Ser profesor es más malo de lo que parece.. +AL

Lo va a leer tu biega poleada .

Y tu biego subpoleado

Poleo menta

PD:

Iros a tomar por sacos todos los profesores que vivis como reyes CARADURAS

Me espero al bluray del resumen del resumen de la introduccion del resumen

Iniciado por Splitz

El mensaje está oculto porque el usuario está en tu lista de ignorados.

Poleo menta

PD:

Faileo menta

Ahí estamos copiapegando publicaciones de otros foreros

Eh... shur, ¿esto va en serio?

bueno, lo malo no es lo q comentas en los parrafos 4,5,7,8 y 12, lo peor es que todo lo demás es un cumulo de errores del gobierno, como bien dices en los 2 y 15.

Pedazo de testamentainer

Resulta que este curso me ha tocado tutorizar a una clase de 1º de Bachillerato. Además, en este grupo también imparto la asignatura de Lengua y Literatura y las dos horas de Alternativas a la Religión.

Los lunes, los martes y los miércoles me toca las dos primeras horas con este grupo, ya que coincide una hora de Lengua con una hora de Tutoría o Alternativas, de manera consecutiva.

Normalmente, los alumnos de la ESO y Bachillerato, en el cambio de clase y clase (entre que sale un profesor y llega el siguiente) suelen aprovechar para salir al pasillo y darle un poco al pico (hablar con chicos de otros grupos, hacer un poco el tonto con los compañeros, etc...).

Como los lunes, los martes y los miércoles tengo dos horas seguidas con este grupo, no hace falta cambiar de aula ni de profesor en la transición entre los periodos horarios. Por tanto, no dejo salir a los alumnos al pasillo, ya que al final es un cachondeo, pues si dejo que salgan, luego vienen revolucionados perdidos y cuesta volver a retomar la clase, pues aprovechando que tengo estas dos horas seguidas, me gusta dar doble clase de lengua, y con un cambio tan brusco luego a los chicos les cuesta volver a concentrarse.

Los chicos me dijeron que les parecía injusto hacer las dos horas de forma seguida, sin ningún tipo de descanso. Yo les dije que descanso sí les dejo (paro la clase unos 3-4 minutos para que los alumnos se despejen un poco, y después volver a retomarla). Lo que no les dejo es salir, ya que luego hablan con otros compañeros, se ponen a hacer el tonto y vuelven alterados perdidos, siendo más difícil reconducir la clase, pues después de un descanso suelen venir más inquietos e insoportables. Por tanto, no dejo que salgan al pasillo, pero sí les dejo descansar 3-4 minutillos.

Estas primeras semanas de curso me han estado dando la tabarra con el dichoso del tema (que si déjanos salir al pasillo, que si la clase se hace muy larga, que qué me cuesta dejarles 5 minutos salir a la galería a despejarse un poco, etc...). Uno de los alumnos me dijo que ellos no están incumpliendo ninguna regla saliendo al pasillo, ya que en las normas de convivencia (que están colgadas en la página del centro), solamente dice que durante el periodo de clases un alumno no puede estar en el pasillo, y una clase no comienza hasta que el profesor llegue.

Esta afirmación es totalmente absurda, ya que él está confundiendo "periodo horario" (los 50 minutos oficiales de una asignatura) con la "presencia del profesor" (que suele ser menos, ya que un profesor pierde unos minutos en desplazarse hasta el aula...convirtiendo los 50 minutos, a lo mejor en 45). Yo le dije que si las normas de convivencia hablan de "clase", no se refiere al tiempo de presencia en el aula del profesor, sino al periodo oficial de 50 minutos. Es de lógica. Por tanto, eso de salir al pasillo hasta que llegue el profesor va en contra de las normas. Muchos profesores y la propia dirección hace la vista gorda (ya que todo el mundo lo hace y nadie dice nada), pero no es legal. Yo creo que el término "clase" se refiere al periodo de 50 minutos y no a la presencia del profesor.

Los alumnos me decían que el término "clase" es ambiguo y puede generar ambas interpretaciones, ya que puede ser clase como periodo de 50 minutos o como momento en el que hay presente un profesor. Y si las normas no concretan más, ambas posturas serían válidas. Por tanto, eso de salir al pasillo no debería estar prohibido hasta que llegue el profesor de turno. Y cada uno es libre de interpretar lo que quiera.

A mí esa chulería y esa forma tan prepotente de hablar no me gustó nada. Aunque puedan tener algo de razón, no me gustó nada la forma en que ese alumno se dirigió a mí. Eso mismo que ha dicho (que me parece respetable) se puede decir de una manera menos ofensiva (es que me lo dijo gritando, con malas caras, de esa forma tan altanera, etc...). Eso yo no lo puedo consentir. Se trata de una cuestión de respeto. Si eso mismo me lo dicen de una manera seria y madura, yo soy el primero en negociar, pero hablando con esa chulería y esa ironía, no. Lo siento, pero no.

El primer día de curso les dejó claro a los chicos que no se molestaran en preguntar a los compañeros de otros grupos las preguntas que les habían caído en los exámenes de geografía, ya que él hacía cuatro exámenes diferentes (uno para cada grupo). Además, aclaró que él nunca repite preguntas de un grupo a otro.

El profesor plantea sus exámenes como pruebas de desarrollo con alguna práctica (al ser geografía, les puede poner mapas, climogramas, pirámides de población, etc...)

Algunos alumnos se han quejado de que el último grupo en hacer el examen lo tiene más "fácil" que los demás, ya que el profesor no repite preguntas de un grupo a otro. Por tanto, el último grupo en hacer el examen, por descarte, puede intuir qué preguntas pueden caer (que son de los epígrafes que no han preguntado a los demás grupos). En los tres exámenes que han hecho hasta ahora, el último grupo en hacer el examen siempre ha sido el mismo (3ºD). Los alumnos de otros grupos se quejan de que este grupo puede deducir casi siempre lo que les va a caer en el examen (que es lo que el profesor no les ha preguntado a los demás grupos). De hecho, las notas de este grupo suelen ser más altas que las de los demás (aunque también es verdad que en este grupo hay gente muy buena, ya que están los que mejores notas obtuvieron en 2º de la ESO).

Los chicos, por lo que se ve, dieron en el clavo y sacaron unas notas muy buenas (entre que el grupo ya es bueno y la deducción que hicieron, salieron unos resultados escandalosos). Más de la mitad de la clase con un sobresaliente. Según se ve, los alumnos de los otros grupos están molestos, ya que dicen que este profesor siempre muestra predilección por este grupo (ya que están los alumnos "empollones" y los que mejor se portan).

Esto ha pasado desde que empezó el curso. Lo que pasa es que en este último tema, los números cuadraban muy bien (8 epígrafes entre 4 grupos=2 preguntas por grupo; 4 climas entre 4 grupos=1 grupo por clima). Esta vez la cosa ha cantado bastante ya que todo era muy cuadriculado. De todas formas, el profesor ha dicho que si ellos se centran en lo importante (que es estudiar) les debería dar igual lo que se pregunta o se deja de preguntar a 3ºD. Les dijo que lo que tienen que hacer es esforzarse más, estudiar más y quejarse menos, y entonces, les dará igual lo que hagan los demás. Les dijo que el derecho a quejarse hay que ganárselo.

Como el profesor se ha encontrado con esta polémica, les ha dicho a los chicos que a partir de ahora los exámenes van a ser por la tarde (fuera de horario escolar), para que los 4 grupos puedan juntarse y hacer el mismo examen y así evitar estas quejas. Esto, en lugar de calmar a los chicos, les ha hecho agitarse más y enfadarse (que no es justo ir por la tarde a hacer un examen, que eso no es legal, etc...).

Según se ve, el otro día en clase, este profesor tuvo un problema con uno de sus alumnos. Este alumno se dirigió a él con unas formas muy poco adecuadas, pero dicíendole varias verdades. Le dijo que la culpa era solo de él por no tener ni p... idea de organizar los exámenes y que esta "gilipollez" se solucionaría poniendo una parte del examen tipo test, para que así todo el mundo tenga que estudiarse toda la materia. Además, le dijo algo más o menos así "Hay que ser cortito para no encontrar una solución a esto". Al profesor se lo llevaron los demonios cuando escuchó esto, y expulsó al alumno de clase y le puso un parte (principalmente, por las formas empleadas a la hora de dirigirse a él).

La madre de este chico fue a hablar con la directora, ya que piensa que su hijo ha dicho una verdad como un templo, que el castigo es injusto, y que el grupo de su hijo siempre es el primero en hacer el examen, y por lo tanto, lo tiene más difícil que nadie. Le dijo que su hijo no para de sacar sietes en geografía, y que esos sietes no son justos, ya que valen más que los nueves que han sacado los del grupo D, los cuales ya saben casi siempre lo que les va a caer, por ese procedimiento tan peculiar que tiene el profesor a la hora de hacer las preguntas para los exámenes.

La vecina, antes de irse de viaje, le dio a mi suegra unas copias de la llave de la casa y le pidió (como favor) que si podía pasarse a regar las plantas mientras estaban fuera. Como iban a estar de viaje unas tres semanas, le dijo que con dos veces que fuera a regar a lo largo de ese tiempo era suficiente. Además, las plantas las tiene en el patio, y no es mucho lo que hay que hacer. Mi suegra dijo que vale, que no le importaba pasarse un par de veces para dar un repaso a las plantas.

La vecina le comentó que también había dejado una copia de la llave a su hermano y a su cuñada (que viven en un pueblo de alrededor), por si pasaba algo. De todas formas, la vecina comentó que su hermano nunca viene a la ciudad (si viene, lo hace de Pascuas a Ramos y casi nunca se pasa por la casa). Ella le dio una copia de la llave por si acaso, pero el favor de regar las plantas se lo pidió solo a mi suegra (ya que con el hermano y la cuñada no tiene mucho trato, pues apenas vienen a visitarla). Es la vecina la que tiene que visitar a su hermano. Por eso, confiaba más en mi suegra y le pidió el favor de regar, para no poner en un compromiso al hermano y "obligarle" a venir. Además, mi suegra es vecina y está más cerca.

La otra tarde mi mujer, mi suegra, mi cuñada, la hermana de mi suegra, y varias amigas de mi mujer y mi cuñada estuvieron tomando café en casa de mi suegra y haciendo un poco de tertulia. Una de las veces, mi suegra comentó que tenía que ir a casa de la vecina a regarle las plantas, ya que tenía que haber ido hace tres días, pero por unas cosas o por otras, lo había ido dejando.

Todas las mujeres que estaban ahí empezaron a bromear sobre el hecho de que la casa de la vecina estaba vacía y podían ir a cotillear un poco y ver cómo tenía todo. Lo que empezó siendo una gracia, al final lo empezaron a debatir en serio y mi cuñada dijo que podían acompañar a mi suegra y así dar una vuelta a la casa y ver cómo la tiene. Mi mujer, por ejemplo, quería ir a ver los muebles y las habitaciones. Ellas decían que tampoco estaban haciendo nada malo: solo acompañar a mi suegra y ver cómo tenía la vecina la casa.

Al final, decidieron acompañar a mi suegra a regar las plantas. Aunque el patio está en la planta baja, las mujeres estuvieron dando una vuelta por toda la casa, mirando algunas cosas. Subieron al piso de arriba donde están las habitaciones. Cuando estaban todas en el piso de arriba oyeron abrirse la puerta de la casa. Al parecer era el hermano y la cuñada de la vecina que habían venido a la ciudad (cosa rara en ellos) y se habían pasado a echar un vistazo a la casa.

En principio, el hermano y la cuñada se quedaron en la planta baja. Según se ve, estuvieron un poco en el salón viendo la televisión y tomando algo. Mi mujer y las demás tampoco podían bajar para que nadie las viera. Así que se tuvieron que quedar arriba un montón de tiempo esperando a que se fueran. El problema es que no se iban. Estuvieron hasta la noche. Al parecer, vino más gente a la casa (serían amigos o alguien) y encargaron comida o algo porque mi mujer me decía que había un matrimonio más con ellos, y como todos estaban en el salón no podían bajar y montar escándalo.

Resulta que mi cuñada había dejado su teléfono móvil sin querer encima de un mueblecito que había en el hall del segundo piso. Estaría mirando alguna cosa y sin darse cuenta dejaría encima el móvil y luego se olvidó de que lo tenía allí.

Yo sabía que mi mujer se había ido a tomar café con mi cuñada (lo que yo no sabía era que después se habían juntado con más amigas y se habían ido a casa de mi suegra). Como vi que era tarde y no venía, y mi mujer se dejó en casa el móvil, decidí llamar a mi cuñada para ver dónde estaban, ya que habían estado toda la tarde fuera. Como ya os he dicho, mi cuñada había dejado sin querer el móvil sobre un mueblecito del hall del segundo piso.

Por tanto, cuando yo llamé a mi cuñada, el móvil sonó y desde el piso de abajo, la gente pudo escuchar el sonido del teléfono, llamando la atención. Por eso, la cuñada de la vecina subió al piso de arriba para ver de dónde venía el sonido. Cuando subió al piso de arriba se encontró todo el pastel: mi mujer y todas las demás ahí. Mi mujer me comentó que aunque parezca gracioso, pasaron muchísima vergüenza, ya que todo el mundo se quedó sorprendido al ver a tanta gente en el piso de arriba. Imaginad con qué cara va a mirar mi suegra a la vecina cuando vuelva, ya que me imagino que el hermano y la cuñada se lo acabarán diciendo todo.

Lo gracioso de todo es que ellas piensan que yo he sido el principal culpable por llamar a mi cuñada. Mi cuñada y las amigas de mi mujer me montaron el otro día una escenita diciéndome que cómo se me ha ocurrido llamar y que si no hubiera llamado, nada de esto habría pasado, ya que el hermano se habría ido de la casa y ellas hubieran podido salir.

Conclusión: le jeta y el morro que tiene la gente es impresionante. Te cuelas en una casa que no es tuya, haces algo que no está bien y en lugar de asumir la culpa y demostrar capacidad autocrítica, sigues pensando que el culpable es otro. Por lo menos mi mujer fue autocrítica: sabe que lo que hizo no estuvo bien y ella se lo ha buscado. Por lo menos, ella fue la única que fue sincera admitiendo las "cosas malas" que hizo (abrir un cajón, leer algunos papeles, etc...). Pero es que las demás (sobre todo, mi cuñada) en lugar de reconocer la culpa, me monta un pollo a mí diciendo que yo soy el principal responsable por llamar, ya que si no llamo el teléfono no hubiera sonado y no hubiera llamado la atención de la gente. Ole tus narices, Mariloles!!!!! Y las amigas de mi mujer no se quedan atrás, ya que en lugar de decir "la hemos cagado" están diciendo que si yo no debería haber llamado, que si esto, que si lo otro.

Yo le dije que no me parece bien que intente culpar a la gente de sus errores. Y también fui sincero: me pareció lamentable/bochornoso/asqueroso lo que hicieron. A mí me pasa eso y se me cae la cara de la vergüenza (aunque mi mujer estuviera implicada). Encima, mi cuñada intentando buscar justificaciones: que solo estuvieron viendo la casa, que tampoco hicieron daño a nadie, que lo que hizo el hermano de la vecina también estuvo mal (traerse a gente y encargar unas pizzas en una casa que no es la tuya, por mucho que sea la de tu hermana, etc...). Yo le dije que a ella no le debería importar lo que hizo el hermano, sino lo que ha hecho ella.

Y otra cosa: si ella dice que no es malo lo que están haciendo...¿Por qué se anda escondiendo? ¿Por qué tiene que esconderse durante horas esperando a que la gente se vaya? Si tan "normal" te parece lo estás haciendo, tampoco debería darte miedo de que la gente lo sepa. Es asombroso que ella diga que no tiene importancia. Si no tiene importancia, no debería darte miedo/pudor/vergüenza de que te vean en la casa. Sin embargo, ella ha estado escondiéndose. Por lo tanto, significa que tiene vergüenza y ella sabe que lo que estaba haciendo no estaba bien.

Por lo menos, mi mujer reconoce que la ha cagado (algo es algo), pero es que las demás: cero autocrítica y cero humildad.

Además, le dijo a la directora que este profesor no para de hacer comparaciones entre el grupo de su hijo y el grupo D (que si los del D se comportan mucho mejor, que si estudian más, que si sacan mejores notas, etc...). La madre dice que eso de mostrar esas preferencias no es de ser un buen profesional.

Este chico, va y me dice (muy irónico y con retintín): "se trata de una cuestión legal y las normas no las hacemos nosotros. Hay que cumplirlas". Como veis, ese tono desafiante habla por si solo.

En el centro de este barrio hay una plazoleta con un edificio de 8 plantas. Las dos primeras plantas de este edificio están destinadas a negocios: hay varios abogados, un centro estético, varias consultas médicas, una notaría e incluso una academia de inglés.
El resto de estas plantas son las viviendas normales (de la gente que vive en el edificio).

Por la mañana temprano se han puesto unos piquetes en la puerta de este edificio no dejando pasar a la gente que iba a estos negocios. Lo que pasa es que se mezclaba la gente que venía a los negocios con la gente que pasaba porque tiene su casa ahí, y por eso, algunos de los que venían a los negocios decían que venían a ver a su familia y así podían pasar.
Al final, los piquetes se dieron cuenta que había gente que entraba a los negocios, así que decidieron no dejar pasar a nadie al edificio.

Una de las vecinas del bloque (que vive ahí), según se ve salió, unos minutos de su casa para visitar a un familiar suyo (que vive en el bloque de enfrente) y se dejó la comida con la lumbre encendida. Como iba a tardar poco, se dejó a fuego lento la comida y se fue a ver al familiar.

Cuando volvió de la visita, estaban los piquetes en la puerta diciendo que no iban a dejar pasar a nadie. La mujer dijo que era vecina, pero los del piquete le han dicho que lo sienten mucho, pero que mucha gente se ha colado diciendo que venían a las viviendas, cuando era mentira (ya que iban a los negocios de la primera planta). Así que por eso, no iban a dejar pasar.
La mujer dijo que se había dejado la lumbre puesta en la casa y que tenía que subir, pero el piquete pensaba que era mentira y lo hacía para entrar a alguno de los negocios.

Menos mal que uno de los vecinos empezó a oler a quemado en el patio interior (vio que salía bastante humo). Entonces, se pudo solucionar rápidamente la situación. No hizo falta llamar a los bomberos ni desalojar el edificio, pero casi se lía una buena. Menos mal que se solucionó rápido.

La tutora de mi hijo (1º ESO) hace con los chicos un pequeño plan de motivación todas las semanas. Desde el principio de curso (y hasta el final de curso me imagino que lo harán) en horas de tutoría, la profesora se encarga de elegir al "alumno de la semana", es decir, aquel chico que a juicio de la tutora ha sido el mejor alumno (en todos los sentidos): saca buenas calificaciones, se porta bien, se esfuerza, es buen compañero, etc...

Al principio de curso la tutora hizo una especie de cuadro de honor en una de las paredes del aula. Colgó una serie de etiques que decían "Semana 1" (de X día a X día), "Semana 2" (de X día a X día). Todas las semanas (en los 10 últimos minutos de la clase de tutoría) la profesora dice el nombre de los 3 mejores alumnos de esa semana, y luego después, entre esos 3 elige al "mejor". Lo que hace la profesora es colgar una foto de dicho alumno en el "cuadro de honor casero" y le da como regalo un pequeño cucurucho de esos de chucherías.

Lo que sí hace la tutora todas las semanas a los profesores que impartimos clase en este grupo es pedirnos las notas que les hemos puestos a los chicos (cualquier nota, sea de examen o incluso de alguna actividad o de clase). Yo sé que toda la semana a mí me está pidiendo de cada alumno notas. Y según se ve lo hace con todos los profesores del grupo (para así tener vigilado el rendimiento de los chicos). La tutora aprovecha esta actividad para estar actualizada de lo que sucede en el grupo. A la hora de elegir al "alumno de la semana" la profesora dice que tiene en cuenta TODO. Mira las notas, pero también valora la evolución, el esfuerzo, los comentarios que hacemos los demás profesores, el comportamiento (si ha hecho algo bueno esa semana o algo malo, etc...). Luego elige a los 3 mejores, y de esos 3, nombra al "alumno de la semana" y le da las chuches y le pega la foto suya, debajo de la semana correspondiente.
Yo como doy clase al grupo, puedo ver ese "cuadro de honor".

Los profesores son los encargados de tutorizar el trabajo de los alumnos que han elegido (revisar las versiones del trabajo, aclarar dudas, recomendar materiales, etc...). Cada profesor puede tutorizar como máximo a 3 alumnos.

Además, en horario de tarde se organizan periódicamente una serie de seminarios de orientación sobre la realización de ese trabajo. Son 6 seminarios obligatorios:

Mi sobrina pequeña está en 4º de Primaria. La maestra que les da clase de lengua, matemáticas y conocimiento del medio es un poco "caótica" (por decirlo de alguna manera) a la hora de organizar los exámenes. Desde el año pasado que tienen clase con ella, la profesora les ha dicho (tanto a los niños como a los padres) que el estudio debe ser diario, por tanto, no hay necesidad de tener que poner fecha de exámenes, ya que los niños deberían estar preparados para realizar exámenes en cualquier momento del curso y de cualquier tema, si estudian como tienen que estudiar. Por eso, algunas veces les avisa (tal día hacemos el control de X tema), pero otras veces no avisa y les pone el examencillo directamente. Las madres (como mi cuñada) siempre han criticado esto de la profesora, ya que es muy caótica: cuando quiere les avisa con mucho tiempo de antelación, otras veces les avisa de un día para otro, otras veces no avisa y lo pone el mismo día. Hay veces que pone preguntas de temas ya vistos, otras veces de un sólo tema, otras veces agrupa varios temas. Como veis, esta mujer no tiene sigue unas reglas fijas y las va cambiando caóticamente según estima oportuno. Tan pronto hace un examen por trimestre, como a lo mejor todas las semanas. Incluso si un niño la pregunta qué temas entra, la profesora dice que no va a responder, ya que si estudian "como Dios manda", estarían preparados para responder cualquier cosa. Incluso alguna vez ha hecho exámenes con preguntas de lengua, matemáticas y conocimiento del medio todas mezcladas. Incluso algunas veces habla con las profesores de música, religión o inglés para poner algunas preguntas de sus asignaturas en los controlillos. Mi cuñada dice que es un caos de mujer, ya que es como una caja de sorpresas y no entienden cómo luego puede evaluar exámenes de contenidos tan dispares que dan otros profesores, y exámenes de tanta tipología, ya que tampoco les dice nada del valor de cada examen. Es un caos. Luego, encima, no respeta las horas de sus tres asignaturas (a lo mejor tienen conocimiento del medio, y en su lugar se ponen con lengua, o a veces, enlaza dos horas seguidas de matemáticas). Ella dice que lo hace para organizarse mejor y ajustarse a las necesidades de los niños.

