Historia y inventor de vuestros asquerosos emogiks

La historia de la segunda sonrisa más icónica del mundo.


A Harvey Ross Ball, un diseñador gráfico de Worcester, Massachusetts, se le atribuye la invención de la icónica cara sonriente en 1963.
A Ball se le ocurrió la imagen en 1963 cuando le encargaron crear un gráfico para levantar la moral entre los empleados de una compañía de seguros después de una serie de fusiones y adquisiciones difíciles. Ball terminó el diseño en menos de 10 minutos y recibió un pago de $45 por su trabajo. La State Mutual Life Assurance Company (ahora Allmerica Financial Corporation) hizo carteles, botones y letreros adornados con la sonrisa ictérica en un intento de lograr que sus empleados sonrieran más. No está claro si el nuevo logotipo levantó la moral o no, pero la cara sonriente fue un éxito inmediato y la empresa produjo miles de botones. La imagen proliferó y, por supuesto, fue imitada incesantemente, pero según Bill Wallace, director ejecutivo del Museo Histórico de Worcester, la carita sonriente auténtica diseñada por Harvey Ball siempre se podía identificar por sus características distintivas: los ojos son óvalos estrechos, uno más grande que el otra, y la boca no es un arco perfecto sino “casi como una boca de Mona Lisa”.


Ni Ball ni State Mutual intentaron registrar o registrar derechos de autor del diseño.

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