Isa no quiere trabajar

tenía un curro estupendo, pero le pudo la coca. Mi amigo dice que se ganaba bien por aquel entonces, pero que ya no es lo mismo. Y que todo era muy pesado. Perdió el teléfono del jefe y se le ocurrió la historia de un secuestro para justificar su ausencia laboral. Y mira que le contrataron por petarse a una " gorda" ¡ lo que hace un fale..o!.

ahora dice que es feliz. Yo le digo que sólo es tranquilidad. Pero que se equivocó al dejar aquello. Que Dios escribe con renglones torcidos y que el sol no brilla dos veces. Que lo nuestro es una pena, pero que ¡ en fin!...

la verdad es que mi amigo Isa es un sol. Nos tomamos unas cañas cuando sobran los eurillos. La nuestra es una tierra de oportunistas. Pero me supongo que quedamos en una categoría híbrida entre caradura e inocente. Mi amigo carece de la vergüenza que yo tengo, y se le dá mejor lo mundano. Pero ambos tenemos el imposible amor a la libertad.

al final estamos entre salir corriendo por culpa de un serbio criminal con un cuchillo y la flor y la nata de la baja criminalidad. Sale caro ser uno mismo. O intentarlo. Pero... ¿ se puede ser otra cosa?. Es lo que hay. Es lo que habrá.

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"Nastrovje"