-Seminario 1 (2ª semana de noviembre): Introducción: sesión informativa de carácter general sobre el trabajo de investigación: justificación de su elaboración, procedimiento y evaluación.

-Seminario 2 (4ª semana de noviembre): Técnicas de búsqueda de información (diccionarios, recursos bibliográficos, bibliotecas, medios de comunicación, revistas, nuevas tecnologías, etc...).

-Seminario 3 (después del puente de la Constitución): Técnicas de tratamiento de la información (lectura comprensiva, subrayado, esquema, resumen, reseña, jerarquización de la información, selección de citas).

-Seminario 4 (a la vuelta de Navidades): Normas de redacción y presentación del trabajo.

-Seminario 5 (junio): Seminario para resolución de posibles dudas y control del trabajo realizado hasta el momento

-Seminario 6 (en diciembre , cuando los alumnos estén en 2º de Bachillerato): Técnicas de exposición oral y defensa del trabajo de investigación

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Normalmente, cada año hay un par de profesores encargados de impartir estos seminarios. Organizamos un sorteo y salen dos nombres. Esos dos profesores serán los que se encarguen de impartir esos seminarios de orientación para hacer el trabajo. A principios de curso organizamos el sorteo y salieron elegidos un profesor de matemáticas y otro de educación física.

Durante este mes de octubre los alumnos han estado eligiendo tutor y tema. Este año (al igual que los dos cursos pasados) no hay nadie que me haya elegido, así que no tengo que tutorizar ningún trabajo. Entonces la directora ha dicho que como nadie me ha elegido me encargue yo de impartir los seminarios (aunque ya se haya celebrado el sorteo), ya que soy el único que no tengo que tutorizar este año, y como tutorizar trabajos es algo que quita tiempo, para igualar un poco las cosas debería encargarme de los seminarios. Además me ha dicho que ya son tres años seguidos sin tutorizar, así que lo más normal sería que yo me encargara de hacer los seminarios.

A mí eso me ha sentado muy mal. Si se ha hecho el sorteo, debería respetarse el resultado del mismo. Además, yo ya me había hecho a la idea de que este año no me tocaba impartir los seminarios y ahora tener que cambiar de planes no me hace gracia (es tiempo que te quita).

Mi hijo ha dicho que debería basarse únicamente en las notas escolares para dar la mención. Entonces la tutora le ha dicho que ella hará lo que crea conveniente y que él no es para nadie para decidir cómo hace su trabajo, y que un alumno es mucho más que una nota.

Como la tutora es compañera mía de trabajo, hoy que la he visto me ha dicho que mi hijo se ha tomado la "coña" del alumno de la semana (que es simple programa de refuerzo) como si fuera algo muy importante. Me ha dicho que es muy competitivo y se lo está tomando muy a pecho cada vez que no lo eligen

Yo he pasado por la calle justo cuando ya había pasado todo. Estaban algunos vecinos fuera, la mujer y algunos de los piquetes. Los piquetes decían que ellos no tenían la culpa, ya que la culpa es de la mujer por ser una irresponsable y dejar el fuego encendido mientras está fuera de casa (aunque solamente sean unos minutos), y el hecho de que ellos estén o no estén en la puerta, no exime de culpa a la mujer. La mujer decía que la culpa era de los piquetes por no dejar a la gente pasar. Al final no sé cómo ha acabado la cosa (yo ya me he ido de allí).

Yo les dije que vale, que vamos a ponernos "normativos" y "teóricos" y cumplir a rajatabla con lo "legal" e interpretemos clase como "periodo en el que hay un profesor". Yo les dije que les dejaría salir los lunes, martes y miércoles al pasillo entre clase y clase. Yo también saldré del aula cuando termine la primera hora y en ese tiempo podrán salir a hablar, hasta que yo vuelva al aula con la segunda hora.

De todas formas, debido a la atmósfera de "desesperación" (nos tenemos que ir a Valencia, no tenemos a nadie, etc...) mi mujer aceptó (pero de muy mala gana). Al final, nos quedamos con los 4 niños.

Os voy a contar una cosa que le ha sucedido a la hija de unos amigos. Creo que nos puede servir como situación para reflexionar, analizar y valorar.

La chica está en la Universidad. Por lo que se ve, tienen a una profesora que les da dos asignaturas (en dos momentos diferentes de la carrera): una en el segundo curso, y otra en el cuarto curso. Las dos asignaturas están muy relacionadas, y de hecho, en la asignatura de 4º hay algunos temas en común con la asignatura de 2º. La propia profesora les dice que en la asignatura de 4º combina temas de repaso de 2º con temas nuevos, ya que los conocimientos anteriores son necesarios para entender cosas del curso más avanzada. Ella misma les ha dicho que le hubiera gustado que las dos asignaturas fueran seguidas (una en el primer cuatrimestre, y otra en el segundo de un mismo curso), ya que así hubiera sido todo seguido y los conocimientos de la primera asignatura estarían más frescos. Sin embargo, para cursar la segunda asignatura tienen que pasar dos años desde la primera (para un alumno que sigue el orden normal de la carrera). Por eso, luego los alumnos llegan con bastante lagunas a la de 4º ya que ha pasado mucho tiempo. Por eso, decidió estructurar la asignatura de 4º de tal forma que combinaran cosas de repaso de 2º con cosas nuevas de 4º. En ningún momento, la profesora ha impuesto prerrequisitos para cursar la de 4º (tener aprobada la de 2º), pero en la programación lo recomienda. A pesar de ser repaso, la profesora les dice que todo lo que dice en clase es importante, así que aunque sean temas que ya medio conocen de 2º, también les puede caer como pregunta de examen de 4º.

Resulta que la hija de mis amigos, y unos cuantos más de su grupo, viendo que el horario era compatible han decidido matricularse en las dos asignaturas de esta profesora: en la de segundo y en la de cuarto. Así que este curso ven por partida doble a la profesora.

En ambas asignaturas, la profesora utiliza la misma metodología y criterios de evaluación, pues las lleva paralelamente y la forma de trabajar es idéntica en ambos casos. Resulta que esta semana había puesto el examen parcial de ambas asignaturas. Puso como fecha el lunes 11 de noviembre tanto para la asignatura de 2º como para la asignatura de 4º. Uno lo hizo a las 4 de la tarde y otro a las 6. Por tanto, el grupo de chicos que se cogió las dos asignaturas tenía esa tarde los dos exámenes seguidos. Ellos hablaron con la profesora para que los pusiera en días diferentes. La profesora les dijo que no, que no fueran tan llorones y que también tenían que aprender a organizarse, y que si estudian al día no les importaría tener dos exámenes el mismo día. Además, les dijo que tampoco eran para tanto, ya que hay temas que coinciden para las dos asignaturas (que son idénticos), así que ya están matando dos pájaros de un tiro.

La profesora sigue siempre una misma metodología para los exámenes. Se trata de un examen teórico de desarrollo (las prácticas las evalúa de forma separada mediante entrega de trabajos). Propone dos temas y los alumnos eligen y desarrollan uno de ellos. Además, para dar cierta objetividad, se trae un bombo de una lotería de esas de juguete que tiene en su casa, saca dos bolas (delante de los chicos), y los números que salen son el número de los temas que los chicos tienen que desarrollar (eligiendo uno u otro).

En el examen de 4º siguió este procedimiento. Sin embargo, en la asignatura de 2º, solamente sacó una bola en vez de dos. Por lo que se ve, este año ha ido bastante más lenta en 2º (han coincidido los días de clase con días de fiesta, de huelga, reuniones de departamento, etc...). Eso y que los alumnos tenían más problemas, le ha costado avanzar y solamente ha visto 5 temas. La profesore les dijo a los chicos hace un par de semanas que 5 temas son muy poco para dar a elegir entre 2, así que solamente sacará una bola, y esa será el tema que desarrollen, ya que son pocos temas. En 4º, como dieron 13 temas, sí sacó dos bolas para que eligieran entre dos temas.

El lunes, la hija de mis amigos tuvo los dos exámenes. Primero el de 2º. La profesora sacó solamente una bola (tal como se había acordado). La hija de mis amigos hizo su tema y salió bastante contenta, ya que era uno de sus temas favoritos. En general, los chicos estaban muy contentos con el tema que había salido.

Luego llegó el examen de 4º. Ya os he dicho que en la asignatura de 4º hay temas que coinciden con la asignatura de 2º. La profesora sacó dos bolas. Resulta que la primera de esas bolas era el mismo tema que había salido en el examen anterior. La segunda bola era un tema de los "feos", de los últimos, que solamente era exclusivo de 4º.
Tanto mi amiga, como el grupillo de chicos que habían escogido las dos asignaturas decidieron volver a hacer el mismo tema del examen anterior, ya que se lo sabían muy bien y el otro era más "feo".

Resulta que la profesora les dijo que la gente que había hecho el examen de 2º, ahora en el de 4º hiciera la otra opción, ya que sería absurdo volver a desarrollar un tema que habían hecho hace 10 minutos, ya que sería una pérdida de tiempo para ellos (tener que escribir otra vez lo mismo) y para ella a la hora de corregir, así que les dijo "los que habéis hecho el examen anterior conmigo, tenéis obligatoriamente que hacerme el tema segundo".

Hace un par de semanas, según se ve, hicieron un partido amistoso. Aunque se llevan a matar, siempre les gusta organizar en pretemporada algún partido amistoso, por la cercanía que hay entre los pueblos (ya que se llega andando y eso supone menos gasto de desplazamiento).

Como ya os he dicho, los del equipo rival siempre están soltando por la boca cosas muy feas (auténticas burradas) sobre el entrenador. En el amistoso, el entrenador se trajo a su mujer para que viera el partido. Según se ve, la mujer está enferma (fue con un pañuelo en la cabeza...me imagino que estará con ciclos de quimio o algo). El entrenador se la trajo y ella se sentó en las gradas.

Según se ve, el hecho de que estuviera ahí la mujer enferma, hizo que los aficionados del equipo rival se "cortaran" un poco a la hora de soltar por la boca. De hecho, fue la primera vez que nadie insultó ni dijo ninguna burrada. Mis amigos hicieron un comentario, cuyas formas y contextos de uso no fueron las correctas, pero cuyo contenido era una verdad como un templo: a la gente le gusta ser "políticamente correcta" y "bienquedá", ya que en condiciones normales hubieran estado "chinchando" todo el partido contra el entrenador (como ha pasado siempre, incluido en los amistosos). En cambio, como estaba su esposa enferma, a la gente le dio corte insultar al marido. Por eso, mis amigos hicieron un comentario en plan "los mismos tópicos rancios de siempre" (o algo así). Les echó en cara a la gente que todo esto les creara una especie de "tabú".

Mi opinión: Insultar está mal tanto con la mujer enferma como sin la mujer enferma. Mis amigos pecaron de ser demasiado sinceros y emplear unas formas un pelín "brutas", pero creo que en el contenido llevan razón: al final, la gente se portó "bien" no de manera voluntaria, sino porque en ese lugar había una mujer enferma. Y eso es muy triste. El respeto debe existir siempre. Yo sé que mis amigos se pasaron en las formas, y actuaron mal, pero hasta aquí, creo que llevan mucha razón en sus palabras.

Por eso, mis amigos estuvieron insultando al entrenador. Evidentemente, estuvo mal (eso está mal siempre), pero al menos fueron coherentes a sus principios, no dejándose influir por lo políticamente correcto. Ellos se portaron como un día "normal" en este tipo de partidos (como hace toda la afición del equipo rival).

Según se ve, la mujer, de escuchar los insultos y burradas hacia su marido, terminó con los ojos llorosos. Ella cogió, se levantó de su sitio y salió rápidamente de las gradas. La señora tuvo la mala suerte de que al salir, tropezó y cayó al suelo. El hijo de mis amigos (prácticamente es un niño, ya que tiene 12 años) se empezó a descojonar de la caída, y en plan "burla" empezó a cantar mientras la levantaban el "Ay pena, penita, pena".

La gente que había alrededor empezó a decir que tanto el padre, el hijo como el otro hombre eran seres despreciables y que se fueran a vivir a un estercolero, ya que esa forma de comportarse es más propia de animales que de personas, y que esa forma de tratar a un ser humano es vergonzosa.

El padre del chico dijo que no entiende que todo el mundo vaya de juez y de predicador del bien, cuando "todos nosotros somos igual de despreciables". Al menos, mi amigo tuvo un gesto autocrítico, considerando que eso que había hecho (especialmente, la manera de actuar de su hijo) no estuvo nada bien. Parece que los únicos malos de la película son mis amigos, cuando todo el mundo ha cometido errores (que parece que no se dan cuenta). Si ellos se han apaciguado no ha sido por voluntad o por educación, sino porque esa mujer estaba enferma. Por tanto, yo soy el primero en reconocer que mis amigos perdieron las formas y no supieron estar a la altura (me avergüenzo de que sean amigos), pero al menos, no fueron hipócritas y dijeron muchas verdades (aunque duelan). La gente ahora va de digna y de buena (hay que tener respeto, hay que tratar a la gente bien, etc...) cuando ellos han sido los primeros en decir auténticas burradas del entrenador. Según mi cuñado, la cantidad de cosas que se han dicho en cada partida es para escribir un libro.

Los chicos decían que solamente tendrían que castigar al chico que bailó delante de la profesora, ya que fue el principal culpable.

Nosotros estábamos muy enfadados por todo lo que pasó (tenéis que entenderlo, ya que la gente tiene una cara y una jeta impresionante, y te sienta mal que actúen de ese modo). De todas formas, los críos no tienen la culpa de nada, así que los tratamos normal. El enfado lo teníamos con la madre, que nos encasquetó a los críos.

Hace 12 años murió un hermano de mi mujer en un accidente de tráfico. La verdad es que fue un trago muy duro, especialmente para mi suegra y para la esposa e hijo del fallecido. Además, lo del hermano de mi mujer ocurrió justo un mes después de la muerte de mi suegro, así que imaginad el panorama.

De un día para otro, la mujer del fallecido empezó a distanciarse del resto de la familia. Ella decía que ahora que no estaba su marido, no tenía ganas de seguir manteniendo esa relación de familiaridad que había antes con el resto de la familia (ni con mi suegra, ni con los hermanos de mi mujer ni con los sobrinos). Los hermanos de mi mujer entendieron al principio esta decisión, ya que la mujer había pasado un trago muy duro, y es normal que no tenga muchas ganas de sones. Sin embargo, la mujer decía que si ella había aguantado al resto de la familia era por su marido, pero ahora que él no estaba no quería seguir relacionándose con los demás. De hecho, cada vez que algún hermano de mi mujer se acercaba a visitar a la viuda siempre eran malas caras hasta que un día ella dijo que la dejáramos en paz, y que era su decisión.

Resulta que hace unos meses mi suegra puso en venta una casa que tiene en el pueblo. La mujer va poco por el pueblo, así que analizó la posibilidad de poner en venta la casa (muchas veces que ha ido al pueblo, siempre se ha acabado alojando en casa de su hermana en lugar de su propia casa). Por eso, en enero de este año decidió ponerla en venta. Su idea era repartir el dinero obtenido por la venta de la casa entre los diferentes nietos (ya que quería tener un detalle con ellos). No se trata de un testamento ni nada parecido, sino de una iniciativa personal que quiso hacer sin necesidad de "oficializar" nada.

Me imagino que cuando mi suegra puso la casa en venta, las vecinas se interesarían por el tema (en plan: ¿Por qué vendes la casa?). Mi suegra les diría la verdad (que la vendería y repartiría en dinero entre los nietos).

La mujer del hermano fallecido de mi esposa es de este mismo pueblo. Me imagino que por las vecinas se acabaría enterando de que mi suegra iba a repartir el dinero entre los nietos.

A las 3 semanas de poner la casa en venta, tanto mi cuñada viuda como su hijo se presentaron en casa de mi suegra a hacerle una visita. Después de 10 años tuvieron el valor de ir a verla. Según me contó mi suegra, se presentaron como si nada hubiera pasado en 10 años. Todo fue en plan cordial, con muchísima confianza, como si mi cuñada fuera una más. A mi suegra casi le da algo con esta visita, ya que todo fue inesperado. Imaginad el cuadro: después de tantos años, verlos otra vez ahí como si nada pasara, con todo el "cariño" del mundo. A mí se me caería la cara de vergüenza presentarme de esta manera después de tanto tiempo y sin tan siquiera dar ninguna explicación. Mi suegra dice que esta visita la hicieron como si fuera una visita normal de la familia, sin comentar nada de todo lo que pasó durante estos años.

A partir de aquí empezaron a llamar a mi suegra con más frecuencia y a hacerle visitas esporádicas (cada semana, más o menos). Cuando el resto de hermanos se enteraron de que esta mujer empezó a retomar las relaciones con mi suegra, justo cuando mi suegra había puesto la casa en venta, se armó la marimorena. Mi suegra no se dio cuenta de esta "curiosa coincidencia" (la mujer vuelve a entrar en contacto con la familia justo cuando la casa está en venta) Qué casualidad!!!!!!!!

Algunas de mis cuñadas estaban indignadas, pero tampoco querían decírselo a la cara, ya que mi suegra parecía contenta y tampoco querían comerle la cabeza con estos temas (para ella, volver a ver a su nieto era una alegría). No obstante, os puedo asegurar que las críticas hacia esta mujer han sido de padre y muy señor mío (las hermanas de mi mujer, aunque haya sido a sus espaldas, la han puesto de sinvergüenza, de rastrera y de todo). Si nadie se lo ha dicho a la cara ha sido por no liarla y no dar un disgusto a mi suegra, pero todos los hermanos están indignados.

La semana pasada mi suegra consiguió vender la casa de manera oficial. El hijo de esta mujer (como nieto de mi suegra) también se ha llevado su parte. Resulta que mi mujer y yo, hace unos cuantos años, estuvimos ayudando a mi suegra a hacer la reforma de esa casa. Nosotros le pagamos a mi suegra la caldera, el cambio de suelos, de puertas, los muebles, etc...Por eso, a la hora del reparto por la venta, mi suegra ha tenido en cuenta esta detalle y a mi hijo le ha tocado un poco más que a los demás nietos.

En más de una ocasión, los alumnos han utilizado los foros de la asignatura de Lengua de manera indebida (en lugar de para tratar temas de Lengua, para hacer bromas, escribir tonterías o hacerse gracias). Por tanto, no es la primera vez que los alumnos la lían en el Moodle.

La otra tarde me metí al Moodle para colgar unos esquemas, cuando vi que un 90% de la clase estaba conectada. Yo ya sabía que "algo" pasaba (uno, con los años, acaba conociendo a los chicos más que a Lepe, y yo ya supe en cuanto vi a casi todos los alumnos conectados, que habrían hecho algún sabotaje en el foro de la asignatura).

Como es lógico, no me equivoqué. Me metí al foro y vi un montón de temas abiertos con los títulos paralelos. Todos decían "La experiencia más [adjetivo] de mi vida".

Todos los hilos contenían pequeñas historias (de 3-4 líneas) y en todas ellas se contaban anécdotas donde se aludía al "pollo a la milanesa".
Ejemplos:
-Ayer fui a un restaurante y en la mesa de al lado estaban comiendo pollo a la milanesa
-Hoy he discutido con mi madre ya que ella quería darme de comer ensalada y yo quería pollo a la milanesa
-Buscando en el contenedor de basura, encontré pollo a la milanesa.

Eran pequeñas anécdotas donde de una manera u otra, siempre se citaba el "pollo a la milanesa". Debajo del tema, los alumnos hacían comentarios jocosos, haciendo humor con esto.

Yo, como administrador del espacio, no voy a consentir que se utilice el Moodle para estas cosas. Por eso, borré absolutamente todos los temas. Los chicos seguían haciendo temas con el pollo a la milanesa. A mí no me daba tiempo a borrar, ya que había muchos alumnos conectados. Era una impotencia enorme, ya que por más que borraba, el foro se iba llenando de materiales.

Al final, tuve que poner yo un mensaje en el foro, diciendo que al siguiente mensaje con la "bromita", suspendía la evaluación a su autor.

Con eso, conseguí calmar a los chicos un poco, los cuales dejaron de escribir. Así, pude borrar todos los temas y dejar el foro limpio.

Al día siguiente tuve clase con ellos. Me enfadé bastante, ya que no es la primera vez que utilizan el Moodle de esa manera (para hacer bromitas, quitando importancia a los materiales importantes de la asignatura).

Los chicos me empezaron a decir que soy un aguafiestas y un amargado. Me comentaban que había muy buen rollo esa tarde, ya que todo el mundo estaba conectado, haciendo bromas y pasándolo bien de una manera sana, sin perjudicar a nadie y sin hacer nada malo.

Una chica me dijo que las bromas eran curradas, ya que esas anécdotas del pollo a la milanesa estaban bien redactadas, y se habían tenido que currar la historia y escribirla bien (aunque fuera corta). Otras veces habían hecho bromas fáciles (poniendo imágenes ya hechas de Internet con algún comentario "sencillo"). Según se ve, esta vez, se han tenido que currar las bromas, imaginando la anécdota y redactándola en unas líneas. Por eso me decía que no tenía que haber borrado nada.

