muy buena elección, obra del periodo americano del maestro tuerto Fritz Lang, que, tras salir con lo puesto de Alemania, incluso dejando a su esposa, que era proclive al régimen, medró en el género negro, pergueñando algunas de las obras iconicas, como ésta que muestras y Más allá de la duda razonable, Perversidad ó Los verdugos también mueren.

Iniciado por Redios

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Excelente reseña y obra, yo iré dejando algunas esta noche.

Muy buena elección, obra del periodo americano del maestro tuerto Fritz Lang, que, tras salir con lo puesto de Alemania, incluso dejando a su esposa, que era proclive al régimen, medró en el género negro, pergueñando algunas de las obras iconicas, como ésta que muestras y Más allá de la duda razonable, Perversidad ó Los verdugos también mueren.

Qué bueno! Las espero con ansia viva.
La verdad que Lang da para hacerle unas cuantas menciones : ))

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Voy a continuar una saga que ya dejé iniciada unos post más atrás, la del horror gótico de mi querida Universal Pictures, y lo hago, con una de las primeras obras que se adaptaron al nuevo y maravilloso sistema, la novedad de poder oír a nuestras estrellas preferidas en la pantalla, la de ponerles voz, entonación, el remate que quedaba, escuchar sus palabras en sus interpretaciones.





Esta ocasión de oro, vino dada por la maravilla técnica desarrollada por Western Electric, que dotó de hálito vital a los actores, y para empezar, elijo escribiros de “Drácula (1931)” de Todd Browning, un director que, en su niñez, se crió en un circo ambulante, pero, de lo que esa niñez pergueñó en él, hablaré en otro momento.



Todd Browning


La película que nos trae aquí hoy, se basa por derecho propio en la obra literaria de Stoker, y digo por derecho propio, porque hubo intentos anteriores y por supuesto, ulteriores, que trataron de evadir la responsabilidad pecuniaria que supone usar un texto con propiedad de autor.

Bram Stoker


Aquí entramos con todo, nombres, lugares, hechos, por supuesto, con alguna licencia libre, puesto que la pantalla resulta una manera realmente distinta de narrar, que las páginas de un libro, pero en esencia, tenemos nuestro vampiro cinematográfico en todo su esplendor y glamour, mas, también, en su tenebrosidad y aterradora faz.

Por supuesto, como algunos ya sabréis, el Príncipe de la oscuridad, el no muerto, el que arrastra la plaga de la terrible muerte con él, no es otro que Bela Lugosi, un actor húngaro emigrado y nacionalizado estadounidense, que ha quedado para los siglos de los siglos como el Drácula por antonomasia. Sus gestos, su aspecto de dandy, su elegancia, ese porte y acento centroeuropeo, eran el caldo de cultivo perfecto para el papel, que quedó ligado a su persona por siempre.

Bela Lugosi


Acompañando al vampiro por definición, nos encontramos a una buena galerada de actores del estudio, que realzan la calidad del film, tales como Edward van Sloan, en el papel del profesor Van Helsing, Helen Chandler en el de Mina Harker, David Maner como John Harker ó el incombustible Dwight Frye (especializado en papeles de esbirro de científicos locos o personajes tullidos), como Renfield.

La escenografía es plenamente siniestra, plena de sombras, fuertes contraluces, escenas tétricas, como aquella en la que Drácula despierta por vez primera en su ataúd, en un lugar polvoriento, abandonado, lleno de nauseabunda inmundicia, pero que él, con su sola presencia, se encarga de llenar de clase y donaire. Dicha ambientación tan excelentemente lograda, es producto de una cuidada fotografía de Karl Freund, un maestro de origen europeo, icono de la época en lo referente a filmación de claroscuros y evocadora iluminación.

Karl Freund


La trama es de sobras conocida por todos, pues es una renuente y clásica obra de la literatura la que sirve de base, pero, hay algo que quizás no sepáis, y es que, esta película, tuvo una hermana melliza, destinada al mercado hispanohablante, y que, cómo no, voy a detallaros en unas líneas.

Se trata del Drácula hispano, dirigido por el artesano George Melford, y cuyo actor principal, Carlos Villarías (de origen cordobés), no sólo estuvo a la altura en el papel, sino, según algunos sectores de la crítica e historiografía, superaba al propio Lugosi. Por mi parte, he visto ambas obras, y sinceramente, no puedo relegar a ninguno de ambos, lo que sí es cierto, es que la versión hispana, usa la novedad del sonoro de una manera más eficaz, se nota en la profusión de diálogos en las escenas, en la insistencia de contar más con la palabra hablada que con la simple sugerencia de la imagen tenebrosa.



