La policía italiana ha confiscado otros 120 millones de euros de activos de la poderosa mafia de Calabria, también conocida como la Ndrangheta.
Según un informe, las autoridades confiscaron más de 100 propiedades en Roma y en otras provincias italianas vinculadas a la mafia.
Esta última operación se dirigió contra los clanes Scriva, Morabito, Mollica, Velonà y Ligato de la Ndrangheta. Estos clanes de Calabria se han arraigado en Roma y sus alrededores desde la década de 1980.
Esta es una de las muchas operaciones policiales que en los últimos años se han destinado a atacar las finanzas y los activos del poderoso grupo del crimen organizado.
Millones y millones de euros en efectivo y tenencias se han incautado a lo largo de los años en varios países. Sin embargo, aparentemente ha tenido poco o ningún efecto ya que la mafia más rica y poderosa de Italia continúa creciendo y expandiéndose en todo el mundo.
La capacidad de la Ndrangheta de convertir miles de millones de euros de ganancias ilegales en activos legales en varios países ha hecho que la lucha contra ellos sea aún más difícil.
En 2010, el dinero obtenido de sus diversos esquemas, que incluyen el tráfico de drogas, la extorsión, el lavado de dinero y más, representaron al menos el 3% del PIB de Italia.
Han seguido creciendo a un ritmo alarmante y los miles de millones de euros que aportan cada año los han convertido en el grupo de crimen organizado más poderoso a nivel mundial.
Ahora se sospecha que son la familia mafiosa más grande en varios países, incluidos Alemania y Australia.
Actualmente son la única organización de la mafia que tiene presencia en todos los continentes.
El control del tráfico de drogas es el principal responsable de su ascenso meteórico.
Se cree que actualmente controlan aproximadamente el 80% del comercio europeo de cocaína junto con importantes mercados de drogas en otros países también.
Si bien la Ndrangheta puede ser tan violenta como cualquier otra organización criminal, su verdadero poder parece radicar en su capacidad para ganar dinero y en la voluntad de evitar los derramamientos de sangre.
Los lazos de sangre en los que están construidos los han hecho más difíciles de infiltrar y han ayudado en su capacidad de expandirse fuera de Italia.
En muchos países, continúan “volando” por debajo del radar.