Otro chico me dijo que a mí como profesor de Lengua siempre me gusta hablar de que hay que redactar, escribir bien, sin faltas de ortografía. Y luego, como tutor, siempre me gusta hablar de la "cohesión del grupo". Por eso, algunos me acusaban de no ser coherente, ya que para hacer esas bromas, se ha configurado un ambiente muy majo entre toda la clase (que yo, según se ve, he roto), y para hacer las historias se han tenido que currar la redacción.
Por eso, me decían que no tenía que haber borrado nada, ya que cada uno es libre de escribir lo que quiera, pues esos juegos no hacen daño a nadie y tampoco pasa nada por eso.

Yo les dije que el Moodle es una herramienta didáctica. El foro se utiliza para resolver temas académicos. Si yo entro al foro y me encuentro entremezclados temas serios (para resolver dudas, volver a explicar un concepto no entendido, etc...) con temas "jocosos" (las bromitas del pollo a la milanesa) no hay profesionalidad. De hecho, es fácil que entre tanta "mala hierba" se te pasen temas que sí son serios. Si un alumno me pregunta una duda y esta duda queda en medio de todas las bromitas, es fácil pasarla por alto. Por eso, para evitar confusiones, el foro solo debería quedar para temas que sean académicos. No queda bien que una herramienta didáctica se utilice como burla o pitorreo. Por eso, no voy a consentir que se utilice de esa forma (por muy buen rollito que haya).

Por eso, yo les dije que si tanto les gusta escribir, para eso, organizamos dentro del foro un concurso de relatos literarios (con nota numérica para que les cuente para la evaluación), y así todos contentos.

Evidentemente, los chicos dijeron que no (no, que ahora tenemos muchos exámenes; no, mejor otro año, que ahora no tenemos tiempo).

Yo les dije que no me parece normal decir "no tengo tiempo", cuando ellos mismos han perdido una tarde entera haciendo tonterías en el Moodle (me tuvieron 3 horas borrando cosas). Para unas cosas, sí tienen tiempo. Sin embargo, para otras, no. Qué casualidad!!!!!!!!!!!!!!

Lo gracioso de todo esto es que la primera en protestar por esto ha sido mi cuñada la viudita. Según me ha contado uno de los hermanos de mi esposa, la mujer nos ha estado poniendo a parir a nuestras espaldas. Se ha "unido" a dos hermanas más de mi mujer (a las que tampoco les ha hecho gracia este reparto) y nos han puesto a caldo, tanto a nosotros como a mi suegra (por hacer ese reparto). Han dicho que mi suegra ha sido una sinvergüenza, dando más dinero a uno de los nietos, que nosotros tendríamos que haber rechazado ese dinero, que el reparto debe ser equitativo y todos los nietos llevarse lo mismo, etc...

Me hace gracia que esta mujer, después de 10 años sin mirar a la cara a mi suegra, se crea que tiene la autoridad necesaria para poder criticar, cuestionar o juzgar las cosas de los demás. Ella es la primera en decir que todos los nietos deben ser iguales y recibir el mismo dinero. Sin embargo, parece no acordarse de que ese nieto ha estado muchos años sin saber nada de la familia. A mí se me caería la cara de la vergüenza ir de juez de la vida sin haber limpiado mis trapos sucios. Y lo gracioso es que algunas de mis cuñadas le dan la razón a esta mujer (cuando meses antes la han puesto a caldo por haber retomado relaciones con mi suegra, justo con la venta de la casa). Viva la incoherencia y la hipocresía!!!!!!!!

El sábado por el mediodía nos llama la vecina y nos dice que se quieren quedar en Valencia hasta el domingo por la mañana, ya que les da "cosa" ir solamente para el entierro. Les gustaría quedarse, aunque solo fuera una noche, para acompañar al viudo y al hijo de la fallecida.

Mi mujer hizo algunos comentarios por teléfono para que la vecina se sintiera aludida, para que al menos se diera cuenta de que una cosa es un favor, y otra cosa un abuso. Nosotros no somos tontos ni gilipo...Al menos, mi mujer quiso transmitir que se encontraba molesta con toda esta situación. Ya sé que la situación es seria (hay una mujer fallecida de por medio), pero nosotros no tenemos esa obligación. No somos una ONG. Tenéis que entender mi postura, por muy "dura" que resulte.

Además, los críos no se portaron del todo bien. Los pequeños se pusieron cansinos y empalagosos (no se estaban quietos, siempre quejándose de qué aburrimiento, tocando cosas que no deben, husmeando por la casa, etc...). El mayor hizo un par de cosas que no nos gustó nada. Metió la mano en uno de los armarios de la cocina (para coger una gominola), sin pedir permiso. Además, el chico se puso a hablar (con toda la confianza del mundo) con la chica que nos limpia. Se cogió unas confianzas que no son normales. Luego la otra también le daba conversación y eso no está bien, ya que se pasaba más tiempo dándole a la lengua con este chico que haciendo su trabajo. Si te pagan para limpiar en una casa, tu trabajo es limpiar la casa y no andar de risitas y de cachondeo con el chico. Es normal que a nosotros nos siente mal.

Además, el sábado por la noche, mi mujer organizó en casa una cena con compañeros de su trabajo. Fueron cerca de 25 personas, por lo que tuvimos que contratar un cátering.

Uno de mis sobrinos está este año cursando el nuevo Máster de Secundaria (el que sustituye al antiguo CAP). Ahora mismo está con varios módulos teóricos, pero cuando los termine comenzará la parte práctica (estar unos meses trabajando en un instituto). Este sobrino vive en un pueblo bastante lejos de la ciudad (es uno de los últimos pueblos de la provincia, a casi 1 hora y media de viaje). Durante el curso académico alquila un piso en la ciudad para evitar tener que ir y venir a casa.

En la especialidad de mi sobrino están matriculadas 7 personas (mi sobrino y 6 chicos más, muchos de los cuales se conocen de la carrera).

El otro día sacaron las plazas para hacer las prácticas. Como en la especialidad de mi sobrino no se matricula mucha gente (casi nunca llegan a 10 personas) las ofertas que sacan también son bastante escasas (casi las justas). Además, con la crisis, apenas pagan a los profesores de instituto por ser tutores de prácticas así que este año muchos se han negado a tutorizar las prácticas. Los pocos que se han ofrecido lo han hecho porque les gusta (sabiendo que casi no les van a pagar este año), así que la Comisión del Máster (al menos en el Campus de mi sobrino) se las ha visto negras para convencer a profesores de instituto para que sean tutores de prácticas. En la especialidad de mi sobrino ha sido tremendo poder sacar algunas plazas (para los 8 matriculados). Han sacado prácticamente las justas.

Así más o menos han quedado las cosas en su especialidad:

-3 plazas en un instituto casi en las afueras de la ciudad (que es donde trabajo yo)
-3 plazas en un instituto que está en el centro de la ciudad
-3 plazas en un institito que está al lado del pueblo de mi sobrino (los pueblos están casi juntos, ni a un kilómetro de distancia)
-2 plazas en un instituto de otra provincia (en un pueblo casi al límite).

El coordinador de la especialidad les dijo a los chicos que lo sentía mucho pero en este campus (y especialidad) les ha costado mucho poder organizar las prácticas y que esto es lo máximo que han podido hacer. Para elegir el centro de prácticas lo harían en función de la nota del expediente (nota de la carrera). Las personas con más nota tenían opción de elegir primero. Mi sobrino es el que tiene la nota más alta, así que tiene que elegir primero.

Todos los chicos (salvo mi sobrino) son de la ciudad, así que querían cualquiera de los dos institutos que se ofertan (3 plazas en cada instituto x 2 institutos son 6 plazas).

Todos pensaban que mi sobrino elegiría el instituto de al lado de su pueblo, ya que es el que más cerca está (está a 10 minutos de casa, ya que mi sobrino vive además muy cerca del instituto).
Así que los otros 6 pensaban que las 6 plazas de los dos institutos de la ciudad eran para ellos.

Sin embargo, mi sobrino no quiere hacer las prácticas en su pueblo. Él está mejor en la ciudad, más libre, sin tanto control de horarios y de entradas y salidas, y no le apetece tener que estar en su pueblo todos los meses que duran las prácticas. Él prefiere seguir aquí en la ciudad porque está mejor.

Ayer hicieron la elección y mi sobrino (primero en elegir) eligió uno de los institutos de la ciudad. Los 5 chicos siguientes fueron eligiendo las plazas que quedaban de los institutos de la ciudad (por orden de nota). El último de los chicos (que es de la ciudad) se quedó sin plazas y tuvo que resignarse a uno de los dos institutos de los pueblos (a hora y media de camino más o menos).

El chico terminó casi llorando. Dijo que era una pu-tada tener que ir a un instituto que está tan lejos, ya que en casa está viviendo una terrible situación (los dos padres en paro) y la cosa no está como para tener que desplazarse a diario y comer fuera todos los días.

Todos los compañeros empezaron a decir que mi sobrino era el culpable, ya que lo suyo hubiera sido que él se hubiera quedado en su pueblo y así la plaza de mi sobrino sería de este chico (que es de la ciudad). Así, ninguno de los 7 tendría que desplazarse para hacer las prácticas. Mi sobrino dijo que él no quiere hacerlas en su pueblo, pues prefiere estar en la ciudad. Todos le empezaron a decir que era un caprichoso y que tenía que ser más razonable y pensar en su compañero y en lo que era mejor para todos. Le dijeron que eso de preferir vivir fuera (con todos los gastos que conlleva) pudiendo hacerlo en su casa en el pueblo, es de ser un poco "pocas luces" (y ganas de hacer gastar a los padres). Es verdad que a mis cuñados les cuesta tener a mi sobrino estudiando aquí y si las prácticas las hiciera en su pueblo sería un menor gasto para ellos, pero mi sobrino se ha empeñado que quiere hacer las prácticas en la ciudad, que está mejor y que no quiere hacerlas en el pueblo. Mis cuñados (que se lo pueden permitir) dicen que si es ilusión de su hijo eso, que se haga y no hay problema (mientras ellos tengan).

El chico que se quedó sin plaza en la ciudad (me dijo mi sobrino) que ayer salió llorando de allí, y todos los chicos (e incluso el coordinador de la especialidad) le pusieron mala cara a mi sobrino y se fueron todos enfadados.

Mi mujer decidió que los 5 críos se pusieran a cenar en la cocina, ya que queda feo que chicos que no conocemos de nada se pongan a cenar con gente mayor, de cierta importancia (ya que es gente del trabajo de mi mujer). Esos niños no pintan nada ahí, con gente que no conocen de nada. Además, los dos más pequeños tienen un comportamiento nefasto en la mesa (no saben comer, ya que no paran de guarrear con el pan, las servilletas, la comida, etc...). La más pequeña tiene una voz de quirio que tira para atrás. Lo único que pueden hacer esos niños es fastidiar la cena. Además, ellos se aburrirían con gente mayor. Por eso, mi mujer les hizo cenar en la cocina.

Un dato: mi hijo no estuvo esa noche porque se fue a dormir a casa de su abuela. Si mi hijo hubiera estado allí, él hubiera cenado con el resto de chicos en la cocina. De hecho, el chico más mayor tiene casi la edad de mi hijo (dos años menos). Lo aclaro, por si pensáis que mi mujer es partidista. Si hubiera estado mi hijo, mi hijo habría sido tratado como el resto de jóvenes (en la cocina, ni más ni menos que nadie).

Por eso, mi mujer les hizo cenar en la cocina. En cuanto a la comida, mi mujer pensó que lo mejor era hacer una comida "para niños" (que a ellos les gustara) en lugar de darles comida del cátering, ya que en el cátering había cosas que no pega con críos pequeños (canapés, pescados, salsas, cosas más "exóticas", etc...). Por eso, les preparó pechugas de pollo con patatas, que es algo que gusta a todos los niños. En cuanto terminaron, mi mujer les mandó al piso de arriba. En ningún momento les ordenó acostarse (era sábado por la noche). Solamente les dijo que se fueran arriba a hacer otras cosas (arriba tienen una consola, un cuarto de juegos, etc...).

Al día siguiente, a eso del mediodía, vino la vecina a recoger a los niños. Como es lógico, mi mujer se tuvo que enfadar y poner seria, ya que la señorita no había hecho las cosas bien (nos encasqueta por la cara tres críos, retrasa su llegada, sus niños se portan mal, etc...). Mi mujer fue clarita con la vecina y le dijo las cosas a la cara. La vecina, en principio, se notaba que estaba avergonzada, ya que lo que había hecho sabía que no estaba bien. La cara cuando vino a recoger a los niños fue un poema.

Esta mañana nos ha llamado mi cuñada y nos ha contado que ayer por la tarde la vecina estuvo hablando mal de nosotros. En el centro cultural del barrio hubo una exposición de trabajos manuales de niños. Vino bastante gente y mi cuñada nos dijo que la vecina estuvo poniéndonos verdes: que menudo valor el de mi mujer por apartar a los niños y hacerles comer en la cocina en lugar de comer con los demás en el salón, que menuda es mi mujer por hacer que unos niños se acuesten a las 9 y media un sábado por la noche, que menuda insensibilidad por no dejar que los críos prueben la tarde del cátering, etc...Después del favor que le hemos hecho, la mujer nos ha estado poniendo a parir. Y lo gracioso, es que lo ha hecho MANIPULANDO y MINTIENDO.

Este problema ha ocurrido desde siempre. Cuando yo llegué a trabajar al instituto (hace ya bastantes años) en el departamento de lengua ha habido una costumbre en la que todo el mundo ha participado de manera voluntaria y con predisposición total y gusto a hacerlo. Tanto los profesores fijos como los de contrato temporal han participado sin necesidad de obligarles a lo largo de estos años. No se trata de algo oficial y escrito, sino de un pacto entre compañeros de trabajo (y si alguna vez, por cualquier necesidad, no se puede hacer, pues no se hace). Todos los profesores depositamos cada mes 60 euros de nuestro sueldo para el departamento, de tal forma que entre el presupuesto anual y esta iniciativa se nos queda una buena hucha. Somos 12 en el departamento, 720 euros extras al mes, unos 8000 euros al año (no está nada mal).

Con esto, siempre hemos podido tirar la casa por la ventana a la hora de organizar actividades y comprar caprichitos (normalmente, "joyas bibliográficas"...como a mí me gusta decir). De hecho, todos los años nos sobra bastante dinero, aunque el dinero nuestro siempre lo tenemos separado del oficial. Un montón de viajes, excursiones, seminarios los hemos pagado con este dinero, ya que ahora en época de crisis sería imposible hacerlo con el dinero que nos dan.

Así, curso a curso hemos formado una buena bolsa acumulada gracias a este dinerillo mensual (ya que nos sobra bastante año tras año). Como teníamos bastante dinero, este año hemos decidido hacer unos cambios en el departamento, ya que el departamento es un lugar en el que pasamos muchas horas al día. Hemos comprado un sofá, varios sillones, una televisión, una nevera, un microondas, una cafetera, ordenadores para todos los profesores del departamento, hemos ampliado nuestra biblioteca, hemos hecho cambios en la decoración (un armario para meter cosas) e incluso también hemos hecho reformas en el cuarto de baño (poniendo unas cuantas cosillas que han quedado muy bien). Al fin y al cabo es dinero nuestro (de años), así que hemos decidido renovar un poco el departamento (que hacía falta). Nos ha costado bastante todo esto (las cosas como son), pero ha merecido la pena para acomodar nuestro lugar de trabajo (además muchos profesores pasan el día entero en el instituto y eso siempre viene bien). Nosotros dejamos claro que esto lo hicimos con NUESTRO dinero (y no con el del presupuesto anual). Hemos dejado la bolsa extra tiritando (el departamento necesitaba una reforma de arriba a abajo) pero era del dinero nuestro de todos los meses.

A pesar de esto, los demás departamentos están que trinan por todos los cambios que hemos hecho. Nos han dicho que aunque sea nuestro dinero está muy mal administrado y que eso tenía que haber sido para actividades y proyectos docentes en lugar de destinarlo para cosas que repercuten exclusivamente en el profesorado de nuestro departamento. Según ellos, ha sido un derroche absurdo y no necesario. Según algunos profesores, se podrían haber hecho cosas más productivas, ya que hay departamentos que no pueden hacer cosas que les gustaría por falta de dinero, y el haber hecho esto, supone como una falta de respeto a todos ellos. También nos han insinuado (en esta caso, dos profesoras de biología) que es poco elegante ser tan opulentos en épocas de crisis como esta, y que ese dinero podría servir para colaborar con el resto de departamentos didácticos en algunas actividades y no para reformar el departamento.

Ella nos dijo que no se nos ocurriera secarnos las manos con esas toallas. Las iba a colocar en los baños de la casa, pero solamente para decorar. Para lavarnos las manos, utilizamos las más "corrientitas".

El otro día vinieron a pasar el día a casa mis dos sobrinillas pequeñas, y se quedaron a comer. Cuando se fueron a lavar las manos, mi mujer les dijo a las niñas que se secaran con las toallas que hay al lado de los lavabos y no con las que hay al lado de la puerta (que son las buenas). Además, mi mujer es bastante insistente y repite mucho las cosas, y dijo varias veces "No se os ocurra", "A las toallas nuevas ni os acerquéis".

Aunque las niñas en principio sí hicieron caso y se secaron las manos con las toallas normales, mi sobrina más pequeña, al terminar de secarse las manos se quedó mirando a la toalla buena, la sacó del toallero y la empezó a tocar y a llevársela a la cara. Tampoco hizo nada más, pero sí la empezó a tocar, oler, manosear, a pasársela por la cara.

Mi mujer entró en ese momento al baño y le entraron las siete cosas al ver a mi sobrina manoseando la toalla buena. Por eso, la reacción fue un poco "intensa". Fue corriendo hacia ella, dando voces a mi sobrina (nunca insultando ni empleando términos hirientes ni despectivos, solamente exclamando cosas como "será posible"....lo típico que haces cuando un niño hace algo así), y le dio unos cuantos golpes en las manos. Mi mujer no abofeteó a la niña en la cara ni nada (para que queden las cosas claras). Solamente (de la propia impotencia) le dio golpes a la niña en las manos, muy enfadada por haber desobedecido. Mi mujer les dijo "no cojáis estas toallas" y la niña no hizo ni caso. Por eso mi mujer tuvo que ponerse así. Evidentemente, mi sobrina pequeña terminó llorando.

Una de esas actividades consistió en la elaboración de un catálogo que recogiera una serie de normas que los niños deberían seguir durante este mes y medio que duran las jornadas. Mi mujer elaboró el catálogo junto a los niños (como una actividad) y luego lo imprimió (en un papel de esos grandes) con dibujos y letras de colores para que quedara "chulo" para los niños. Mi mujer en ningún momento les obligó a cumplir esas normas. Les invitó a ello, pero nunca les obligó. Lo que sí les dijo es que los niños que se comprometieran a cumplir las normas y las llevaran a cabo durante este mes y medio que dura esta actividad, el último día organizaría una pequeña merienda.

Así, el segundo día en el centro cultural mi mujer junto a los niños elaboraron el catálogo, el cual tenía las siguientes normas. Me molesto en transcribirlo para presentar el tema con objetividad:

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DECÁLOGO PARA SER UN CONSUMIDOR RESPONSABLE

1. Cuando vaya a la tienda de golosinas me comprometo a comprar solamente TRES chucherías. Antes de salir de casa escribo en un papel las chucherías que quiero y esas chucherías serán las que voy a comprar.

2. Hasta el 15 de octubre no compro ningún videojuego para la consola. Solamente juego con los juegos que tenga o los que me dejen mis amigos o familiares.

3. Dejaré mis libros de texto del año pasado en el banco de libros de segunda mano del centro cultural para que otros niños que lo necesiten puedan cogerlos. Le diré a mis padres que me compren mis libros de este año en el banco de segunda mano del centro cultural.

4. Le diré a mis padres que me guarden la mitad y un poquito más de mi paga semanal o de cualquier otro regalo en forma de dinero que me den mis familiares.

5. Cuando vaya a un cumpleaños en lugar de regalar algo comprado, regalaré algo elaborado por mí (un dibujo, una carta, una manualidad).

6. Intercambiaré juguetes con mis compañeros del centro cultural y los del colegio cuando empiecen las clases.

7. Haré un consumo responsable de la videoconsola-ordenador y la televisión. Solamente media hora de televisión al día. Solamente jugaremos a la consola u ordenador los sábados y los domingos (media hora cada día).

8. Comemos SIEMPRE en nuestra casa.

9. No compraremos helado. Los helados los haremos en casa tal como nos han enseñado en el centro cultural.

10. Cuando quiera comprar algo, escribiré una pequeña redacción (medio folio) en la que explique por qué es importante lo que quiero comprar y para qué lo quiero. Mis padres decidirán si comprarlo o no. Si dicen que no, tendré que respetar su decisión y podré buscar alternativas que sean divertidas y gratuitas (paseos, salidas al parque, ir a casa de mis amigos o jugar a algunos de los juegos que nos han enseñado en el centro cultural).

IMPORTANTE: Si veo a mi padre, a mi madre o a cualquier otro familiar haciendo delincuencia consumista se lo haremos saber y le regañaremos. Si veo a un amigo mío incumpliendo el decálogo, se lo diré a la seño del centro cultural.
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Los niños se comprometieron a seguir el decálogo (más que nada por lo de la merienda de octubre). Los niños, niños son, pero mi mujer dijo que la idea les gustó y dijeron que lo iban a cumplir (aunque luego me imagino que cada uno en su casa hará lo que quiera, ya que no hay nadie que lo controle).

Resulta que ayer por la tarde mi mujer se fue de compras a una tienda de muebles que abrieron la semana pasada en las afueras. Como la tienda la abrieron hace nada, ahora está llena de gente que se pasa por curiosidad para verla (aunque no compre). Mucha gente es del barrio.

Aunque los muebles del salón los cambiamos hace 6 meses, mi mujer no estaba muy contenta y quería cambiar el sofá por una cheslong. Por eso ayer fue a la tienda de muebles para mirar alguna cheslong que le gustara. En la tienda también había una serie de cojines. Esos cojines eran bastante caros, ya que estaban cubiertos de pequeñas piezas de oro de no sé cuentos quilates. Luego tenían en medio un espejo y diferentes piedras brillantes. Mi mujer se encaprichó de uno y quería comprarlo. Fueron 1780 euros, pero hacía tiempo que mi mujer no se daba un capricho, así que tampoco es para tanto. Es más una joya que un cojín, ya que un cojín así no se va a utilizar para sentarte encima de él. Evidentemente, es para decorar. En vez de comprarte una pieza de joyería, te compras ese cojín (una forma original).

