Buenas shures.
Probablemente penséis: "y a mi qué me estás contando, parguela?". Y tendréis razón, pero es que la cosa va más allá.
Mi tío se llama Eusébio, tiene 55 años y vive de una pensión del Estado. Se la concedieron cuando a los 35 se separó de su mujer y le diagnosticaron esquizofrenia paranoide en fase aguda. Y bueno... digo que se "separó", pero en la familia creemos que lo dejó su mujer. Y no le culpo, se casó a los 34 con una ecuatoriana sin papeles que conoció en la web de Pasion.com. Al poco tiempo tuvieron un hijo que salió de color caramelo (cosa que también nos preocupó, ya que ella es blanca como la leche, pero él insistía en que sería por los genes de los abuelos de Mariana Cecilia (su ex-mujer)
), ella firmó papeles y adiós Calixto.
Qué diantres, sí le culpo. Quién en su sano juicio se casaría con una "sin papeles"? En fin, supongo que de ahí se debe su misoginia notoriamente abierta y su alcoholismo. Bueno, que me voy del tema.
El caso es que hoy es su cumpleaños, y lo sé porque me lo ha dicho mi madre. Poco se sabe de él en la familia, tan solo lo que, de uvas a peras, nos cuentan los abuelos cuando van a comer a su casa algún sábado. Él no vive recluido de la familia por nuestra culpa, fue decisión suya el no volver a quedar con nosotros cuando alguien en la cena familiar de nochebuena de 1998 le dijera que sus verduras al vapor tenían mucho aceite... Cosa que nos pareció rara, ya que son verduras al vapor. Seguidamente se volvió loco, se puso rojo como un tomate mientras saltaba encima de la mesa y de los tostis de cabrales con mermelada de pimiento. Aun así lo perdonamos, aun cuando fue al jardín y mordió al gato de la abuela Concha. Lo dejó tuerto y ya nunca más volvió a reconocer a su dueña, pobre Concha. Y pobre Bigotes.
Él mismo decidió no volver a ver a la familia, solo tolera juntarse con los abuelos. Y solo lo hace para hostigarles, para hacer ver a la familia que sigue con el rencor de aquella fatídica nochebuena que acabó siendo una rave de ira, baba, aceite y sangre de gato.
No escribiría aquí si no fuera porque me preocupo de verdad, pero no por él. Desde hace unos años, cada cumpleaños lía alguna trastada y sale a la calle a perturbar el orden público. Por ejemplo, el año pasado entró al Carrefour e intentó robar una barbacoa para ponerla en el baño
Cuando lo detuvieron a la salida, empezó a patalear en el suelo desnudo y rabioso mientras gritaba: "Es mi cumpleaños! es mi regalo de cumpleaños, hijos de perra! SOY ESQUIZOFRÉNICO! LEILI, ME CAGO EN DIOS, AMORES DE MI VIDA! POR QUÉ! POR QUEEEEEEÉ!" (no sabemos quien es Leili y porqué se cagaba en dios).
Y el anterior fue mucho peor, solo diré que fue a San Fermines y volvió cubierto de jugo de tomate y aceite, diciendo que le había encantado la Tomatina
No sabemos qué hizo ni a dónde fue.
Este año se ha comprado una guitarra flamenca, suponemos que forma parte del plan de este año para su famoso evento de cumpleaños... Por favor, si veis hoy a un señor calvo, de 55 años, con una panza prominente, claros síntomas de delirio y con una guitarra en la mano... llamad a la policía.
Muchas gracias por compartir.