Descripción gráfica de por qué usar porcentajes para generalizar, estigmatizar o estandarizar situaciones es absurdo:
No sé hasta qué punto estás hablando en serio, espero que seas un troll, porque si no...
No es una cuestión de probabilidades, sino de sentido común. Conducir mamado tiene la certeza de disminuir tus capacidades, mientras que el vacunarte no implica necesariamente una mejor respuesta frente al virus y añades los riesgos de efectos secundarios.
Por ejemplo, si tú ya has pasado el virus de forma asintomática, ¿para qué vas a inocularte si no evita el contagiar a otros ni va a mejorar tu respuesta inmune ya óptima? ¿Para qué vas a comprar boletos de pegarte el hostión borracho y para la timba de los efectos secundarios de la "vacuna"? Aparte, que la inoculación puede ser buena para gente vulnerable a la que el virus sí es muy probable que se lleve por delante, mientras que el conducir borracho no es bueno para nadie, es que menudo ejemplo de mierda, macho.
Hay una parte de incertidumbre, porque no sabes cómo va a reaccionar tu cuerpo contra el virus (de ahí casos aparentemente inexplicables de gente sana que han caído) ni contra la inoculación, de ahí que cada uno tenga que ponderar qué le interesa más basado en su casuística personal, no en las estadísticas generales.¿ A mí qué cojones me importa que a mi vecino Benito la "vacuna" le venga de puta madre si a mí el virus no me hace ni cosquillas y al inocularme tengo la "mala suerte" de ser ese ínfimo porcentaje que sufren efectos secundarios graves? Aquello de peor el remedio que la enfermedad. No sé si con esto captas ya la cuestión.