Después, miró una cheslong que le gustaba. Una de las veces, mi mujer le comentó a la dependienta que la cheslong era solamente para adornar, ya que no la iba a utilizar, ya que el salón lo tenemos exclusivamente para los muebles, pero realmente, comemos y hacemos vida en la salita (igual de grande que el salón, pero sin tanto cuidado en los muebles). Mi mujer es muy suya para ciertos temas y el salón prefiere no utilizarlo para no estropear los muebles. De vez en cuando, cuando viene alguna visita o después de la comida para tomar café, estamos en él, pero el resto del tiempo preferimos la salita. Por eso, mi mujer dijo que quería una cheslong bonita. El tema de que fuera cómoda no le importaba mucho, ya que no la iba a utilizar mucho.

Al final compró la cheslong y el cojín. En la tienda de muebles había una mujer, que es madre de uno de los niños que va a las jornadas de consumo responsable que organiza mi mujer.
La mujer le dijo a mi esposa que vaya tela con la "buena señora, que no para hablar de consumo responsable, no gastar y de meter mierdas en la cabeza de los niños, para luego ella comprarse una cheslong que ni siquiera va a utilizar y un cojín que es es lo más inútil y absurdo que he visto nunca". Mi mujer le dijo que ella compra lo que quiere. La señora le dijo que no le recrimina eso, sino le recrimina que no para de hablar de valores delante de los niños (no compréis esto, no gastéis en esto, no se ve la televisión), dándosela de importante, y ella es la primera que debería dar ejemplo. Entonces, según la mujer, es una incoherencia que la que está hablando delante de los niños de consumo responsable, se gaste dinero en cosas absurdas que no va a utilizar.

También le dijo que el decálogo parece redactado por la mismísima Carmen Polo (la que era mujer de Franco) y que no había leído algo tan casposo y tan lleno de gilipolleces "a cada cual más grande", y que había puntos del decálogo que había que reírse para no llorar, ya que era indignante, y encima acompañado de dibujitos y con una redacción que parece que va destinado a engatusar a niños de 3-4 años a los que se les puede convencer de todo, cuando los niños realmente tienen entre 8 y 12 años. Dice que desde que despidieron a los monitores del centro cultural y cogieron voluntarios que quisieran colaborar en el centro de manera gratuita, el centro es una mierda pinchada en un palo, y que ya le vale ir hablando de "escribir redacciones para comprar un juguete" o "solamente se ve la tele media hora". De hecho, le dijo irónicamente a la mía: "¿Qué has puesto en la redacción sobre la cheslong? ¿Cuánto te ha ocupado? (la mujer con cachondeíto encima).

Finalmente, la mujer se fue de ahí y dijo que no podía con tanta hipocresía.

Luego mi sobrina le contó todo a su madre. Mi cuñada le dijo a mi mujer que lo de golpearle en las manos sobraba claramente y que tampoco ha sido para ponerse así. Además, mi cuñada dice que parte de la culpa la tiene mi mujer, ya que siendo tan cansina y repitiendo tantas veces lo mismo ("no toquéis las toallas nuevas"), provocó el efecto contrario, ya que si a un niño más o menos pequeño le dices "no hagas esto", para llevarte la contraria lo va a acabar haciendo. Por eso, repitiendo tantas veces "no se os ocurra", mi sobrina pequeña entró en el juego. Mi cuñada piensa que si mi mujer se hubiera callado y no llega a decir absolutamente nada de las toallas a las niñas, ellas jamás se hubieran dado cuenta de esas toallas y ni las habrían tocado ni nada (se hubieran lavado las manos y hubieran salido del baño tan normal). Sacando a relucir el tema, la niña (por llevar la contraria) ya sabía que había unas toallas que no había que tocar, y por llevar la contraria, decidió tocarlas. Mi mujer con tanta advertencia indujo a que mi sobrina se portara mal (según mi cuñada).

Además mi cuñada dice que hay que tener pocas luces para comprar unas toallas y no utilizarlas, teniéndolas solamente de adorno y que "ya son ganas de tirar el dinero". Al final, a raíz de esto, mi cuñada sacó una serie de temas que no tenían nada que ver con lo importante (que es el mal comportamiento de su hija pequeña).

Ayer a última hora hice una guardia a una compañera y me bajé para la sala de profesores después de hacer la ronda y firmar en el cuaderno de registros. Durante las guardias tenemos que quedarnos en la sala de profesores. Este año apenas voy por ahí, ya que no hago guardias (la de ayer fue una excepción por ayudar a una compañera). Allí en la sala estábamos unos cuantos profesores (solamente yo del departamento de lengua). Entonces, llega una de las compañeras (como yo estaba de espaldas no me vio) y dijo nada más entrar: “Menudos sinvergüenzas los de lengua…¿Habéis visto el esperpento que han hecho en su departamento con la cantidad de pijerías y gilipolleces que se han comprado” (palabras casi literales). A mí me sentó mal el comentario y dije que no me parecía bien que hablara así, ya que eso lo hemos comprado poniendo dinero de nuestro bolsillo (y no con el del presupuesto). La profesora me dice que aunque sea dinero nuestro, hemos derrochado de una manera intolerable y que ese dinero debería haberse destinado a asuntos escolares (teniendo en cuenta que hay más departamentos didácticos aparte del nuestro) en lugar de comprar cosas que no ayudan a los procesos de enseñanza-aprendizaje.

-Mi mujer nunca les dijo que se acostaran a las 9. Lo único que dijo fue que se fuerran arriba a hacer otras cosas, ya que no quería verlos aparecer por el salón (donde había una cena de mayores).

-La vecina ha dicho que mi mujer les ha dado una MIERDA de cena a los niños, mientras los demás hemos estado comiendo marisco. Eso es otra mentira como una catedral. En la cena había marisco y muchas más cosas, que pensamos que no son adecuadas para niños pequeños. A un niño le gustan más las pechugas y las patatas que ese tipo de comida de cátering.

-Es verdad que no les dimos tarta el sábado por la noche (ahí es verdad), pero no dice por ejemplo, que el domingo por la tarde estuvieron desayunando chocolate con churros. El sábado en la comida hubo pastelitos. Y luego, durante las meriendas a los niños les hemos dado todo tipo de cosas (torrijas, pestiños, galletas, surtidos, etc...). La vecina habla de que no hemos dado tarta a los niños, pero no habla del resto de cosas que sí les hemos dado.

Mi mujer ya no tenía ganas de más juerga y dijo que no se iba con ellas. De hecho, ella me llamó por teléfono para que fuera a recogerla al casino. Tardé casi 1 hora en llegar (ya que tuve que ir a un pueblo que hay cerca para recoger a mi hijo de una fiesta de cumpleaños de un compañero de clase).

Mi mujer tuve que esperar un rato hasta que yo llegara. Se sentó en un sofá que había en el casino. Uno de los trabajadores (muy antipático y desagradable) le dijo a mi mujer que no podía estar sentada sin jugar, y que si quería quedarse ahí tenía que meter dinero en alguno de los juegos que había en la sala. Mi mujer le comentó que ya se iba a ir, ya que estaba esperando a que yo llegara. El trabajador decía que eso le da igual, que no se podía estar ahí tomando copitas gratis y que si no iba a jugar, cogiera la puerta. Le comentó que luego vienen los "jefes gordos", ven a gente sin jugar (solamente bebiendo) y la culpa recae en los trabajadores, por dejar que la gente esté de pie sin hacer nada. Dijo que algunos compañeros han sido expedientados por eso, y que el tema es muy serio.

De todas formas, el hombre este se veía quemado, ya que era el único trabajador que había en esa sala (el casino tiene varias secciones, pero donde estaba mi mujer, solo había una persona). Tenía que hacer muchas cosas a la vez: repartir bebidas, pagar premios, enseñar a la gente a jugar, controlar quién entra y quién sale dentro de esa sala (ya que tiene que hacer un registro), controlar que todo esté en orden, etc...

Mi mujer, para evitar polémicas, jugó 20 euros en una máquina que estaba libre. Esta máquina, según se ve, tenía diferentes modalidades de juego electrónicos (cartas, bingo, rifas, apuestas deportivas, ruleta, conexiones con otros casinos de España, etc...). Según se ve, tú puedes distribuir el dinero como quieras, cambiando continuamente de juego.

Por lo que se ve, hay un juego que se llama 1x2000. En la máquina aparece un paisaje de un cementerio con 10.000 lápidas (numeradas). Abrir una tumba te cuesta 1 euro. En una de las lápidas hay un premio de 2000 euros. El resto se encuentran vacías, sin premio. En el momento en que mi mujer llegó a la máquina, se habían abierto 9546 tumbas. Mi mujer decidió abrir 5 lápidas (simplemente por probar el juego). Tuvo la suerte de que le salió el premio de 2000. Evidentemente, no es lo mismo jugar cuando se han abierto 200 tumbas que cuando se hayan abierto 9000. Las posibilidades de premio son mayores cuantas más tumbas se hayan abierto.

Uno de los clientes le decía a mi mujer que ese juego era un "timo", ya que claramente está preparado para que ganara la casa. A ellos les interesa dar el premio cuando queden pocas tumbas, ya que la gente se habrá tenido que gastar miles de euros, para conseguir los 2000 euros. Este hombre le decía a mi mujer que normalmente suelen dar el premio a partir de que se abran unas 8000 tumbas (cuando la casa ha ganado 8000 euros). Luego, dan el premio de 2000 y la casa ha ganado 6000. Luego, vuelta a empezar otra vez con 10000 nuevas tumbas.
El hombre decía que lo bueno era hacer lo que hecho mi mujer: probar suerte cuando ya se han abierto más de 8000 tumbas, pero sin obsesionarte. El hombre decía que más de una vez la última tumba en abrirse ha sido la del premio gordo (ha pasado unas 3-4 veces ya desde que pusieron la máquina). Por eso, decía el hombre que eso huele a "timo".

El premio se sumó al marcador de dinero de mi mujer (la máquina decía que tenía 2007 euros). Ella me quería dar una sorpresa para cuando yo llegara a recogerla, así que en lugar de cobrar el dinero, se quedó "guarreteando" entre los diferentes juegos para que cuando yo llegara, viera que en el marcador tenía 2000 euros.

Por curiosidad, empezó a probar otros juegos, pero solo guarreteando (jugándose céntimos de euro, para que el marcador de dinero no disminuyese mucho hasta que yo llegara).

Mi mujer vio que la máquina empezaba a comportarse de una manera lenta y torpona (le dabas a un botón y la máquina tardaba en reaccionar). Había que dar al SÍ o al NO, y le dabas y no funcionaba, y a los 10 segundos cumplía la orden. El encargado decía que las máquinas funcionan con red, y seguramente habría problemas técnicos y por eso, algunas veces, la máquina tarde en reaccionar.

De todas formas, mi mujer decidió seguir jugando hasta que yo llegara para darme la sorpresa. Entró en un juego de apuestas deportivas. Mi mujer no entiende mucho de deportes, pero entró por curiosidad para ver qué cosas se podían apostar. Las apuestas que hizo fueron simbólicas (de 3 céntimos de euro o cosa así) sobre competiciones extranjeras.

En la lista de apuestas, había un apartado dedicado al Mundial de Fútbol. Se proponían más de 500 apuestas de todo tipo. Mi mujer decidió partipar en la Apuesta: ¿Cree que España ganará el Mundial 2014?

Mi mujer apostó a que NO. Después, tenía que introducir la cantidad de dinero que apostaba (como si fuera un cajero automático). Ella quería poner "20 euros". Como os he dicho, la máquina funcionaba un poco torpe, de tal forma que pulsabas un botón y a veces, tardaba en reaccionar (aunque la orden estuviera dada). El 2 si salió bien en la pantalla (nada más pulsarlo), pero luego el 0 tardaba aparecer. Mi mujer pulsó varias veces el cero, pero la pantalla estaba como congelada (ya que la máquina estaba lentísima, como cuando un ordenador tiene conexión lenta a Internet). No salía nada (aunque la orden estaba dada, y al pulsar tres ceros, estaba apostando realmente 2000 euros y no 20).

Al final, salió un cero en la pantalla (apareció el número 20 en el marcador de apuestas). Por tanto, como era lo que quería, mi mujer le dio al OK (aceptar). Sin embargo, ella había pulsado antes tres veces el cero, de tal forma que la orden era apostar 2000 euros. Cuando salió el ticket por la máquina, vio que ponía 2000 euros, y en la máquina, el contador de dinero había bajado de 2003'27 euros a 3,27 euros.

Imaginad el disgusto que se llevó mi mujer. Ella se puso muy nerviosa y se lo comentó al encargado. El encargado decía que no se podía hacer nada, ya que cuando apuestas una cosa en las máquinas, no se puede dar marcha atrás, ya que el ticket había salido ya impreso. Mi mujer se quejó por la lentitud de la máquina (que fue la que provocó todo el tinglado). El encargado se disculpó pero decía que no se podía hacer nada (hizo una llamada a soporte técnico por si se podía dar marcha atrás, pero le dijeron que no).

Mi mujer estaba al borde del colapso (es que le birlaron 2000 euros por la cara). El encargado a punto de llorar, disculpándose y diciéndole que lo sentía, pero que era un fallo técnico. Dijo que algunas veces, la red (por lo que sea) va lenta y que sabiendo eso, a lo mejor no tenía que haber hecho apuestas deportivas hasta que la máquina volviera a moverse fluidamente. En otros juegos da igual la lentitud, pero en este que hay que utilizar las teclas de la máquina continuamente, tendría que haberse esperado. Además, le dijo que podría haber cobrado los 2000 euros y luego, con el dinero ya en la mano, podia haber jugado 10 euros en las apuestas deportivas.

Mi esposa decía que eran unos ladrones y unos sinvergüenzas, ya que si la máquina tiene fallos, su obligación como trabajador era llamar a soporte técnico. Cuando mi mujer le dijo que la máquina iba lenta, su contestación fue "ya se arreglará". El trabajador le decía a mi mujer que tiene que entender que todos están quemados, ya que tienen que estar pendientes de un montón de cosas a la vez (pagar premios, servir copas, enseñar a jugar a la gente, resolver incidencias, registrar a la gente que entra y sale, ir a por dinero, etc...). Por eso, hay cosas que se pasan.

Cuando yo llegué a por mi mujer, ella estaba nerviosa por todo lo que había pasado. Mi mujer quería poner una reclamación. El encargado pidiendo por favor que no lo hiciera, ya que al final, el que pagaría el pato sería él (como trabajador).

Le dijo a mi mujer que se calmara y viera las cosas de una manera más relajada. Le comentó que había perdido 2000 euros, pero esos 2000 euros no eran suyos, sino del premio que había ganado en el juego de las tumbas. Por tanto, le dijo que en realidad no ha perdido 2000 euros, sino que no ha ganado 2000 euros (que no es lo mismo). Le dijo que la "putada" hubiera sido perder 2000 euros de tu bolsillo, pero ella lo que ha perdido ha sido dinero del propio casino.

Además, le dijo que esa apuesta de los 2000 euros tampoco era tan traumática, pues era de las "fáciles" (al "sí" o al "no"). Le dijo que hay más posibilidades de acertar que de perder, ya que la pregunta era "¿España ganará el Mundial"? Le dijo que hay más posibilidades de "no" que de "sí", así que le dijo que lo más seguro es que recupere de 2000 euros e incluso se lleve una pasta con esa apuesta, ya que la gente "normal", normalmente no apuesta esa cantidad de dinero. Por eso le dijo que se calmara, ya que tampoco era tan "dramático" lo que había pasado. Además, una de las clientas que estaba viéndolo todo le dijo a mi mujer que seguro que "luego gana la apuesta y los del casino no son tan ladrones". La señora decía que lo veía venir: ahora todos son unos sinvergüenzas y unos ladrones, pero por si algún casual la apuesta le sale a su favor (no gana España), seguro que empieza a decir que todo es una maravilla y que qué alegría. Esta mujer le decía a la mía que no hay que ser tan hipócrita: que los 2000 euros es una putada, pero que tampoco es para armar un escándalo.

Mi mujer decía que le da igual, que quiere poner la reclamación. El trabajador llorando (literalmente). Al final, le dijo a mi mujer que esperara unas semanas, y si la apuesta le sale mal "yo mismo le doy los 2000 euros, y entre todos los que trabajamos aquí hacemos una bolsa para usted, pero no ponga la reclamación porque nos tienen cogidos por los huevos".

Al final, yo vi que lo que decía este señor era sensato, y le dije a mi mujer que era lo mejor. A mí también me daba cosa por el chico, porque el hombre lo estaba pasando muy mal (llorando y todo). Me decía que el ambiente está muy tenso entre los jefes y los trabajadores y a la mínima que ocurre algo, ya hay bronca y despidos. De hecho, me decía que todos los trabajadores están quemados haciendo un montón de cosas a la vez (parece que los propios jefes lo hacen para que ellos mismos se acaben "autodespidiendo").

Este lunes, cuando sonó el timbre después de la primera clase, los chicos salieron al pasillo. Como ya sabéis, al tener con este grupo las dos primeras horas, no hace falta que yo haga el desplazamiento. De todas formas, quise adaptarme a la normativa "interpretada" por los chicos. Cogí mis cosas, salí del aula, puse el pie en el pasillo y volví a entrar al aula. Les dije que legalmente se ha producido lo que ellos quieren (ha salido el profesor de primera hora y ha entrado el profesor de segunda). Por tanto, podemos decir que ha empezado la clase (ya que el profesor está dentro del aula).

La manzana donde vivo está formada por 4 casas. Cada casa tiene su azotea particular, pero también, hay una parte de la azotea que es común a las 4 casas (justo, en el centro, donde cofluyen las 4 azoteas). Esa zona central, que es común, está techada y tenemos una piscina climatizada (para las 4 casas). Cada casa tiene un acceso particular a la zona de la piscina (por lo tanto, cada uno entra desde su azotea a la habitación de la piscina).

En principio, la habitación de la piscina estaba dividida en 4 partes iguales, separadas por una mampara (para no ver lo que pasa al lado). Cada sección tenía su puerta de acceso, su parte de piscina y su suelo, de tal forma que a pesar de ser zona común, cada vecino tiene su porción independiente.

Hará cosa de 3 años, la propietaria de una de las casas (era ya mayor) murió y mi mujer y yo decidimos comprar su parte de la azotea (lo acordamos con los hijos), y así pudimos quitar la mampara y tener dos partes para nosotros.
El año pasado, los propietarios de otra de las casas se fueron a vivir a otro sitio y también vendieron su vivienda y mi mujer y yo les compramos su parte de la azotea.

En la casa de al lado tenemos unos vecinos que llevan más de 12 años viviendo en la manzana. Es un matrimonio de mediana edad con sus dos hijos. El verano pasado la mujer se quedó en paro, y el mes pasado, también despidieron a su marido, así que la cosa está bastante fea. Entonces, mi mujer y yo les dijimos que le comprábamos la parte de la azotea, ya que era la única zona que nos quedaba. El matrimonio dijo que le parecía bien e hicimos un acuerdo bastante generoso para ellos. De esta forma, la zona de la piscina se puede considerar legalmente nuestras (ya que las 4 partes las hemos comprado nosotros).
Por eso, tiramos las mamparas y quitamos las puertas de acceso (quedando solamente la puerta nuestra). Para hacer todo esto tuvimos que hacer obras, ya que pintamos, pusimos suelos nuevos e incluso mi mujer montó un pequeño gimnasio con algunas cosillas tanto de ejercicio como de baño. Así el gimnasio normal de la casa (el que teníamos antes) lo dejamos como biblioteca, ya que en el trastero tenía muchísimos libros y era un caos cada vez que tenía que coger uno.

Resulta que los vecinos de al lado (el matrimonio con los hijos a los que le compramos su parte), siempre nos están pidiendo de vez en cuando poder usar la piscina. Hace un par de semanas, la hija cumplió años y la madre nos dijo que si podíamos cederles la piscina para una tarde, ya que la chica traería a algunos amigos, y todos los años lo hacían en la piscina. Mi mujer, en principio, no le hacía mucha gracia, ya que en el gimnasio tiene aparatos, y no le apetece que niños desconocidos se pongan a jugar ahí y toquen cosas que no deben. La madre nos lo estuvo pidiendo (que nos lo pide como favor personal, que a su hija le apetece, que es su cumpleaños, etc...). Al final, cedimos (pero de mala gana) y nos arrepentimos muchísimo, ya que algunos niños se acabaron subiendo en los aparatos de mi mujer, toqueteando botones, ensuciando todo (la merienda la hicieron ahí) y metiendo las manos sucias en el jakucci...en fin, un desastre. La madre nos dijo que ella advirtió a los niños que no tocaran nada, ya que eso no era suyo, pero los chicos ni caso y ella como que pasaba un poco.

Encima, ayer el otro hijo cumplía también los años. El miércoles viene de nuevo la vecina y nos dice que si le podemos dejar otra vez la piscina (esta vez para la fiesta del pequeño). Evidentemente, después de lo que pasó, dijimos que no, que una vez está bien, pero no queremos que sea una costumbre. La madre nos dijo que tuviéramos un poco de compasión, que son niños y que para sus hijos la piscina era sagrada, y quitarla así de golpe y porrazo, que le daba un poco de palo. Mi mujer dijo que lo sentía, pero eso ya era demasiado, y no podía estar a cada rato dejando la piscina para sus eventos. A la vecina no le sentó nada bien (en ese momento entraba yo por la puerta) y nos dijo que éramos unos agarrados y unos estirados. También nos dijo que éramos unos desconfiados y habíamos tenido un gesto muy feo cuando hicimos la compra de la piscina.