Carlos Villarías


George Melford


Por supuesto, Villarías no está sólo en la pantalla, le jalona una preciosa Lupita Tovar, en el esplendor de su carrera.



Espero que os haya sido de agrado esta reseña de hoy, y por supuesto, os dejo con material visual para el completo disfrute de la misma.

Tráiler de la versión americana.

Pequeño documental sobre la versión hispana.

Iniciado por zu_u_ti

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@Redios
Muy buen aporte del Drácula de la Universal
Quiero hacer mi pequeño homenaje en recuerdo de Bela Lugosi con la película Ed Wood de Tim Burton, no sólo es una joya moderna, refleja el amor al cine tanto de Wood como de Burton. No importa el resultado, la pasión de ambos es similar, aunque Tim Burton demuestre más maestría.
Y la interpretación de Martín Landau, ese Bela Lugosi, vampirizado por el personaje.
No hace referencia al conde rumano, pero esta escena es oro molido y hace que te pongas de rodillas frente a su interpretación o es que no te corre sangre por las venas...

Y gracias por darnos a conocer esa obra mexicana, al menos desconocida para mí : )

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Tengo esa obra, y es un ejemplo perfecto de metacine por entero, Landau, genial en su papel, y Burton, con ese estilo tan peculiar para recrear personajes, sean reales ó no. Ciertamente, Lugosi tuvo una dependencia enfermiza de su personaje, al punto de creerse en ocasiones que era él encarnado, también sufrió, por problemas serios de salud, una grave adicción a la morfina, pero lo que importa es el glamour, lo demás, queda para las bambalinas.

Segunda entrega de la saga Universal Monsters, y segunda gran obra de los estudios, nos vamos a la literatura decimonónica para adentrarnos en los secretos más oscuros de la naturaleza humana, y en un renuente tema de debate para la humanidad, ¿debemos poder crear vida a nuestra imagen y semejanza ó es una aberración en toda regla?

Esto es lo que plantea la genial escritora Mary Wollstonecraft Shelley en su maravillosa y, al tiempo, tenebrosa creación.

En efecto, vamos a sumergirnos en el mundo del Doctor Frankenstein, concretamente, en la versión de 1931, una joya en toda su extensión, mítica por derecho propio, fascinante en sus planteamientos filosóficos, y a la par, siniestra y llena de misterio.



Ya desde el inicio de la misma, veremos un pequeño prólogo, presentado por el actor Edward Van Sloan, que nos advierte de las sórdidas imágenes y hechos que podremos contemplar, excelente maniobra por parte del director de la obra, un James Whale en plenitud de facultades creativas.

James Whale


El prólogo.

Con un plantel que pasaría a los anales de la cinematografía mundial, tenemos un elenco de verdadero lujo, comenzando por el propio Edward Van Sloan, y siguiendo por el sempiterno Boris Karloff interpretando a la criatura, actor británico encasillado en el género de terror u horror gótico (aunque él mismo una vez, al ser preguntado al respecto, dijo que, prefería ser encasillado en un tipo de papeles concretos, pues esto le garantizaba el trabajo).




El honor de interpretar al Doctor Frankenstein, recae sobre un actor, genial y desastroso al tiempo, Colin Clive, que debido a sus problemas de alcoholismo, solía ser intratable y arruinar rodajes, en esta ocasión, nos muestra su mejor faceta, y brinda un papel estelar de primer nivel.



No nos olvidamos en modo alguno de las féminas participantes, tenemos, como la prometida del Doctor, Elizabeth, a Mae Clark, que está realmente radiante.



Y por supuesto, no podía faltar Dwight Frye, como Fritz, el tullido ayudante de laboratorio del enloquecido médico. Seguro que ya os va siendo familiar su rostro dentro de la familia monstruosa fílmica.



Vayamos con algunos datos de interés, minúsculos detalles, que engrandecen el mito de la película, el primero de ellos, ya relatado antes, su prólogo, un excepcional ardid.

También, os diré que, en la traducción de doblaje del film al español, podremos observar un corte de sonido, justo en uno de los pináculos de la trama, cuando el Doctor consigue bajar el cuerpo de su criatura, formada con partes de cadáveres, y logra observar que, está vivo, es cuando los asistentes, el Doctor Waldman y Elizabeth le encomiendan a Dios, y él, en pleno éxtasis psicótico, exclama, “Dios, ahora sé lo que debe sentirse al ser Dios”, esta frase, que hoy día podría pasar por inofensiva e irrelevante, en los años 30 y en España, hubiese sido un atentado en toda la extensión de la palabra, por tanto, cuando visionéis la versión doblada, justo en ese momento, habrá un vacío de sonido, cubierto por un restallar de truenos. Por supuesto, en la versión original no ocurre esto, y tenemos a Colin Clive, en su momento estelar, con la plétora del logro, entonando su polémica frase.

La escena en original.

Un último apunte que no podía dejar pasar de ninguna forma, y es que, toda la magia, todo el horror de las apariencias de los personajes monstruosos de la época en el estudio, eran creación del maestro Jack Pierce, un genio del maquillaje, al que quería dedicar unas líneas, tanto por su trabajo, como por su peculiar manera de hacerlo, solía entrar en su camerino (en el que el actor correspondiente ya le esperaba), ataviado con una bata de médico y semblante serio, casi sin mediar palabra.



El tráiler.

Y un pequeño regalo que os hago, la versión de 1910 de la obra, dirigida por J. Searle Dawley y protagonizada en el papel de la criatura por Charles Ogle. Filmada en los estudios Edison.

Cosillas sobre* Frankenstein.

*Poco más se puede añadir a una reseña de @Redios pero, vamos allá con sólo unos detalles para los curiosos.

El director, James Whale, un hombre venido del teatro y del mundo del dibujo y la figuración. Y eso se nota, tanto en esta obra como en las demás. Puede que se le haya echado en cara cierto caos en el montaje, eso dicen los entendidos, pero cada escena es de una belleza sublime. Se inspiró para esta en El gabinete del Dr. Caligari y en El legado tenebroso, es decir, en el expresionismo y en el gótico. Y es que sólo en algunas películas ya del cine sonoro en adelante se pueden apreciar con tanto acierto estás influencias como en la obra de Whale.

Director tan capaz de recrear estos ambientes como escenas más bucólicas con fatal desenlace, para que no se nos olvide que terreno pisamos.

Desgraciadamente no conoció el éxito más allá de sus trabajos en la Universal y tampoco tuvo suerte en sus últimos años en cuanto a salud, física y mental.* Acabó suicidándose. Pero dejó como legado su elegancia en el diseño de escenarios y este icónico monstruo para toda la eternidad, de quien también participó en el diseño del maquillaje.

Hay que ver Dioses y Monstruos (1998), obligado, para acercarse más a la vida de este artista y para deleitarse con las escenas que emulan el rodaje de La novia de Frankenstein, de los mejores minutos que se han rodado en los últimos 30 años, en serio, sí, sí.

El mostruo, un Boris Karloff para quien no habían pensado en un principio. Afortunadamente acabó en sus manos y no en Bela Lugosi, que no tenía tanto registro actoral ni de lejos. Su interpretación es delicada, no habla en toda la película pero transmite muchísimo sentimiento. Tanto, que con quien empatiza el espectador y toda la cultura popular ha sido con él y no con el doctor. Amén de su estilo visual, para lo que hacían falta 5 horas de sesiones de maquillaje cada día de rodaje.

Decir también que está película no está tanto basada en la obra de Shelley sino en una adaptación para el teatro.
Pero ninguna son obras simples, encierran muchos matices. Hasta dónde debe llegar uno en sus ambiciones y responsabilizarse de ello? Abandonar sus creaciones a su suerte una vez que les ha dado vida? Esta y La novia de podrían ser resumidas en un lacónico son.los.perdedores.txt
Es lo que tiene el terror dramático.

Y yo que nunca fui de retener fragmentos en mi cabeza, sí que lo hice con uno de la obra literaria. Es muy cortito, seguro que no lo recuerdo exacto pero ahí lo dejo:
"Si no puedo inspirar amor, entonces inspiraré miedo. Y a ti, mi peor enemigo, por ser mi creador, te juro un odio inextinguible"
Me parecen de esas frases para grabar en mármol. No justifican nada, pero a veces explican por qué ciertas personas hacen lo que hacen. Y es que lo dicho, Frankenstein, es mucho más que una película sobre un monstruo creado de retales.