Resulta que cuando les pagamos el dinero por su parte de la azotea, al día siguiente cambiamos la cerradura de la puerta de acceso de los vecinos. Legalmente está bien hecho, ya que en ese momento la habitación de la piscina era nuestra (y no tiene que pasar nadie más). Si lo hicimos, fue porque habíamos quitado la mampara, y mi mujer había subido ya los aparatos del gimnasio, y no queríamos, que por accidente, los hijos de los vecinos, entraran sin querer o algo (jugando) y se pusieran a hacer el tonto con los aparatos. Por eso, en cuanto nos hicimos con la parte de la azotea cambiamos la cerradura, para evitar malentendidos.

La madre nos dijo que eso de cambiar la cerradura nada más hacer el trato, ella se sintió muy atacada, ya que era como una forma de decir que nosotros no nos fiábamos de ellos, y que les estábamos tratando "como gitanos", ya que la cerradura la pusimos para que nadie de ellos entrara (según ella).

Algunos alumnos empezaron a protestar y a decirme que me estaba riendo de ellos, que es una tomadura de pelo, que lo he hecho por "vengaza" de la discusión del otro día, que los estoy tratando como si fueran tontos. Yo les dije que simplemente me ha adaptado a lo que ellos pedían. Ellos hicieron su argumentación (que no me gustó en la forma, pero sí respeté en el contenido) y he cumplido con esa supuesta "legalidad".

Los alumnos protestaron, empezaron a decir que no era justo, que no les parecía bien, etc...(lo típico). Una de las alumnas dio un golpazo en la mesa de la misma rabia. Como castigo, puse retraso en el parte de asistencia a todos aquellos alumnos que estaban fuera en el pasillo cuando yo entré al aula en la segunda hora. Si para ellos, la clase empieza cuando entra el profesor, si tú entras después de que haya entrado el profesor (aunque hayan sido 20 segundos después) se considera retraso. Si ellos quieren ponerse teóricos y normativos, vamos a hacerlo bien.

Por lo que se ve, estos alumnos fueron llorando con el cuento a la profesora de Economía (es una profesora joven, con la que tienen bastante confianza). Hablando con ella el otro día, la profesora me dijo que haciendo eso me puse a la altura de los alumnos, y que los estuve tratando como si fueran tontos y que si me creo "listo" por eso. Me dijo que "así no se hacen las cosas" (así sin escuchar mi versión, dejándose llevar por lo que le dijeron los chicos, que seguro que manipularon cosas).

Como ya os he dicho, una de las profesoras de guardia pudo oír el comentario, ya que estaba cerca, pero no pudo verlo. En cuanto escuchó esas palabras, esa forma de hablar y ese vocaubulario tan soez en niños pequeños (que si puta, que si chulo, etc...), la maestra se enfadó muchísimo y preguntó quién había dicho semejante barbaridad.

Todos los niños que estaban en las filas se callaron. Mi sobrino pequeño empezó a poner miraditas "raras" y se puso muy nervioso, ya que le dio miedo la forma de hablar de la profesora (gritando y muy enfadada). Como la maestra vio a mi sobrinillo con la cara descompuesta (del "miedo" que tenía), pensó que había sido él el que había dicho ese comentario. Le dijo al niño, ¿Has sido tú? ¿Verdad? mientras le cogía del cuello del jersey y le gritaba. Como la maestra reaccionó de una manera tan "visceral", al niño no le dio tiempo a explicarse ni a poder hablar (que no había sido él). Simplemente, en cuanto la mujer le cogió del cuello del jersey, le sacó de la fila y se lo llevó al interior del colegio (para hablar con la dirección), mi sobrino montó una llorera de escándalo.

Según se ve, empezó a llorar, a chillar, a berrear, de una manera que dejó con la boca abierta a todo el mundo que había allí. Mi sobrino, viendo que la profesora le iba a llevar al despecho de la directora, se puso alterado perdido: no paraba de llorar, de hacer espasmos, con la voz rota y temblorosa, etc...De los nervios que tenía y de lo mal que estaba pasando acabó vomitando y haciéndoselo encima. Mi sobrino es un niño muy nervioso y cuando lo pasa mal reacciona así.

La maestra, en lugar de intentar calmar al niño para que se tranquilizara, no paró de echar leña al fuego: que era un maleducado por utilizar ese vocabulario faltando el respeto a una profesora, que iba a saber lo que es bueno cuando llegara la directora, que le esperaba un castigo de padre y muy señor mío, que le iba a costar caro hacerse el "listo" y el "gracioso" delante de los compañeros, que era un niño muy malo, etc...El chico no pudo explicarse ni nada. Solamente dijo una vez que no había sido, pero la profesora no le hizo ni caso.

Yo pienso que la profesora, en lugar de malmeter más, y viendo cómo estaba el niño (nervioso, alterado) tendría que haber apaciguado el ambiente para que el niño se calmara. Mi sobrino, oyendo hablar a la profesora de cosas como castigo, directora y demás, perdió los nervioso y se empezó a pegar y a arañar la cara. Una de las veces se pegó hasta un puñetazo en la nariz (le salió sangre y se desvió un poco el tabique). No sé con qué fuerza se pegaría, pero el cuadro que se montó fue tremendo.

Yo sé que mi sobrino en cuanto le regañas un poquito, exagera mucho las cosas y se coge unos enfados que dan miedo. Él es un niño demasiado tímido y sensible. En cuanto algo no le sale bien, se coge unos enfados con él mismo que dan "miedito". Por eso, no me quiero ni imaginar cómo fue el "cuadro" que montó con esta profesora.

Como la escena que montó mi sobrino fue tremenda (ya os he dicho que la manera de llorar escandalizó a la gente), el niño que dijo la barbaridad de la "profesora y su chulo" acabó confesando y diciendo que fue él el que dijo ese comentario y no mi sobrino.

Por tanto, después de todo el sofocón que tuvo que pasar mi sobrino, al final se dieron cuenta de que él no había dicho eso. Por tanto, la profesora tuvo que tragarse todo lo que dijo.

Cuando mis cuñados se enteraron de todo lo que pasó, hablaron con la directora. Mi cuñada lo único que quería era una disculpa por parte de la profesora, tanto de forma pública como de forma privada. La directora dijo que una disculpa pública no, ya que queda muy "feo" que un maestro se rebaje de esa forma, ya que eso hace daño a su imagen, y más, delante de unos niños que van a entrar en una edad tan complicada. La directora dijo que es un error y que no hay que darle más vueltas. Además le dijo que vivir una cosa así le viene bien al niño, ya que tiene que aprender que las cosas no siempre son "perfectas", pues el niño está acostumbrado a que las cosas tienen que ser de una forma y no pueden ser de otra. La directora decía que si el niño no sabe estar a la altura de una tontería como esta, tomándoselo de esa forma tan excesiva, la vida le dará muchos palos cuando lleguen las cosas serias. Por eso le dijo que se olvidara de la disculpa pública y que en lugar de ver las cosas malas también analizaran qué cosas ha hecho mal el niño. También insinuó que el niño tiene un "problema" por reaccionar de esa manera (llegándose a lesionar y todo).

La profesora que acusó a mi sobrino, tampoco quiso disculparse (ni siquiera de forma privada). La mujer dijo que una disculpa hay que merecérsela y ganársela. Según ella, el niño no supo estar a la altura reaccionando de esa manera tan exagerada, y por tanto, no merece esa disculpa. Ella dice que si el niño reacciona de una manera seria y madura, no le importa disculparse, pero reaccionando de una manera tan infantil y desmedida no merece esa disculpa. Dijo que hablando se entiende la gente y que en lugar de patalear y perder la razón, tendría que haber hablando y haberse calmado.

A mi cuñada le sentó muy mal esto: la profesora dice que hay que actuar con la razón y que hablando se entiende la gente. Sin embargo, ella fue la primera en actuar desde la visceralidad, cogiendo al niño del cuello, llevándoselo dentro del colegio y no dejándole que se defendiera. Si hubiera reaccionado de una forma "tranquila" (no tocando al niño, no gritando, no enfadándose) tal vez mi sobrinillo no se hubiera puesto como se puso y las cosas hubieran salido de otra forma.

La profesora le dijo a mi cuñada que el comentario que uno de los niños había hecho en voz alta era muy grave, ya que se estaba faltando el respeto a una profesora de una forma brutal, empleando palabras como "puta" (niños de 10 años). Le dijo que si un profesora no actúa con mano dura, al final los niños te comen. Por tanto, la reacción de la profesora fue proporcional a la gravedad del caso (la burrada que el niño soltó por la boca). Según ella se equivocó a la hora de acusar a la persona, pero la reacción sí fue la correcta, ya que fue algo muy grave y esa reacción hubiera sido igual con mi sobrino que con otro niño cualquiera.

Además, la profesora le dijo a mi cuñada que las disculpas, en todo caso, deberían ser del niño (de mi sobrino) a ella (como maestra) ya que la forma de reaccionar del niño ha hecho que mucha gente del centro la cuestione como profesional.

Por ejemplo, muchas madres del centro ponen a parir a esta maestra por la manera que trató a mi sobrino. También los niños han exagerado la historia. La profesora cogió a mi sobrino por el cuello de la camisa, y algunos niños (e incluso padres) han llegado a decir que la profesora pegó a mi sobrino (cosa que no es verdad). Según se ve, este caso ha afectado bastante a la profesora e incluso compañeros suyos no paran de cuestionarla y de criticarla.

Por eso, la profesora decía que sin comerlo ni beberlo, se la está faltando el respeto (han surgido motes, no para de escuchar comentarios que la cuestionan como profesional e incluso como persona). Ella dice que es muy injusto, ya que ella ha reaccionado como todo profesor reaccionaría. Lo que pasa es que el niño escandalizó y exageró tanto las cosas (con esos berridos, esos lloros, lo del puñetazo, etc...) que la gente ha dado demasiada trascendencia al caso. Mucho ruido y pocas nueces. La profesora piensa que si el niño no hubiera sido tan "melodramático", el caso no hubiera sido tan grave, ya que los excesos de mi sobrino han sido los que han llamado la atención de la gente, la cual no para de meter mierda sobre la profesora.

Casi todos los meses, se castiga a niños y niñas del colegio y nadie se escandaliza ni cuestiona la profesionalidad de nadie, ya que no hay una exageración por parte de los niños.

Se te ha ido la pinza...

pero pon un resumen por dios

profesor-qw

Hay bastantes historias ahi, me he leido la mitad, ya paso, sobre los primeros alumnos, dejales salir.

Iniciado por tahikiry

El mensaje está oculto porque el usuario está en tu lista de ignorados.

bueno, lo malo no es lo q comentas en los parrafos 4,5,7,8 y 12, lo peor es que todo lo demás es un cumulo de errores del gobierno, como bien dices en los 2 y 15.

No te lo crees ni tu lo de que te lo hayas leido

Que decís sobre mi comportamiento y el de ellos?

Debo cambiar mi conducta de visión al mundo?

Un salu2

Me espero a la trilogia.

EL PUTO ALCORÁN HAS ESCRITO

ja k pringao

Un TDS PTS por aqui nunca viene mal.Y por cierto menos quejas que los profesores cobran mucho y trabajan poco.

profesor-qw

Ser profesor es más malo de lo que parece.. +AL
Resulta que este curso me ha tocado tutorizar a una clase de 1º de Bachillerato. Además, en este grupo también imparto la asignatura de Lengua y Literatura y las dos horas de Alternativas a la Religión.

Los lunes, los martes y los miércoles me toca las dos primeras horas con este grupo, ya que coincide una hora de Lengua con una hora de Tutoría o Alternativas, de manera consecutiva.

Normalmente, los alumnos de la ESO y Bachillerato, en el cambio de clase y clase (entre que sale un profesor y llega el siguiente) suelen aprovechar para salir al pasillo y darle un poco al pico (hablar con chicos de otros grupos, hacer un poco el tonto con los compañeros, etc...).

Como los lunes, los martes y los miércoles tengo dos horas seguidas con este grupo, no hace falta cambiar de aula ni de profesor en la transición entre los periodos horarios. Por tanto, no dejo salir a los alumnos al pasillo, ya que al final es un cachondeo, pues si dejo que salgan, luego vienen revolucionados perdidos y cuesta volver a retomar la clase, pues aprovechando que tengo estas dos horas seguidas, me gusta dar doble clase de lengua, y con un cambio tan brusco luego a los chicos les cuesta volver a concentrarse.

Los chicos me dijeron que les parecía injusto hacer las dos horas de forma seguida, sin ningún tipo de descanso. Yo les dije que descanso sí les dejo (paro la clase unos 3-4 minutos para que los alumnos se despejen un poco, y después volver a retomarla). Lo que no les dejo es salir, ya que luego hablan con otros compañeros, se ponen a hacer el tonto y vuelven alterados perdidos, siendo más difícil reconducir la clase, pues después de un descanso suelen venir más inquietos e insoportables. Por tanto, no dejo que salgan al pasillo, pero sí les dejo descansar 3-4 minutillos.

Estas primeras semanas de curso me han estado dando la tabarra con el dichoso del tema (que si déjanos salir al pasillo, que si la clase se hace muy larga, que qué me cuesta dejarles 5 minutos salir a la galería a despejarse un poco, etc...). Uno de los alumnos me dijo que ellos no están incumpliendo ninguna regla saliendo al pasillo, ya que en las normas de convivencia (que están colgadas en la página del centro), solamente dice que durante el periodo de clases un alumno no puede estar en el pasillo, y una clase no comienza hasta que el profesor llegue.

Esta afirmación es totalmente absurda, ya que él está confundiendo "periodo horario" (los 50 minutos oficiales de una asignatura) con la "presencia del profesor" (que suele ser menos, ya que un profesor pierde unos minutos en desplazarse hasta el aula...convirtiendo los 50 minutos, a lo mejor en 45). Yo le dije que si las normas de convivencia hablan de "clase", no se refiere al tiempo de presencia en el aula del profesor, sino al periodo oficial de 50 minutos. Es de lógica. Por tanto, eso de salir al pasillo hasta que llegue el profesor va en contra de las normas. Muchos profesores y la propia dirección hace la vista gorda (ya que todo el mundo lo hace y nadie dice nada), pero no es legal. Yo creo que el término "clase" se refiere al periodo de 50 minutos y no a la presencia del profesor.

Los alumnos me decían que el término "clase" es ambiguo y puede generar ambas interpretaciones, ya que puede ser clase como periodo de 50 minutos o como momento en el que hay presente un profesor. Y si las normas no concretan más, ambas posturas serían válidas. Por tanto, eso de salir al pasillo no debería estar prohibido hasta que llegue el profesor de turno. Y cada uno es libre de interpretar lo que quiera.

A mí esa chulería y esa forma tan prepotente de hablar no me gustó nada. Aunque puedan tener algo de razón, no me gustó nada la forma en que ese alumno se dirigió a mí. Eso mismo que ha dicho (que me parece respetable) se puede decir de una manera menos ofensiva (es que me lo dijo gritando, con malas caras, de esa forma tan altanera, etc...). Eso yo no lo puedo consentir. Se trata de una cuestión de respeto. Si eso mismo me lo dicen de una manera seria y madura, yo soy el primero en negociar, pero hablando con esa chulería y esa ironía, no. Lo siento, pero no.

El primer día de curso les dejó claro a los chicos que no se molestaran en preguntar a los compañeros de otros grupos las preguntas que les habían caído en los exámenes de geografía, ya que él hacía cuatro exámenes diferentes (uno para cada grupo). Además, aclaró que él nunca repite preguntas de un grupo a otro.

El profesor plantea sus exámenes como pruebas de desarrollo con alguna práctica (al ser geografía, les puede poner mapas, climogramas, pirámides de población, etc...)

Algunos alumnos se han quejado de que el último grupo en hacer el examen lo tiene más "fácil" que los demás, ya que el profesor no repite preguntas de un grupo a otro. Por tanto, el último grupo en hacer el examen, por descarte, puede intuir qué preguntas pueden caer (que son de los epígrafes que no han preguntado a los demás grupos). En los tres exámenes que han hecho hasta ahora, el último grupo en hacer el examen siempre ha sido el mismo (3ºD). Los alumnos de otros grupos se quejan de que este grupo puede deducir casi siempre lo que les va a caer en el examen (que es lo que el profesor no les ha preguntado a los demás grupos). De hecho, las notas de este grupo suelen ser más altas que las de los demás (aunque también es verdad que en este grupo hay gente muy buena, ya que están los que mejores notas obtuvieron en 2º de la ESO).

Los chicos, por lo que se ve, dieron en el clavo y sacaron unas notas muy buenas (entre que el grupo ya es bueno y la deducción que hicieron, salieron unos resultados escandalosos). Más de la mitad de la clase con un sobresaliente. Según se ve, los alumnos de los otros grupos están molestos, ya que dicen que este profesor siempre muestra predilección por este grupo (ya que están los alumnos "empollones" y los que mejor se portan).

Esto ha pasado desde que empezó el curso. Lo que pasa es que en este último tema, los números cuadraban muy bien (8 epígrafes entre 4 grupos=2 preguntas por grupo; 4 climas entre 4 grupos=1 grupo por clima). Esta vez la cosa ha cantado bastante ya que todo era muy cuadriculado. De todas formas, el profesor ha dicho que si ellos se centran en lo importante (que es estudiar) les debería dar igual lo que se pregunta o se deja de preguntar a 3ºD. Les dijo que lo que tienen que hacer es esforzarse más, estudiar más y quejarse menos, y entonces, les dará igual lo que hagan los demás. Les dijo que el derecho a quejarse hay que ganárselo.

Como el profesor se ha encontrado con esta polémica, les ha dicho a los chicos que a partir de ahora los exámenes van a ser por la tarde (fuera de horario escolar), para que los 4 grupos puedan juntarse y hacer el mismo examen y así evitar estas quejas. Esto, en lugar de calmar a los chicos, les ha hecho agitarse más y enfadarse (que no es justo ir por la tarde a hacer un examen, que eso no es legal, etc...).

Según se ve, el otro día en clase, este profesor tuvo un problema con uno de sus alumnos. Este alumno se dirigió a él con unas formas muy poco adecuadas, pero dicíendole varias verdades. Le dijo que la culpa era solo de él por no tener ni p... idea de organizar los exámenes y que esta "gilipollez" se solucionaría poniendo una parte del examen tipo test, para que así todo el mundo tenga que estudiarse toda la materia. Además, le dijo algo más o menos así "Hay que ser cortito para no encontrar una solución a esto". Al profesor se lo llevaron los demonios cuando escuchó esto, y expulsó al alumno de clase y le puso un parte (principalmente, por las formas empleadas a la hora de dirigirse a él).

La madre de este chico fue a hablar con la directora, ya que piensa que su hijo ha dicho una verdad como un templo, que el castigo es injusto, y que el grupo de su hijo siempre es el primero en hacer el examen, y por lo tanto, lo tiene más difícil que nadie. Le dijo que su hijo no para de sacar sietes en geografía, y que esos sietes no son justos, ya que valen más que los nueves que han sacado los del grupo D, los cuales ya saben casi siempre lo que les va a caer, por ese procedimiento tan peculiar que tiene el profesor a la hora de hacer las preguntas para los exámenes.

La vecina, antes de irse de viaje, le dio a mi suegra unas copias de la llave de la casa y le pidió (como favor) que si podía pasarse a regar las plantas mientras estaban fuera. Como iban a estar de viaje unas tres semanas, le dijo que con dos veces que fuera a regar a lo largo de ese tiempo era suficiente. Además, las plantas las tiene en el patio, y no es mucho lo que hay que hacer. Mi suegra dijo que vale, que no le importaba pasarse un par de veces para dar un repaso a las plantas.

La vecina le comentó que también había dejado una copia de la llave a su hermano y a su cuñada (que viven en un pueblo de alrededor), por si pasaba algo. De todas formas, la vecina comentó que su hermano nunca viene a la ciudad (si viene, lo hace de Pascuas a Ramos y casi nunca se pasa por la casa). Ella le dio una copia de la llave por si acaso, pero el favor de regar las plantas se lo pidió solo a mi suegra (ya que con el hermano y la cuñada no tiene mucho trato, pues apenas vienen a visitarla). Es la vecina la que tiene que visitar a su hermano. Por eso, confiaba más en mi suegra y le pidió el favor de regar, para no poner en un compromiso al hermano y "obligarle" a venir. Además, mi suegra es vecina y está más cerca.

La otra tarde mi mujer, mi suegra, mi cuñada, la hermana de mi suegra, y varias amigas de mi mujer y mi cuñada estuvieron tomando café en casa de mi suegra y haciendo un poco de tertulia. Una de las veces, mi suegra comentó que tenía que ir a casa de la vecina a regarle las plantas, ya que tenía que haber ido hace tres días, pero por unas cosas o por otras, lo había ido dejando.

Todas las mujeres que estaban ahí empezaron a bromear sobre el hecho de que la casa de la vecina estaba vacía y podían ir a cotillear un poco y ver cómo tenía todo. Lo que empezó siendo una gracia, al final lo empezaron a debatir en serio y mi cuñada dijo que podían acompañar a mi suegra y así dar una vuelta a la casa y ver cómo la tiene. Mi mujer, por ejemplo, quería ir a ver los muebles y las habitaciones. Ellas decían que tampoco estaban haciendo nada malo: solo acompañar a mi suegra y ver cómo tenía la vecina la casa.

Al final, decidieron acompañar a mi suegra a regar las plantas. Aunque el patio está en la planta baja, las mujeres estuvieron dando una vuelta por toda la casa, mirando algunas cosas. Subieron al piso de arriba donde están las habitaciones. Cuando estaban todas en el piso de arriba oyeron abrirse la puerta de la casa. Al parecer era el hermano y la cuñada de la vecina que habían venido a la ciudad (cosa rara en ellos) y se habían pasado a echar un vistazo a la casa.

En principio, el hermano y la cuñada se quedaron en la planta baja. Según se ve, estuvieron un poco en el salón viendo la televisión y tomando algo. Mi mujer y las demás tampoco podían bajar para que nadie las viera. Así que se tuvieron que quedar arriba un montón de tiempo esperando a que se fueran. El problema es que no se iban. Estuvieron hasta la noche. Al parecer, vino más gente a la casa (serían amigos o alguien) y encargaron comida o algo porque mi mujer me decía que había un matrimonio más con ellos, y como todos estaban en el salón no podían bajar y montar escándalo.