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Iniciado por Redios

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Brabísimo, me quito el sombrero,

[emoji5] gracias
Voy a plazos, todavía me queda por leer con devoción muchos de tus posts. Espero poner algo de casi todos...
Esta mañana me quedé con ganas de responder a este de Frank y te creerás que llevo todo el día que no veía el momento de pararme a escribir algo.
Lo pones súper bien y te mereces una respuesta a cada película!


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Iniciado por zu_u_ti

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[emoji5] gracias
Voy a plazos, todavía me queda por leer con devoción muchos de tus posts. Espero poner algo de casi todos...
Esta mañana me quedé con ganas de responder a este de Frank y te creerás que llevo todo el día que no veía el momento de pararme a escribir algo.
Lo pones súper bien y te mereces una respuesta a cada película!


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Es un honor compartir este hilo con vosotros, os lo merecéis.

Y seguimos con la serie de Universal, esta vez, segundas partes sí que fueron buenas, de hecho, extraordinarias. En una extraña noche de tormenta, tres personas debaten sobre la vida, la muerte y los secretos insondables de la mente humana, se trata de Lord Byron (Gavin Gordon), Percy Shelley (Douglas Walton), y Mary Shelley (Elsa Lanchester), ésta última, les narra a sus acompañantes de velada, la continuación de su obra magna.

Se trata, cómo no, de “La novia de Frankenstein (1935)”, nuevamente dirigida por el genial James Whale, que contó con un elenco mucho más granado esta vez, y por supuesto, rizó el rizo con la filmación de esta maravillosa película.



Y la temática es mucho más interesante, puesto que la criatura interpretada por el ubicuo Boris Karloff, !habla¡, sí, puede articular palabras y no sólo gruñidos guturales, todo un golpe de efecto para el espectador, y por si fuera poco, quiere una compañera en su vida, con la que poder mitigar su soledad, pues allá donde va, causa el cerval terror en las gentes que se lo encaran.

Boris Karloff


Para ello, urde un plan macabro, sólo digno de una mente perturbada y desesperada, y es, secuestrar a la prometida de su creador, el Doctor Frankenstein, interpretado nuevamente por el británico Colin Clive, que borda el papel de una manera espectacular. La prometida, en esta ocasión, es Valerie Hobson, que brilla en cada fotograma como una verdadera estrella.

Colin Clive y Valerie Hobson


Para lograr realizar todo este descabellado plan, aparece en escena un extraño, pero entrañable personaje, el Doctor Pretorius, encarnado por un magnífico Ernest Thesiger, que conseguirá, con malas artes y una buena dosis de intriga, convencer a Frankenstein de acompañarle a lo más profundo del infierno.

Ernest Thesiger


No quiero desvelaros demasiado de la trama, pues es mi deseo que veáis la obra, porque merece la pena, en realidad, se trata de la joya más resplandeciente de la época y del género, pues la confluencia de talento, buen hacer y por supuesto, ambientación, es perfecta, pero puedo deciros que, la novia es, en un magnífico alarde de doble papel, Elsa Lanchester.

Elsa Lanchester



Mención especial he de hacer a dos actores de reparto que culminan un equipo perfecto para lograr el éxito, por supuesto, no podía faltar en la troupe, Dwight Frye, como uno de los ayudantes de Pretorius, y Una O'Connor, criada en la casa del Barón Frankenstein.

Una O'Connor

Dwight Frye


Una agradable tonadilla de Franz Waxman nos imbuye durante todo el visionado, la fotografía de John Mescall nos lleva más allá de las sombras, sumergiéndonos en un ambiente cada vez más macabro, también contribuye el genial Jack Pierce con sus excepcionales maquillajes, todo, para hacernos pasar uno de los ratos más terroríficos y a la vez, divertidos que podamos disfrutar.

Algunas escenas destacables, que no conforman el centro de la acción son, el encuentro de la criatura con el ermitaño ciego, el único que no huye despavorido ante su presencia, por razones obvias.



La reunión de la criatura con el siniestro Pretorius, y lo cómico de verle charlar amigablemente con éste.



Pero el culmen de todo, llega con la ansiada escena de tortolitos de ambas criaturas, en la que, pobre de él, nuevamente es rechazado, con un espantoso grito que para siempre, ha quedado en los anales de la historia del celuloide.