Resulta que mi cuñada había dejado su teléfono móvil sin querer encima de un mueblecito que había en el hall del segundo piso. Estaría mirando alguna cosa y sin darse cuenta dejaría encima el móvil y luego se olvidó de que lo tenía allí.

Yo sabía que mi mujer se había ido a tomar café con mi cuñada (lo que yo no sabía era que después se habían juntado con más amigas y se habían ido a casa de mi suegra). Como vi que era tarde y no venía, y mi mujer se dejó en casa el móvil, decidí llamar a mi cuñada para ver dónde estaban, ya que habían estado toda la tarde fuera. Como ya os he dicho, mi cuñada había dejado sin querer el móvil sobre un mueblecito del hall del segundo piso.

Por tanto, cuando yo llamé a mi cuñada, el móvil sonó y desde el piso de abajo, la gente pudo escuchar el sonido del teléfono, llamando la atención. Por eso, la cuñada de la vecina subió al piso de arriba para ver de dónde venía el sonido. Cuando subió al piso de arriba se encontró todo el pastel: mi mujer y todas las demás ahí. Mi mujer me comentó que aunque parezca gracioso, pasaron muchísima vergüenza, ya que todo el mundo se quedó sorprendido al ver a tanta gente en el piso de arriba. Imaginad con qué cara va a mirar mi suegra a la vecina cuando vuelva, ya que me imagino que el hermano y la cuñada se lo acabarán diciendo todo.

Lo gracioso de todo es que ellas piensan que yo he sido el principal culpable por llamar a mi cuñada. Mi cuñada y las amigas de mi mujer me montaron el otro día una escenita diciéndome que cómo se me ha ocurrido llamar y que si no hubiera llamado, nada de esto habría pasado, ya que el hermano se habría ido de la casa y ellas hubieran podido salir.

Conclusión: le jeta y el morro que tiene la gente es impresionante. Te cuelas en una casa que no es tuya, haces algo que no está bien y en lugar de asumir la culpa y demostrar capacidad autocrítica, sigues pensando que el culpable es otro. Por lo menos mi mujer fue autocrítica: sabe que lo que hizo no estuvo bien y ella se lo ha buscado. Por lo menos, ella fue la única que fue sincera admitiendo las "cosas malas" que hizo (abrir un cajón, leer algunos papeles, etc...). Pero es que las demás (sobre todo, mi cuñada) en lugar de reconocer la culpa, me monta un pollo a mí diciendo que yo soy el principal responsable por llamar, ya que si no llamo el teléfono no hubiera sonado y no hubiera llamado la atención de la gente. Ole tus narices, Mariloles!!!!! Y las amigas de mi mujer no se quedan atrás, ya que en lugar de decir "la hemos cagado" están diciendo que si yo no debería haber llamado, que si esto, que si lo otro.

Yo le dije que no me parece bien que intente culpar a la gente de sus errores. Y también fui sincero: me pareció lamentable/bochornoso/asqueroso lo que hicieron. A mí me pasa eso y se me cae la cara de la vergüenza (aunque mi mujer estuviera implicada). Encima, mi cuñada intentando buscar justificaciones: que solo estuvieron viendo la casa, que tampoco hicieron daño a nadie, que lo que hizo el hermano de la vecina también estuvo mal (traerse a gente y encargar unas pizzas en una casa que no es la tuya, por mucho que sea la de tu hermana, etc...). Yo le dije que a ella no le debería importar lo que hizo el hermano, sino lo que ha hecho ella.

Y otra cosa: si ella dice que no es malo lo que están haciendo...¿Por qué se anda escondiendo? ¿Por qué tiene que esconderse durante horas esperando a que la gente se vaya? Si tan "normal" te parece lo estás haciendo, tampoco debería darte miedo de que la gente lo sepa. Es asombroso que ella diga que no tiene importancia. Si no tiene importancia, no debería darte miedo/pudor/vergüenza de que te vean en la casa. Sin embargo, ella ha estado escondiéndose. Por lo tanto, significa que tiene vergüenza y ella sabe que lo que estaba haciendo no estaba bien.

Por lo menos, mi mujer reconoce que la ha cagado (algo es algo), pero es que las demás: cero autocrítica y cero humildad.

Además, le dijo a la directora que este profesor no para de hacer comparaciones entre el grupo de su hijo y el grupo D (que si los del D se comportan mucho mejor, que si estudian más, que si sacan mejores notas, etc...). La madre dice que eso de mostrar esas preferencias no es de ser un buen profesional.

Este chico, va y me dice (muy irónico y con retintín): "se trata de una cuestión legal y las normas no las hacemos nosotros. Hay que cumplirlas". Como veis, ese tono desafiante habla por si solo.

En el centro de este barrio hay una plazoleta con un edificio de 8 plantas. Las dos primeras plantas de este edificio están destinadas a negocios: hay varios abogados, un centro estético, varias consultas médicas, una notaría e incluso una academia de inglés.
El resto de estas plantas son las viviendas normales (de la gente que vive en el edificio).

Por la mañana temprano se han puesto unos piquetes en la puerta de este edificio no dejando pasar a la gente que iba a estos negocios. Lo que pasa es que se mezclaba la gente que venía a los negocios con la gente que pasaba porque tiene su casa ahí, y por eso, algunos de los que venían a los negocios decían que venían a ver a su familia y así podían pasar.
Al final, los piquetes se dieron cuenta que había gente que entraba a los negocios, así que decidieron no dejar pasar a nadie al edificio.

Una de las vecinas del bloque (que vive ahí), según se ve salió, unos minutos de su casa para visitar a un familiar suyo (que vive en el bloque de enfrente) y se dejó la comida con la lumbre encendida. Como iba a tardar poco, se dejó a fuego lento la comida y se fue a ver al familiar.

Cuando volvió de la visita, estaban los piquetes en la puerta diciendo que no iban a dejar pasar a nadie. La mujer dijo que era vecina, pero los del piquete le han dicho que lo sienten mucho, pero que mucha gente se ha colado diciendo que venían a las viviendas, cuando era mentira (ya que iban a los negocios de la primera planta). Así que por eso, no iban a dejar pasar.
La mujer dijo que se había dejado la lumbre puesta en la casa y que tenía que subir, pero el piquete pensaba que era mentira y lo hacía para entrar a alguno de los negocios.

Menos mal que uno de los vecinos empezó a oler a quemado en el patio interior (vio que salía bastante humo). Entonces, se pudo solucionar rápidamente la situación. No hizo falta llamar a los bomberos ni desalojar el edificio, pero casi se lía una buena. Menos mal que se solucionó rápido.

La tutora de mi hijo (1º ESO) hace con los chicos un pequeño plan de motivación todas las semanas. Desde el principio de curso (y hasta el final de curso me imagino que lo harán) en horas de tutoría, la profesora se encarga de elegir al "alumno de la semana", es decir, aquel chico que a juicio de la tutora ha sido el mejor alumno (en todos los sentidos): saca buenas calificaciones, se porta bien, se esfuerza, es buen compañero, etc...

Al principio de curso la tutora hizo una especie de cuadro de honor en una de las paredes del aula. Colgó una serie de etiques que decían "Semana 1" (de X día a X día), "Semana 2" (de X día a X día). Todas las semanas (en los 10 últimos minutos de la clase de tutoría) la profesora dice el nombre de los 3 mejores alumnos de esa semana, y luego después, entre esos 3 elige al "mejor". Lo que hace la profesora es colgar una foto de dicho alumno en el "cuadro de honor casero" y le da como regalo un pequeño cucurucho de esos de chucherías.

Lo que sí hace la tutora todas las semanas a los profesores que impartimos clase en este grupo es pedirnos las notas que les hemos puestos a los chicos (cualquier nota, sea de examen o incluso de alguna actividad o de clase). Yo sé que toda la semana a mí me está pidiendo de cada alumno notas. Y según se ve lo hace con todos los profesores del grupo (para así tener vigilado el rendimiento de los chicos). La tutora aprovecha esta actividad para estar actualizada de lo que sucede en el grupo. A la hora de elegir al "alumno de la semana" la profesora dice que tiene en cuenta TODO. Mira las notas, pero también valora la evolución, el esfuerzo, los comentarios que hacemos los demás profesores, el comportamiento (si ha hecho algo bueno esa semana o algo malo, etc...). Luego elige a los 3 mejores, y de esos 3, nombra al "alumno de la semana" y le da las chuches y le pega la foto suya, debajo de la semana correspondiente.
Yo como doy clase al grupo, puedo ver ese "cuadro de honor".

Los profesores son los encargados de tutorizar el trabajo de los alumnos que han elegido (revisar las versiones del trabajo, aclarar dudas, recomendar materiales, etc...). Cada profesor puede tutorizar como máximo a 3 alumnos.

Además, en horario de tarde se organizan periódicamente una serie de seminarios de orientación sobre la realización de ese trabajo. Son 6 seminarios obligatorios:

Mi sobrina pequeña está en 4º de Primaria. La maestra que les da clase de lengua, matemáticas y conocimiento del medio es un poco "caótica" (por decirlo de alguna manera) a la hora de organizar los exámenes. Desde el año pasado que tienen clase con ella, la profesora les ha dicho (tanto a los niños como a los padres) que el estudio debe ser diario, por tanto, no hay necesidad de tener que poner fecha de exámenes, ya que los niños deberían estar preparados para realizar exámenes en cualquier momento del curso y de cualquier tema, si estudian como tienen que estudiar. Por eso, algunas veces les avisa (tal día hacemos el control de X tema), pero otras veces no avisa y les pone el examencillo directamente. Las madres (como mi cuñada) siempre han criticado esto de la profesora, ya que es muy caótica: cuando quiere les avisa con mucho tiempo de antelación, otras veces les avisa de un día para otro, otras veces no avisa y lo pone el mismo día. Hay veces que pone preguntas de temas ya vistos, otras veces de un sólo tema, otras veces agrupa varios temas. Como veis, esta mujer no tiene sigue unas reglas fijas y las va cambiando caóticamente según estima oportuno. Tan pronto hace un examen por trimestre, como a lo mejor todas las semanas. Incluso si un niño la pregunta qué temas entra, la profesora dice que no va a responder, ya que si estudian "como Dios manda", estarían preparados para responder cualquier cosa. Incluso alguna vez ha hecho exámenes con preguntas de lengua, matemáticas y conocimiento del medio todas mezcladas. Incluso algunas veces habla con las profesores de música, religión o inglés para poner algunas preguntas de sus asignaturas en los controlillos. Mi cuñada dice que es un caos de mujer, ya que es como una caja de sorpresas y no entienden cómo luego puede evaluar exámenes de contenidos tan dispares que dan otros profesores, y exámenes de tanta tipología, ya que tampoco les dice nada del valor de cada examen. Es un caos. Luego, encima, no respeta las horas de sus tres asignaturas (a lo mejor tienen conocimiento del medio, y en su lugar se ponen con lengua, o a veces, enlaza dos horas seguidas de matemáticas). Ella dice que lo hace para organizarse mejor y ajustarse a las necesidades de los niños.

-Seminario 1 (2ª semana de noviembre): Introducción: sesión informativa de carácter general sobre el trabajo de investigación: justificación de su elaboración, procedimiento y evaluación.

-Seminario 2 (4ª semana de noviembre): Técnicas de búsqueda de información (diccionarios, recursos bibliográficos, bibliotecas, medios de comunicación, revistas, nuevas tecnologías, etc...).

-Seminario 3 (después del puente de la Constitución): Técnicas de tratamiento de la información (lectura comprensiva, subrayado, esquema, resumen, reseña, jerarquización de la información, selección de citas).

-Seminario 4 (a la vuelta de Navidades): Normas de redacción y presentación del trabajo.

-Seminario 5 (junio): Seminario para resolución de posibles dudas y control del trabajo realizado hasta el momento

-Seminario 6 (en diciembre , cuando los alumnos estén en 2º de Bachillerato): Técnicas de exposición oral y defensa del trabajo de investigación

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Normalmente, cada año hay un par de profesores encargados de impartir estos seminarios. Organizamos un sorteo y salen dos nombres. Esos dos profesores serán los que se encarguen de impartir esos seminarios de orientación para hacer el trabajo. A principios de curso organizamos el sorteo y salieron elegidos un profesor de matemáticas y otro de educación física.

Durante este mes de octubre los alumnos han estado eligiendo tutor y tema. Este año (al igual que los dos cursos pasados) no hay nadie que me haya elegido, así que no tengo que tutorizar ningún trabajo. Entonces la directora ha dicho que como nadie me ha elegido me encargue yo de impartir los seminarios (aunque ya se haya celebrado el sorteo), ya que soy el único que no tengo que tutorizar este año, y como tutorizar trabajos es algo que quita tiempo, para igualar un poco las cosas debería encargarme de los seminarios. Además me ha dicho que ya son tres años seguidos sin tutorizar, así que lo más normal sería que yo me encargara de hacer los seminarios.

A mí eso me ha sentado muy mal. Si se ha hecho el sorteo, debería respetarse el resultado del mismo. Además, yo ya me había hecho a la idea de que este año no me tocaba impartir los seminarios y ahora tener que cambiar de planes no me hace gracia (es tiempo que te quita).

Mi hijo ha dicho que debería basarse únicamente en las notas escolares para dar la mención. Entonces la tutora le ha dicho que ella hará lo que crea conveniente y que él no es para nadie para decidir cómo hace su trabajo, y que un alumno es mucho más que una nota.

Como la tutora es compañera mía de trabajo, hoy que la he visto me ha dicho que mi hijo se ha tomado la "coña" del alumno de la semana (que es simple programa de refuerzo) como si fuera algo muy importante. Me ha dicho que es muy competitivo y se lo está tomando muy a pecho cada vez que no lo eligen

Yo he pasado por la calle justo cuando ya había pasado todo. Estaban algunos vecinos fuera, la mujer y algunos de los piquetes. Los piquetes decían que ellos no tenían la culpa, ya que la culpa es de la mujer por ser una irresponsable y dejar el fuego encendido mientras está fuera de casa (aunque solamente sean unos minutos), y el hecho de que ellos estén o no estén en la puerta, no exime de culpa a la mujer. La mujer decía que la culpa era de los piquetes por no dejar a la gente pasar. Al final no sé cómo ha acabado la cosa (yo ya me he ido de allí).

Yo les dije que vale, que vamos a ponernos "normativos" y "teóricos" y cumplir a rajatabla con lo "legal" e interpretemos clase como "periodo en el que hay un profesor". Yo les dije que les dejaría salir los lunes, martes y miércoles al pasillo entre clase y clase. Yo también saldré del aula cuando termine la primera hora y en ese tiempo podrán salir a hablar, hasta que yo vuelva al aula con la segunda hora.

De todas formas, debido a la atmósfera de "desesperación" (nos tenemos que ir a Valencia, no tenemos a nadie, etc...) mi mujer aceptó (pero de muy mala gana). Al final, nos quedamos con los 4 niños.

Os voy a contar una cosa que le ha sucedido a la hija de unos amigos. Creo que nos puede servir como situación para reflexionar, analizar y valorar.

La chica está en la Universidad. Por lo que se ve, tienen a una profesora que les da dos asignaturas (en dos momentos diferentes de la carrera): una en el segundo curso, y otra en el cuarto curso. Las dos asignaturas están muy relacionadas, y de hecho, en la asignatura de 4º hay algunos temas en común con la asignatura de 2º. La propia profesora les dice que en la asignatura de 4º combina temas de repaso de 2º con temas nuevos, ya que los conocimientos anteriores son necesarios para entender cosas del curso más avanzada. Ella misma les ha dicho que le hubiera gustado que las dos asignaturas fueran seguidas (una en el primer cuatrimestre, y otra en el segundo de un mismo curso), ya que así hubiera sido todo seguido y los conocimientos de la primera asignatura estarían más frescos. Sin embargo, para cursar la segunda asignatura tienen que pasar dos años desde la primera (para un alumno que sigue el orden normal de la carrera). Por eso, luego los alumnos llegan con bastante lagunas a la de 4º ya que ha pasado mucho tiempo. Por eso, decidió estructurar la asignatura de 4º de tal forma que combinaran cosas de repaso de 2º con cosas nuevas de 4º. En ningún momento, la profesora ha impuesto prerrequisitos para cursar la de 4º (tener aprobada la de 2º), pero en la programación lo recomienda. A pesar de ser repaso, la profesora les dice que todo lo que dice en clase es importante, así que aunque sean temas que ya medio conocen de 2º, también les puede caer como pregunta de examen de 4º.

Resulta que la hija de mis amigos, y unos cuantos más de su grupo, viendo que el horario era compatible han decidido matricularse en las dos asignaturas de esta profesora: en la de segundo y en la de cuarto. Así que este curso ven por partida doble a la profesora.

En ambas asignaturas, la profesora utiliza la misma metodología y criterios de evaluación, pues las lleva paralelamente y la forma de trabajar es idéntica en ambos casos. Resulta que esta semana había puesto el examen parcial de ambas asignaturas. Puso como fecha el lunes 11 de noviembre tanto para la asignatura de 2º como para la asignatura de 4º. Uno lo hizo a las 4 de la tarde y otro a las 6. Por tanto, el grupo de chicos que se cogió las dos asignaturas tenía esa tarde los dos exámenes seguidos. Ellos hablaron con la profesora para que los pusiera en días diferentes. La profesora les dijo que no, que no fueran tan llorones y que también tenían que aprender a organizarse, y que si estudian al día no les importaría tener dos exámenes el mismo día. Además, les dijo que tampoco eran para tanto, ya que hay temas que coinciden para las dos asignaturas (que son idénticos), así que ya están matando dos pájaros de un tiro.

La profesora sigue siempre una misma metodología para los exámenes. Se trata de un examen teórico de desarrollo (las prácticas las evalúa de forma separada mediante entrega de trabajos). Propone dos temas y los alumnos eligen y desarrollan uno de ellos. Además, para dar cierta objetividad, se trae un bombo de una lotería de esas de juguete que tiene en su casa, saca dos bolas (delante de los chicos), y los números que salen son el número de los temas que los chicos tienen que desarrollar (eligiendo uno u otro).

En el examen de 4º siguió este procedimiento. Sin embargo, en la asignatura de 2º, solamente sacó una bola en vez de dos. Por lo que se ve, este año ha ido bastante más lenta en 2º (han coincidido los días de clase con días de fiesta, de huelga, reuniones de departamento, etc...). Eso y que los alumnos tenían más problemas, le ha costado avanzar y solamente ha visto 5 temas. La profesore les dijo a los chicos hace un par de semanas que 5 temas son muy poco para dar a elegir entre 2, así que solamente sacará una bola, y esa será el tema que desarrollen, ya que son pocos temas. En 4º, como dieron 13 temas, sí sacó dos bolas para que eligieran entre dos temas.

El lunes, la hija de mis amigos tuvo los dos exámenes. Primero el de 2º. La profesora sacó solamente una bola (tal como se había acordado). La hija de mis amigos hizo su tema y salió bastante contenta, ya que era uno de sus temas favoritos. En general, los chicos estaban muy contentos con el tema que había salido.

Luego llegó el examen de 4º. Ya os he dicho que en la asignatura de 4º hay temas que coinciden con la asignatura de 2º. La profesora sacó dos bolas. Resulta que la primera de esas bolas era el mismo tema que había salido en el examen anterior. La segunda bola era un tema de los "feos", de los últimos, que solamente era exclusivo de 4º.
Tanto mi amiga, como el grupillo de chicos que habían escogido las dos asignaturas decidieron volver a hacer el mismo tema del examen anterior, ya que se lo sabían muy bien y el otro era más "feo".

Resulta que la profesora les dijo que la gente que había hecho el examen de 2º, ahora en el de 4º hiciera la otra opción, ya que sería absurdo volver a desarrollar un tema que habían hecho hace 10 minutos, ya que sería una pérdida de tiempo para ellos (tener que escribir otra vez lo mismo) y para ella a la hora de corregir, así que les dijo "los que habéis hecho el examen anterior conmigo, tenéis obligatoriamente que hacerme el tema segundo".

Hace un par de semanas, según se ve, hicieron un partido amistoso. Aunque se llevan a matar, siempre les gusta organizar en pretemporada algún partido amistoso, por la cercanía que hay entre los pueblos (ya que se llega andando y eso supone menos gasto de desplazamiento).

Como ya os he dicho, los del equipo rival siempre están soltando por la boca cosas muy feas (auténticas burradas) sobre el entrenador. En el amistoso, el entrenador se trajo a su mujer para que viera el partido. Según se ve, la mujer está enferma (fue con un pañuelo en la cabeza...me imagino que estará con ciclos de quimio o algo). El entrenador se la trajo y ella se sentó en las gradas.

Según se ve, el hecho de que estuviera ahí la mujer enferma, hizo que los aficionados del equipo rival se "cortaran" un poco a la hora de soltar por la boca. De hecho, fue la primera vez que nadie insultó ni dijo ninguna burrada. Mis amigos hicieron un comentario, cuyas formas y contextos de uso no fueron las correctas, pero cuyo contenido era una verdad como un templo: a la gente le gusta ser "políticamente correcta" y "bienquedá", ya que en condiciones normales hubieran estado "chinchando" todo el partido contra el entrenador (como ha pasado siempre, incluido en los amistosos). En cambio, como estaba su esposa enferma, a la gente le dio corte insultar al marido. Por eso, mis amigos hicieron un comentario en plan "los mismos tópicos rancios de siempre" (o algo así). Les echó en cara a la gente que todo esto les creara una especie de "tabú".

Mi opinión: Insultar está mal tanto con la mujer enferma como sin la mujer enferma. Mis amigos pecaron de ser demasiado sinceros y emplear unas formas un pelín "brutas", pero creo que en el contenido llevan razón: al final, la gente se portó "bien" no de manera voluntaria, sino porque en ese lugar había una mujer enferma. Y eso es muy triste. El respeto debe existir siempre. Yo sé que mis amigos se pasaron en las formas, y actuaron mal, pero hasta aquí, creo que llevan mucha razón en sus palabras.

Por eso, mis amigos estuvieron insultando al entrenador. Evidentemente, estuvo mal (eso está mal siempre), pero al menos fueron coherentes a sus principios, no dejándose influir por lo políticamente correcto. Ellos se portaron como un día "normal" en este tipo de partidos (como hace toda la afición del equipo rival).

Según se ve, la mujer, de escuchar los insultos y burradas hacia su marido, terminó con los ojos llorosos. Ella cogió, se levantó de su sitio y salió rápidamente de las gradas. La señora tuvo la mala suerte de que al salir, tropezó y cayó al suelo. El hijo de mis amigos (prácticamente es un niño, ya que tiene 12 años) se empezó a descojonar de la caída, y en plan "burla" empezó a cantar mientras la levantaban el "Ay pena, penita, pena".

La gente que había alrededor empezó a decir que tanto el padre, el hijo como el otro hombre eran seres despreciables y que se fueran a vivir a un estercolero, ya que esa forma de comportarse es más propia de animales que de personas, y que esa forma de tratar a un ser humano es vergonzosa.

El padre del chico dijo que no entiende que todo el mundo vaya de juez y de predicador del bien, cuando "todos nosotros somos igual de despreciables". Al menos, mi amigo tuvo un gesto autocrítico, considerando que eso que había hecho (especialmente, la manera de actuar de su hijo) no estuvo nada bien. Parece que los únicos malos de la película son mis amigos, cuando todo el mundo ha cometido errores (que parece que no se dan cuenta). Si ellos se han apaciguado no ha sido por voluntad o por educación, sino porque esa mujer estaba enferma. Por tanto, yo soy el primero en reconocer que mis amigos perdieron las formas y no supieron estar a la altura (me avergüenzo de que sean amigos), pero al menos, no fueron hipócritas y dijeron muchas verdades (aunque duelan). La gente ahora va de digna y de buena (hay que tener respeto, hay que tratar a la gente bien, etc...) cuando ellos han sido los primeros en decir auténticas burradas del entrenador. Según mi cuñado, la cantidad de cosas que se han dicho en cada partida es para escribir un libro.

Los chicos decían que solamente tendrían que castigar al chico que bailó delante de la profesora, ya que fue el principal culpable.

Nosotros estábamos muy enfadados por todo lo que pasó (tenéis que entenderlo, ya que la gente tiene una cara y una jeta impresionante, y te sienta mal que actúen de ese modo). De todas formas, los críos no tienen la culpa de nada, así que los tratamos normal. El enfado lo teníamos con la madre, que nos encasquetó a los críos.

Hace 12 años murió un hermano de mi mujer en un accidente de tráfico. La verdad es que fue un trago muy duro, especialmente para mi suegra y para la esposa e hijo del fallecido. Además, lo del hermano de mi mujer ocurrió justo un mes después de la muerte de mi suegro, así que imaginad el panorama.

De un día para otro, la mujer del fallecido empezó a distanciarse del resto de la familia. Ella decía que ahora que no estaba su marido, no tenía ganas de seguir manteniendo esa relación de familiaridad que había antes con el resto de la familia (ni con mi suegra, ni con los hermanos de mi mujer ni con los sobrinos). Los hermanos de mi mujer entendieron al principio esta decisión, ya que la mujer había pasado un trago muy duro, y es normal que no tenga muchas ganas de sones. Sin embargo, la mujer decía que si ella había aguantado al resto de la familia era por su marido, pero ahora que él no estaba no quería seguir relacionándose con los demás. De hecho, cada vez que algún hermano de mi mujer se acercaba a visitar a la viuda siempre eran malas caras hasta que un día ella dijo que la dejáramos en paz, y que era su decisión.

Resulta que hace unos meses mi suegra puso en venta una casa que tiene en el pueblo. La mujer va poco por el pueblo, así que analizó la posibilidad de poner en venta la casa (muchas veces que ha ido al pueblo, siempre se ha acabado alojando en casa de su hermana en lugar de su propia casa). Por eso, en enero de este año decidió ponerla en venta. Su idea era repartir el dinero obtenido por la venta de la casa entre los diferentes nietos (ya que quería tener un detalle con ellos). No se trata de un testamento ni nada parecido, sino de una iniciativa personal que quiso hacer sin necesidad de "oficializar" nada.

Me imagino que cuando mi suegra puso la casa en venta, las vecinas se interesarían por el tema (en plan: ¿Por qué vendes la casa?). Mi suegra les diría la verdad (que la vendería y repartiría en dinero entre los nietos).

La mujer del hermano fallecido de mi esposa es de este mismo pueblo. Me imagino que por las vecinas se acabaría enterando de que mi suegra iba a repartir el dinero entre los nietos.

A las 3 semanas de poner la casa en venta, tanto mi cuñada viuda como su hijo se presentaron en casa de mi suegra a hacerle una visita. Después de 10 años tuvieron el valor de ir a verla. Según me contó mi suegra, se presentaron como si nada hubiera pasado en 10 años. Todo fue en plan cordial, con muchísima confianza, como si mi cuñada fuera una más. A mi suegra casi le da algo con esta visita, ya que todo fue inesperado. Imaginad el cuadro: después de tantos años, verlos otra vez ahí como si nada pasara, con todo el "cariño" del mundo. A mí se me caería la cara de vergüenza presentarme de esta manera después de tanto tiempo y sin tan siquiera dar ninguna explicación. Mi suegra dice que esta visita la hicieron como si fuera una visita normal de la familia, sin comentar nada de todo lo que pasó durante estos años.

A partir de aquí empezaron a llamar a mi suegra con más frecuencia y a hacerle visitas esporádicas (cada semana, más o menos). Cuando el resto de hermanos se enteraron de que esta mujer empezó a retomar las relaciones con mi suegra, justo cuando mi suegra había puesto la casa en venta, se armó la marimorena. Mi suegra no se dio cuenta de esta "curiosa coincidencia" (la mujer vuelve a entrar en contacto con la familia justo cuando la casa está en venta) Qué casualidad!!!!!!!!

Algunas de mis cuñadas estaban indignadas, pero tampoco querían decírselo a la cara, ya que mi suegra parecía contenta y tampoco querían comerle la cabeza con estos temas (para ella, volver a ver a su nieto era una alegría). No obstante, os puedo asegurar que las críticas hacia esta mujer han sido de padre y muy señor mío (las hermanas de mi mujer, aunque haya sido a sus espaldas, la han puesto de sinvergüenza, de rastrera y de todo). Si nadie se lo ha dicho a la cara ha sido por no liarla y no dar un disgusto a mi suegra, pero todos los hermanos están indignados.

La semana pasada mi suegra consiguió vender la casa de manera oficial. El hijo de esta mujer (como nieto de mi suegra) también se ha llevado su parte. Resulta que mi mujer y yo, hace unos cuantos años, estuvimos ayudando a mi suegra a hacer la reforma de esa casa. Nosotros le pagamos a mi suegra la caldera, el cambio de suelos, de puertas, los muebles, etc...Por eso, a la hora del reparto por la venta, mi suegra ha tenido en cuenta esta detalle y a mi hijo le ha tocado un poco más que a los demás nietos.

En más de una ocasión, los alumnos han utilizado los foros de la asignatura de Lengua de manera indebida (en lugar de para tratar temas de Lengua, para hacer bromas, escribir tonterías o hacerse gracias). Por tanto, no es la primera vez que los alumnos la lían en el Moodle.

La otra tarde me metí al Moodle para colgar unos esquemas, cuando vi que un 90% de la clase estaba conectada. Yo ya sabía que "algo" pasaba (uno, con los años, acaba conociendo a los chicos más que a Lepe, y yo ya supe en cuanto vi a casi todos los alumnos conectados, que habrían hecho algún sabotaje en el foro de la asignatura).

Como es lógico, no me equivoqué. Me metí al foro y vi un montón de temas abiertos con los títulos paralelos. Todos decían "La experiencia más [adjetivo] de mi vida".

Todos los hilos contenían pequeñas historias (de 3-4 líneas) y en todas ellas se contaban anécdotas donde se aludía al "pollo a la milanesa".
Ejemplos:
-Ayer fui a un restaurante y en la mesa de al lado estaban comiendo pollo a la milanesa
-Hoy he discutido con mi madre ya que ella quería darme de comer ensalada y yo quería pollo a la milanesa
-Buscando en el contenedor de basura, encontré pollo a la milanesa.

Eran pequeñas anécdotas donde de una manera u otra, siempre se citaba el "pollo a la milanesa". Debajo del tema, los alumnos hacían comentarios jocosos, haciendo humor con esto.

Yo, como administrador del espacio, no voy a consentir que se utilice el Moodle para estas cosas. Por eso, borré absolutamente todos los temas. Los chicos seguían haciendo temas con el pollo a la milanesa. A mí no me daba tiempo a borrar, ya que había muchos alumnos conectados. Era una impotencia enorme, ya que por más que borraba, el foro se iba llenando de materiales.

Al final, tuve que poner yo un mensaje en el foro, diciendo que al siguiente mensaje con la "bromita", suspendía la evaluación a su autor.

Con eso, conseguí calmar a los chicos un poco, los cuales dejaron de escribir. Así, pude borrar todos los temas y dejar el foro limpio.

Al día siguiente tuve clase con ellos. Me enfadé bastante, ya que no es la primera vez que utilizan el Moodle de esa manera (para hacer bromitas, quitando importancia a los materiales importantes de la asignatura).

Los chicos me empezaron a decir que soy un aguafiestas y un amargado. Me comentaban que había muy buen rollo esa tarde, ya que todo el mundo estaba conectado, haciendo bromas y pasándolo bien de una manera sana, sin perjudicar a nadie y sin hacer nada malo.

Una chica me dijo que las bromas eran curradas, ya que esas anécdotas del pollo a la milanesa estaban bien redactadas, y se habían tenido que currar la historia y escribirla bien (aunque fuera corta). Otras veces habían hecho bromas fáciles (poniendo imágenes ya hechas de Internet con algún comentario "sencillo"). Según se ve, esta vez, se han tenido que currar las bromas, imaginando la anécdota y redactándola en unas líneas. Por eso me decía que no tenía que haber borrado nada.

Otro chico me dijo que a mí como profesor de Lengua siempre me gusta hablar de que hay que redactar, escribir bien, sin faltas de ortografía. Y luego, como tutor, siempre me gusta hablar de la "cohesión del grupo". Por eso, algunos me acusaban de no ser coherente, ya que para hacer esas bromas, se ha configurado un ambiente muy majo entre toda la clase (que yo, según se ve, he roto), y para hacer las historias se han tenido que currar la redacción.
Por eso, me decían que no tenía que haber borrado nada, ya que cada uno es libre de escribir lo que quiera, pues esos juegos no hacen daño a nadie y tampoco pasa nada por eso.

Yo les dije que el Moodle es una herramienta didáctica. El foro se utiliza para resolver temas académicos. Si yo entro al foro y me encuentro entremezclados temas serios (para resolver dudas, volver a explicar un concepto no entendido, etc...) con temas "jocosos" (las bromitas del pollo a la milanesa) no hay profesionalidad. De hecho, es fácil que entre tanta "mala hierba" se te pasen temas que sí son serios. Si un alumno me pregunta una duda y esta duda queda en medio de todas las bromitas, es fácil pasarla por alto. Por eso, para evitar confusiones, el foro solo debería quedar para temas que sean académicos. No queda bien que una herramienta didáctica se utilice como burla o pitorreo. Por eso, no voy a consentir que se utilice de esa forma (por muy buen rollito que haya).

Por eso, yo les dije que si tanto les gusta escribir, para eso, organizamos dentro del foro un concurso de relatos literarios (con nota numérica para que les cuente para la evaluación), y así todos contentos.

Evidentemente, los chicos dijeron que no (no, que ahora tenemos muchos exámenes; no, mejor otro año, que ahora no tenemos tiempo).

Yo les dije que no me parece normal decir "no tengo tiempo", cuando ellos mismos han perdido una tarde entera haciendo tonterías en el Moodle (me tuvieron 3 horas borrando cosas). Para unas cosas, sí tienen tiempo. Sin embargo, para otras, no. Qué casualidad!!!!!!!!!!!!!!

Lo gracioso de todo esto es que la primera en protestar por esto ha sido mi cuñada la viudita. Según me ha contado uno de los hermanos de mi esposa, la mujer nos ha estado poniendo a parir a nuestras espaldas. Se ha "unido" a dos hermanas más de mi mujer (a las que tampoco les ha hecho gracia este reparto) y nos han puesto a caldo, tanto a nosotros como a mi suegra (por hacer ese reparto). Han dicho que mi suegra ha sido una sinvergüenza, dando más dinero a uno de los nietos, que nosotros tendríamos que haber rechazado ese dinero, que el reparto debe ser equitativo y todos los nietos llevarse lo mismo, etc...

Me hace gracia que esta mujer, después de 10 años sin mirar a la cara a mi suegra, se crea que tiene la autoridad necesaria para poder criticar, cuestionar o juzgar las cosas de los demás. Ella es la primera en decir que todos los nietos deben ser iguales y recibir el mismo dinero. Sin embargo, parece no acordarse de que ese nieto ha estado muchos años sin saber nada de la familia. A mí se me caería la cara de la vergüenza ir de juez de la vida sin haber limpiado mis trapos sucios. Y lo gracioso es que algunas de mis cuñadas le dan la razón a esta mujer (cuando meses antes la han puesto a caldo por haber retomado relaciones con mi suegra, justo con la venta de la casa). Viva la incoherencia y la hipocresía!!!!!!!!

El sábado por el mediodía nos llama la vecina y nos dice que se quieren quedar en Valencia hasta el domingo por la mañana, ya que les da "cosa" ir solamente para el entierro. Les gustaría quedarse, aunque solo fuera una noche, para acompañar al viudo y al hijo de la fallecida.

Mi mujer hizo algunos comentarios por teléfono para que la vecina se sintiera aludida, para que al menos se diera cuenta de que una cosa es un favor, y otra cosa un abuso. Nosotros no somos tontos ni gilipo...Al menos, mi mujer quiso transmitir que se encontraba molesta con toda esta situación. Ya sé que la situación es seria (hay una mujer fallecida de por medio), pero nosotros no tenemos esa obligación. No somos una ONG. Tenéis que entender mi postura, por muy "dura" que resulte.

Además, los críos no se portaron del todo bien. Los pequeños se pusieron cansinos y empalagosos (no se estaban quietos, siempre quejándose de qué aburrimiento, tocando cosas que no deben, husmeando por la casa, etc...). El mayor hizo un par de cosas que no nos gustó nada. Metió la mano en uno de los armarios de la cocina (para coger una gominola), sin pedir permiso. Además, el chico se puso a hablar (con toda la confianza del mundo) con la chica que nos limpia. Se cogió unas confianzas que no son normales. Luego la otra también le daba conversación y eso no está bien, ya que se pasaba más tiempo dándole a la lengua con este chico que haciendo su trabajo. Si te pagan para limpiar en una casa, tu trabajo es limpiar la casa y no andar de risitas y de cachondeo con el chico. Es normal que a nosotros nos siente mal.

Además, el sábado por la noche, mi mujer organizó en casa una cena con compañeros de su trabajo. Fueron cerca de 25 personas, por lo que tuvimos que contratar un cátering.

Uno de mis sobrinos está este año cursando el nuevo Máster de Secundaria (el que sustituye al antiguo CAP). Ahora mismo está con varios módulos teóricos, pero cuando los termine comenzará la parte práctica (estar unos meses trabajando en un instituto). Este sobrino vive en un pueblo bastante lejos de la ciudad (es uno de los últimos pueblos de la provincia, a casi 1 hora y media de viaje). Durante el curso académico alquila un piso en la ciudad para evitar tener que ir y venir a casa.

En la especialidad de mi sobrino están matriculadas 7 personas (mi sobrino y 6 chicos más, muchos de los cuales se conocen de la carrera).

El otro día sacaron las plazas para hacer las prácticas. Como en la especialidad de mi sobrino no se matricula mucha gente (casi nunca llegan a 10 personas) las ofertas que sacan también son bastante escasas (casi las justas). Además, con la crisis, apenas pagan a los profesores de instituto por ser tutores de prácticas así que este año muchos se han negado a tutorizar las prácticas. Los pocos que se han ofrecido lo han hecho porque les gusta (sabiendo que casi no les van a pagar este año), así que la Comisión del Máster (al menos en el Campus de mi sobrino) se las ha visto negras para convencer a profesores de instituto para que sean tutores de prácticas. En la especialidad de mi sobrino ha sido tremendo poder sacar algunas plazas (para los 8 matriculados). Han sacado prácticamente las justas.

Así más o menos han quedado las cosas en su especialidad:

-3 plazas en un instituto casi en las afueras de la ciudad (que es donde trabajo yo)
-3 plazas en un instituto que está en el centro de la ciudad
-3 plazas en un institito que está al lado del pueblo de mi sobrino (los pueblos están casi juntos, ni a un kilómetro de distancia)
-2 plazas en un instituto de otra provincia (en un pueblo casi al límite).

El coordinador de la especialidad les dijo a los chicos que lo sentía mucho pero en este campus (y especialidad) les ha costado mucho poder organizar las prácticas y que esto es lo máximo que han podido hacer. Para elegir el centro de prácticas lo harían en función de la nota del expediente (nota de la carrera). Las personas con más nota tenían opción de elegir primero. Mi sobrino es el que tiene la nota más alta, así que tiene que elegir primero.

Todos los chicos (salvo mi sobrino) son de la ciudad, así que querían cualquiera de los dos institutos que se ofertan (3 plazas en cada instituto x 2 institutos son 6 plazas).

Todos pensaban que mi sobrino elegiría el instituto de al lado de su pueblo, ya que es el que más cerca está (está a 10 minutos de casa, ya que mi sobrino vive además muy cerca del instituto).
Así que los otros 6 pensaban que las 6 plazas de los dos institutos de la ciudad eran para ellos.

Sin embargo, mi sobrino no quiere hacer las prácticas en su pueblo. Él está mejor en la ciudad, más libre, sin tanto control de horarios y de entradas y salidas, y no le apetece tener que estar en su pueblo todos los meses que duran las prácticas. Él prefiere seguir aquí en la ciudad porque está mejor.

Ayer hicieron la elección y mi sobrino (primero en elegir) eligió uno de los institutos de la ciudad. Los 5 chicos siguientes fueron eligiendo las plazas que quedaban de los institutos de la ciudad (por orden de nota). El último de los chicos (que es de la ciudad) se quedó sin plazas y tuvo que resignarse a uno de los dos institutos de los pueblos (a hora y media de camino más o menos).

El chico terminó casi llorando. Dijo que era una pu-tada tener que ir a un instituto que está tan lejos, ya que en casa está viviendo una terrible situación (los dos padres en paro) y la cosa no está como para tener que desplazarse a diario y comer fuera todos los días.

Todos los compañeros empezaron a decir que mi sobrino era el culpable, ya que lo suyo hubiera sido que él se hubiera quedado en su pueblo y así la plaza de mi sobrino sería de este chico (que es de la ciudad). Así, ninguno de los 7 tendría que desplazarse para hacer las prácticas. Mi sobrino dijo que él no quiere hacerlas en su pueblo, pues prefiere estar en la ciudad. Todos le empezaron a decir que era un caprichoso y que tenía que ser más razonable y pensar en su compañero y en lo que era mejor para todos. Le dijeron que eso de preferir vivir fuera (con todos los gastos que conlleva) pudiendo hacerlo en su casa en el pueblo, es de ser un poco "pocas luces" (y ganas de hacer gastar a los padres). Es verdad que a mis cuñados les cuesta tener a mi sobrino estudiando aquí y si las prácticas las hiciera en su pueblo sería un menor gasto para ellos, pero mi sobrino se ha empeñado que quiere hacer las prácticas en la ciudad, que está mejor y que no quiere hacerlas en el pueblo. Mis cuñados (que se lo pueden permitir) dicen que si es ilusión de su hijo eso, que se haga y no hay problema (mientras ellos tengan).

El chico que se quedó sin plaza en la ciudad (me dijo mi sobrino) que ayer salió llorando de allí, y todos los chicos (e incluso el coordinador de la especialidad) le pusieron mala cara a mi sobrino y se fueron todos enfadados.

Mi mujer decidió que los 5 críos se pusieran a cenar en la cocina, ya que queda feo que chicos que no conocemos de nada se pongan a cenar con gente mayor, de cierta importancia (ya que es gente del trabajo de mi mujer). Esos niños no pintan nada ahí, con gente que no conocen de nada. Además, los dos más pequeños tienen un comportamiento nefasto en la mesa (no saben comer, ya que no paran de guarrear con el pan, las servilletas, la comida, etc...). La más pequeña tiene una voz de quirio que tira para atrás. Lo único que pueden hacer esos niños es fastidiar la cena. Además, ellos se aburrirían con gente mayor. Por eso, mi mujer les hizo cenar en la cocina.

Un dato: mi hijo no estuvo esa noche porque se fue a dormir a casa de su abuela. Si mi hijo hubiera estado allí, él hubiera cenado con el resto de chicos en la cocina. De hecho, el chico más mayor tiene casi la edad de mi hijo (dos años menos). Lo aclaro, por si pensáis que mi mujer es partidista. Si hubiera estado mi hijo, mi hijo habría sido tratado como el resto de jóvenes (en la cocina, ni más ni menos que nadie).

Por eso, mi mujer les hizo cenar en la cocina. En cuanto a la comida, mi mujer pensó que lo mejor era hacer una comida "para niños" (que a ellos les gustara) en lugar de darles comida del cátering, ya que en el cátering había cosas que no pega con críos pequeños (canapés, pescados, salsas, cosas más "exóticas", etc...). Por eso, les preparó pechugas de pollo con patatas, que es algo que gusta a todos los niños. En cuanto terminaron, mi mujer les mandó al piso de arriba. En ningún momento les ordenó acostarse (era sábado por la noche). Solamente les dijo que se fueran arriba a hacer otras cosas (arriba tienen una consola, un cuarto de juegos, etc...).