Tráiler de la película.

Por cierto, si queréis conocer una buena parte de la historia de este rodaje, os recomiendo ver “Dioses y monstruos (1998)”, de extraordinario interés y muy entretenida, rebosante de calidad.

Tráiler.

Yo también creo que esta segunda parte es mucho mejor que la primera, más profunda y más oscura.

Sin querer ya hablé un poco de ella en la de Frankenstein, era inevitable. Después del impacto que era contar la concepción y rechazo de la criatura, tocaba adentrarse más en la soledad a la que está condenado. Sólo un ciego es capaz de aceptarle sin más, lo hubiera hecho de no serlo?

Me gusta mucho el personaje de Dr. Septimus Pretorius, un mad doctor en toda regla pero con humor también.

Gracias por darnos a conocer el nombre de Una O'Connor, con esas exageraciones que dan ciertos toques de comicidad a la pelicula y como tan bien apuntabas en otra conversación, herederas del cine mudo.

Y la novia, simplemente maravillosa. Otro icono para la posteridad. Y es que la segunda hija del Dr. Frankenstein les quedó bien apañada. Lástima que no cuajaran como pareja para el desgarro del corazoncito de Frankie y de los espectadores.

Y una duda, no era una de esas criaturas liliputienses el mismo Charles Laughton haciendo de Enrique VIII en plan cameo o buscaron a alguien muy parecido?

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@cocho por dónde andas? Qué hace mucho que no se te ve! : )

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Iniciado por zu_u_ti

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@cocho por dónde andas? Qué hace mucho que no se te ve! : )

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Estos días apenas tengo tiempo libre para ocio, pero volveré. : )

Un saludo.

Acabo de descubrir este hilo tan interesante. Si me permite el creador y demás integrante intentaré aportar algo.

Hola me gusta el tema!

Iniciado por BluesK

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Acabo de descubrir este hilo tan interesante. Si me permite el creador y demás integrante intentaré aportar algo.

Fenomenal! A @Redios le va a gustar también mucho que haya otro enamorado del cine por aquí

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Iniciado por BluesK

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Bienvenido y por supuesto, siéntete libre de aportar y comentar lo que gustes.

Iniciado por zu_u_ti

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Yo también creo que esta segunda parte es mucho mejor que la primera, más profunda y más oscura.

Sin querer ya hablé un poco de ella en la de Frankenstein, era inevitable. Después del impacto que era contar la concepción y rechazo de la criatura, tocaba adentrarse más en la soledad a la que está condenado. Sólo un ciego es capaz de aceptarle sin más, lo hubiera hecho de no serlo?

Me gusta mucho el personaje de Dr. Septimus Pretorius, un mad doctor en toda regla pero con humor también.

Gracias por darnos a conocer el nombre de Una O'Connor, con esas exageraciones que dan ciertos toques de comicidad a la pelicula y como tan bien apuntabas en otra conversación, herederas del cine mudo.

Y la novia, simplemente maravillosa. Otro icono para la posteridad. Y es que la segunda hija del Dr. Frankenstein les quedó bien apañada. Lástima que no cuajaran como pareja para el desgarro del corazoncito de Frankie y de los espectadores.

Y una duda, no era una de esas criaturas liliputienses el mismo Charles Laughton haciendo de Enrique VIII en plan cameo o buscaron a alguien muy parecido?

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Es un verdadero lujo compartir comentarios contigo, aportas muy buenas curiosidades y complementas este hilo de una manera inimaginable.

Iniciado por Redios

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Es un verdadero lujo compartir comentarios contigo, aportas muy buenas curiosidades y complementas este hilo de una manera inimaginable.

Qué generosho que eres!

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Iniciado por asdepueblo

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Hola me gusta el tema!

Pos ya sabes. A participar!

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Iniciado por zu_u_ti

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Sólo digo lo que en justicia es verdad.

Iniciado por Redios

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Sólo digo lo que en justicia es verdad.

Oye, que se ha quedado sin responder lo de Laughton? Era él? Es que lo tengo muy en la memoria pero tampoco me fío mucho

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Iniciado por zu_u_ti

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Oye, que se ha quedado sin responder lo de Laughton? Era él? Es que lo tengo muy en la memoria pero tampoco me fío mucho

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En efecto era él, disculpa mi torpeza, no caí en la pregunta ó se me fue de la mente.