Al día siguiente, a eso del mediodía, vino la vecina a recoger a los niños. Como es lógico, mi mujer se tuvo que enfadar y poner seria, ya que la señorita no había hecho las cosas bien (nos encasqueta por la cara tres críos, retrasa su llegada, sus niños se portan mal, etc...). Mi mujer fue clarita con la vecina y le dijo las cosas a la cara. La vecina, en principio, se notaba que estaba avergonzada, ya que lo que había hecho sabía que no estaba bien. La cara cuando vino a recoger a los niños fue un poema.

Esta mañana nos ha llamado mi cuñada y nos ha contado que ayer por la tarde la vecina estuvo hablando mal de nosotros. En el centro cultural del barrio hubo una exposición de trabajos manuales de niños. Vino bastante gente y mi cuñada nos dijo que la vecina estuvo poniéndonos verdes: que menudo valor el de mi mujer por apartar a los niños y hacerles comer en la cocina en lugar de comer con los demás en el salón, que menuda es mi mujer por hacer que unos niños se acuesten a las 9 y media un sábado por la noche, que menuda insensibilidad por no dejar que los críos prueben la tarde del cátering, etc...Después del favor que le hemos hecho, la mujer nos ha estado poniendo a parir. Y lo gracioso, es que lo ha hecho MANIPULANDO y MINTIENDO.

Este problema ha ocurrido desde siempre. Cuando yo llegué a trabajar al instituto (hace ya bastantes años) en el departamento de lengua ha habido una costumbre en la que todo el mundo ha participado de manera voluntaria y con predisposición total y gusto a hacerlo. Tanto los profesores fijos como los de contrato temporal han participado sin necesidad de obligarles a lo largo de estos años. No se trata de algo oficial y escrito, sino de un pacto entre compañeros de trabajo (y si alguna vez, por cualquier necesidad, no se puede hacer, pues no se hace). Todos los profesores depositamos cada mes 60 euros de nuestro sueldo para el departamento, de tal forma que entre el presupuesto anual y esta iniciativa se nos queda una buena hucha. Somos 12 en el departamento, 720 euros extras al mes, unos 8000 euros al año (no está nada mal).

Con esto, siempre hemos podido tirar la casa por la ventana a la hora de organizar actividades y comprar caprichitos (normalmente, "joyas bibliográficas"...como a mí me gusta decir). De hecho, todos los años nos sobra bastante dinero, aunque el dinero nuestro siempre lo tenemos separado del oficial. Un montón de viajes, excursiones, seminarios los hemos pagado con este dinero, ya que ahora en época de crisis sería imposible hacerlo con el dinero que nos dan.

Así, curso a curso hemos formado una buena bolsa acumulada gracias a este dinerillo mensual (ya que nos sobra bastante año tras año). Como teníamos bastante dinero, este año hemos decidido hacer unos cambios en el departamento, ya que el departamento es un lugar en el que pasamos muchas horas al día. Hemos comprado un sofá, varios sillones, una televisión, una nevera, un microondas, una cafetera, ordenadores para todos los profesores del departamento, hemos ampliado nuestra biblioteca, hemos hecho cambios en la decoración (un armario para meter cosas) e incluso también hemos hecho reformas en el cuarto de baño (poniendo unas cuantas cosillas que han quedado muy bien). Al fin y al cabo es dinero nuestro (de años), así que hemos decidido renovar un poco el departamento (que hacía falta). Nos ha costado bastante todo esto (las cosas como son), pero ha merecido la pena para acomodar nuestro lugar de trabajo (además muchos profesores pasan el día entero en el instituto y eso siempre viene bien). Nosotros dejamos claro que esto lo hicimos con NUESTRO dinero (y no con el del presupuesto anual). Hemos dejado la bolsa extra tiritando (el departamento necesitaba una reforma de arriba a abajo) pero era del dinero nuestro de todos los meses.

A pesar de esto, los demás departamentos están que trinan por todos los cambios que hemos hecho. Nos han dicho que aunque sea nuestro dinero está muy mal administrado y que eso tenía que haber sido para actividades y proyectos docentes en lugar de destinarlo para cosas que repercuten exclusivamente en el profesorado de nuestro departamento. Según ellos, ha sido un derroche absurdo y no necesario. Según algunos profesores, se podrían haber hecho cosas más productivas, ya que hay departamentos que no pueden hacer cosas que les gustaría por falta de dinero, y el haber hecho esto, supone como una falta de respeto a todos ellos. También nos han insinuado (en esta caso, dos profesoras de biología) que es poco elegante ser tan opulentos en épocas de crisis como esta, y que ese dinero podría servir para colaborar con el resto de departamentos didácticos en algunas actividades y no para reformar el departamento.

Ella nos dijo que no se nos ocurriera secarnos las manos con esas toallas. Las iba a colocar en los baños de la casa, pero solamente para decorar. Para lavarnos las manos, utilizamos las más "corrientitas".

El otro día vinieron a pasar el día a casa mis dos sobrinillas pequeñas, y se quedaron a comer. Cuando se fueron a lavar las manos, mi mujer les dijo a las niñas que se secaran con las toallas que hay al lado de los lavabos y no con las que hay al lado de la puerta (que son las buenas). Además, mi mujer es bastante insistente y repite mucho las cosas, y dijo varias veces "No se os ocurra", "A las toallas nuevas ni os acerquéis".

Aunque las niñas en principio sí hicieron caso y se secaron las manos con las toallas normales, mi sobrina más pequeña, al terminar de secarse las manos se quedó mirando a la toalla buena, la sacó del toallero y la empezó a tocar y a llevársela a la cara. Tampoco hizo nada más, pero sí la empezó a tocar, oler, manosear, a pasársela por la cara.

Mi mujer entró en ese momento al baño y le entraron las siete cosas al ver a mi sobrina manoseando la toalla buena. Por eso, la reacción fue un poco "intensa". Fue corriendo hacia ella, dando voces a mi sobrina (nunca insultando ni empleando términos hirientes ni despectivos, solamente exclamando cosas como "será posible"....lo típico que haces cuando un niño hace algo así), y le dio unos cuantos golpes en las manos. Mi mujer no abofeteó a la niña en la cara ni nada (para que queden las cosas claras). Solamente (de la propia impotencia) le dio golpes a la niña en las manos, muy enfadada por haber desobedecido. Mi mujer les dijo "no cojáis estas toallas" y la niña no hizo ni caso. Por eso mi mujer tuvo que ponerse así. Evidentemente, mi sobrina pequeña terminó llorando.

Una de esas actividades consistió en la elaboración de un catálogo que recogiera una serie de normas que los niños deberían seguir durante este mes y medio que duran las jornadas. Mi mujer elaboró el catálogo junto a los niños (como una actividad) y luego lo imprimió (en un papel de esos grandes) con dibujos y letras de colores para que quedara "chulo" para los niños. Mi mujer en ningún momento les obligó a cumplir esas normas. Les invitó a ello, pero nunca les obligó. Lo que sí les dijo es que los niños que se comprometieran a cumplir las normas y las llevaran a cabo durante este mes y medio que dura esta actividad, el último día organizaría una pequeña merienda.

Así, el segundo día en el centro cultural mi mujer junto a los niños elaboraron el catálogo, el cual tenía las siguientes normas. Me molesto en transcribirlo para presentar el tema con objetividad:

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DECÁLOGO PARA SER UN CONSUMIDOR RESPONSABLE

1. Cuando vaya a la tienda de golosinas me comprometo a comprar solamente TRES chucherías. Antes de salir de casa escribo en un papel las chucherías que quiero y esas chucherías serán las que voy a comprar.

2. Hasta el 15 de octubre no compro ningún videojuego para la consola. Solamente juego con los juegos que tenga o los que me dejen mis amigos o familiares.

3. Dejaré mis libros de texto del año pasado en el banco de libros de segunda mano del centro cultural para que otros niños que lo necesiten puedan cogerlos. Le diré a mis padres que me compren mis libros de este año en el banco de segunda mano del centro cultural.

4. Le diré a mis padres que me guarden la mitad y un poquito más de mi paga semanal o de cualquier otro regalo en forma de dinero que me den mis familiares.

5. Cuando vaya a un cumpleaños en lugar de regalar algo comprado, regalaré algo elaborado por mí (un dibujo, una carta, una manualidad).

6. Intercambiaré juguetes con mis compañeros del centro cultural y los del colegio cuando empiecen las clases.

7. Haré un consumo responsable de la videoconsola-ordenador y la televisión. Solamente media hora de televisión al día. Solamente jugaremos a la consola u ordenador los sábados y los domingos (media hora cada día).

8. Comemos SIEMPRE en nuestra casa.

9. No compraremos helado. Los helados los haremos en casa tal como nos han enseñado en el centro cultural.

10. Cuando quiera comprar algo, escribiré una pequeña redacción (medio folio) en la que explique por qué es importante lo que quiero comprar y para qué lo quiero. Mis padres decidirán si comprarlo o no. Si dicen que no, tendré que respetar su decisión y podré buscar alternativas que sean divertidas y gratuitas (paseos, salidas al parque, ir a casa de mis amigos o jugar a algunos de los juegos que nos han enseñado en el centro cultural).

IMPORTANTE: Si veo a mi padre, a mi madre o a cualquier otro familiar haciendo delincuencia consumista se lo haremos saber y le regañaremos. Si veo a un amigo mío incumpliendo el decálogo, se lo diré a la seño del centro cultural.
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Los niños se comprometieron a seguir el decálogo (más que nada por lo de la merienda de octubre). Los niños, niños son, pero mi mujer dijo que la idea les gustó y dijeron que lo iban a cumplir (aunque luego me imagino que cada uno en su casa hará lo que quiera, ya que no hay nadie que lo controle).

Resulta que ayer por la tarde mi mujer se fue de compras a una tienda de muebles que abrieron la semana pasada en las afueras. Como la tienda la abrieron hace nada, ahora está llena de gente que se pasa por curiosidad para verla (aunque no compre). Mucha gente es del barrio.

Aunque los muebles del salón los cambiamos hace 6 meses, mi mujer no estaba muy contenta y quería cambiar el sofá por una cheslong. Por eso ayer fue a la tienda de muebles para mirar alguna cheslong que le gustara. En la tienda también había una serie de cojines. Esos cojines eran bastante caros, ya que estaban cubiertos de pequeñas piezas de oro de no sé cuentos quilates. Luego tenían en medio un espejo y diferentes piedras brillantes. Mi mujer se encaprichó de uno y quería comprarlo. Fueron 1780 euros, pero hacía tiempo que mi mujer no se daba un capricho, así que tampoco es para tanto. Es más una joya que un cojín, ya que un cojín así no se va a utilizar para sentarte encima de él. Evidentemente, es para decorar. En vez de comprarte una pieza de joyería, te compras ese cojín (una forma original).

Después, miró una cheslong que le gustaba. Una de las veces, mi mujer le comentó a la dependienta que la cheslong era solamente para adornar, ya que no la iba a utilizar, ya que el salón lo tenemos exclusivamente para los muebles, pero realmente, comemos y hacemos vida en la salita (igual de grande que el salón, pero sin tanto cuidado en los muebles). Mi mujer es muy suya para ciertos temas y el salón prefiere no utilizarlo para no estropear los muebles. De vez en cuando, cuando viene alguna visita o después de la comida para tomar café, estamos en él, pero el resto del tiempo preferimos la salita. Por eso, mi mujer dijo que quería una cheslong bonita. El tema de que fuera cómoda no le importaba mucho, ya que no la iba a utilizar mucho.

Al final compró la cheslong y el cojín. En la tienda de muebles había una mujer, que es madre de uno de los niños que va a las jornadas de consumo responsable que organiza mi mujer.
La mujer le dijo a mi esposa que vaya tela con la "buena señora, que no para hablar de consumo responsable, no gastar y de meter mierdas en la cabeza de los niños, para luego ella comprarse una cheslong que ni siquiera va a utilizar y un cojín que es es lo más inútil y absurdo que he visto nunca". Mi mujer le dijo que ella compra lo que quiere. La señora le dijo que no le recrimina eso, sino le recrimina que no para de hablar de valores delante de los niños (no compréis esto, no gastéis en esto, no se ve la televisión), dándosela de importante, y ella es la primera que debería dar ejemplo. Entonces, según la mujer, es una incoherencia que la que está hablando delante de los niños de consumo responsable, se gaste dinero en cosas absurdas que no va a utilizar.

También le dijo que el decálogo parece redactado por la mismísima Carmen Polo (la que era mujer de Franco) y que no había leído algo tan casposo y tan lleno de gilipolleces "a cada cual más grande", y que había puntos del decálogo que había que reírse para no llorar, ya que era indignante, y encima acompañado de dibujitos y con una redacción que parece que va destinado a engatusar a niños de 3-4 años a los que se les puede convencer de todo, cuando los niños realmente tienen entre 8 y 12 años. Dice que desde que despidieron a los monitores del centro cultural y cogieron voluntarios que quisieran colaborar en el centro de manera gratuita, el centro es una mierda pinchada en un palo, y que ya le vale ir hablando de "escribir redacciones para comprar un juguete" o "solamente se ve la tele media hora". De hecho, le dijo irónicamente a la mía: "¿Qué has puesto en la redacción sobre la cheslong? ¿Cuánto te ha ocupado? (la mujer con cachondeíto encima).

Finalmente, la mujer se fue de ahí y dijo que no podía con tanta hipocresía.

Luego mi sobrina le contó todo a su madre. Mi cuñada le dijo a mi mujer que lo de golpearle en las manos sobraba claramente y que tampoco ha sido para ponerse así. Además, mi cuñada dice que parte de la culpa la tiene mi mujer, ya que siendo tan cansina y repitiendo tantas veces lo mismo ("no toquéis las toallas nuevas"), provocó el efecto contrario, ya que si a un niño más o menos pequeño le dices "no hagas esto", para llevarte la contraria lo va a acabar haciendo. Por eso, repitiendo tantas veces "no se os ocurra", mi sobrina pequeña entró en el juego. Mi cuñada piensa que si mi mujer se hubiera callado y no llega a decir absolutamente nada de las toallas a las niñas, ellas jamás se hubieran dado cuenta de esas toallas y ni las habrían tocado ni nada (se hubieran lavado las manos y hubieran salido del baño tan normal). Sacando a relucir el tema, la niña (por llevar la contraria) ya sabía que había unas toallas que no había que tocar, y por llevar la contraria, decidió tocarlas. Mi mujer con tanta advertencia indujo a que mi sobrina se portara mal (según mi cuñada).

Además mi cuñada dice que hay que tener pocas luces para comprar unas toallas y no utilizarlas, teniéndolas solamente de adorno y que "ya son ganas de tirar el dinero". Al final, a raíz de esto, mi cuñada sacó una serie de temas que no tenían nada que ver con lo importante (que es el mal comportamiento de su hija pequeña).

Ayer a última hora hice una guardia a una compañera y me bajé para la sala de profesores después de hacer la ronda y firmar en el cuaderno de registros. Durante las guardias tenemos que quedarnos en la sala de profesores. Este año apenas voy por ahí, ya que no hago guardias (la de ayer fue una excepción por ayudar a una compañera). Allí en la sala estábamos unos cuantos profesores (solamente yo del departamento de lengua). Entonces, llega una de las compañeras (como yo estaba de espaldas no me vio) y dijo nada más entrar: “Menudos sinvergüenzas los de lengua…¿Habéis visto el esperpento que han hecho en su departamento con la cantidad de pijerías y gilipolleces que se han comprado” (palabras casi literales). A mí me sentó mal el comentario y dije que no me parecía bien que hablara así, ya que eso lo hemos comprado poniendo dinero de nuestro bolsillo (y no con el del presupuesto). La profesora me dice que aunque sea dinero nuestro, hemos derrochado de una manera intolerable y que ese dinero debería haberse destinado a asuntos escolares (teniendo en cuenta que hay más departamentos didácticos aparte del nuestro) en lugar de comprar cosas que no ayudan a los procesos de enseñanza-aprendizaje.

-Mi mujer nunca les dijo que se acostaran a las 9. Lo único que dijo fue que se fuerran arriba a hacer otras cosas, ya que no quería verlos aparecer por el salón (donde había una cena de mayores).

-La vecina ha dicho que mi mujer les ha dado una MIERDA de cena a los niños, mientras los demás hemos estado comiendo marisco. Eso es otra mentira como una catedral. En la cena había marisco y muchas más cosas, que pensamos que no son adecuadas para niños pequeños. A un niño le gustan más las pechugas y las patatas que ese tipo de comida de cátering.

-Es verdad que no les dimos tarta el sábado por la noche (ahí es verdad), pero no dice por ejemplo, que el domingo por la tarde estuvieron desayunando chocolate con churros. El sábado en la comida hubo pastelitos. Y luego, durante las meriendas a los niños les hemos dado todo tipo de cosas (torrijas, pestiños, galletas, surtidos, etc...). La vecina habla de que no hemos dado tarta a los niños, pero no habla del resto de cosas que sí les hemos dado.

Mi mujer ya no tenía ganas de más juerga y dijo que no se iba con ellas. De hecho, ella me llamó por teléfono para que fuera a recogerla al casino. Tardé casi 1 hora en llegar (ya que tuve que ir a un pueblo que hay cerca para recoger a mi hijo de una fiesta de cumpleaños de un compañero de clase).

Mi mujer tuve que esperar un rato hasta que yo llegara. Se sentó en un sofá que había en el casino. Uno de los trabajadores (muy antipático y desagradable) le dijo a mi mujer que no podía estar sentada sin jugar, y que si quería quedarse ahí tenía que meter dinero en alguno de los juegos que había en la sala. Mi mujer le comentó que ya se iba a ir, ya que estaba esperando a que yo llegara. El trabajador decía que eso le da igual, que no se podía estar ahí tomando copitas gratis y que si no iba a jugar, cogiera la puerta. Le comentó que luego vienen los "jefes gordos", ven a gente sin jugar (solamente bebiendo) y la culpa recae en los trabajadores, por dejar que la gente esté de pie sin hacer nada. Dijo que algunos compañeros han sido expedientados por eso, y que el tema es muy serio.

De todas formas, el hombre este se veía quemado, ya que era el único trabajador que había en esa sala (el casino tiene varias secciones, pero donde estaba mi mujer, solo había una persona). Tenía que hacer muchas cosas a la vez: repartir bebidas, pagar premios, enseñar a la gente a jugar, controlar quién entra y quién sale dentro de esa sala (ya que tiene que hacer un registro), controlar que todo esté en orden, etc...

Mi mujer, para evitar polémicas, jugó 20 euros en una máquina que estaba libre. Esta máquina, según se ve, tenía diferentes modalidades de juego electrónicos (cartas, bingo, rifas, apuestas deportivas, ruleta, conexiones con otros casinos de España, etc...). Según se ve, tú puedes distribuir el dinero como quieras, cambiando continuamente de juego.

Por lo que se ve, hay un juego que se llama 1x2000. En la máquina aparece un paisaje de un cementerio con 10.000 lápidas (numeradas). Abrir una tumba te cuesta 1 euro. En una de las lápidas hay un premio de 2000 euros. El resto se encuentran vacías, sin premio. En el momento en que mi mujer llegó a la máquina, se habían abierto 9546 tumbas. Mi mujer decidió abrir 5 lápidas (simplemente por probar el juego). Tuvo la suerte de que le salió el premio de 2000. Evidentemente, no es lo mismo jugar cuando se han abierto 200 tumbas que cuando se hayan abierto 9000. Las posibilidades de premio son mayores cuantas más tumbas se hayan abierto.

Uno de los clientes le decía a mi mujer que ese juego era un "timo", ya que claramente está preparado para que ganara la casa. A ellos les interesa dar el premio cuando queden pocas tumbas, ya que la gente se habrá tenido que gastar miles de euros, para conseguir los 2000 euros. Este hombre le decía a mi mujer que normalmente suelen dar el premio a partir de que se abran unas 8000 tumbas (cuando la casa ha ganado 8000 euros). Luego, dan el premio de 2000 y la casa ha ganado 6000. Luego, vuelta a empezar otra vez con 10000 nuevas tumbas.
El hombre decía que lo bueno era hacer lo que hecho mi mujer: probar suerte cuando ya se han abierto más de 8000 tumbas, pero sin obsesionarte. El hombre decía que más de una vez la última tumba en abrirse ha sido la del premio gordo (ha pasado unas 3-4 veces ya desde que pusieron la máquina). Por eso, decía el hombre que eso huele a "timo".

El premio se sumó al marcador de dinero de mi mujer (la máquina decía que tenía 2007 euros). Ella me quería dar una sorpresa para cuando yo llegara a recogerla, así que en lugar de cobrar el dinero, se quedó "guarreteando" entre los diferentes juegos para que cuando yo llegara, viera que en el marcador tenía 2000 euros.

Por curiosidad, empezó a probar otros juegos, pero solo guarreteando (jugándose céntimos de euro, para que el marcador de dinero no disminuyese mucho hasta que yo llegara).

Mi mujer vio que la máquina empezaba a comportarse de una manera lenta y torpona (le dabas a un botón y la máquina tardaba en reaccionar). Había que dar al SÍ o al NO, y le dabas y no funcionaba, y a los 10 segundos cumplía la orden. El encargado decía que las máquinas funcionan con red, y seguramente habría problemas técnicos y por eso, algunas veces, la máquina tarde en reaccionar.

De todas formas, mi mujer decidió seguir jugando hasta que yo llegara para darme la sorpresa. Entró en un juego de apuestas deportivas. Mi mujer no entiende mucho de deportes, pero entró por curiosidad para ver qué cosas se podían apostar. Las apuestas que hizo fueron simbólicas (de 3 céntimos de euro o cosa así) sobre competiciones extranjeras.

En la lista de apuestas, había un apartado dedicado al Mundial de Fútbol. Se proponían más de 500 apuestas de todo tipo. Mi mujer decidió partipar en la Apuesta: ¿Cree que España ganará el Mundial 2014?

Mi mujer apostó a que NO. Después, tenía que introducir la cantidad de dinero que apostaba (como si fuera un cajero automático). Ella quería poner "20 euros". Como os he dicho, la máquina funcionaba un poco torpe, de tal forma que pulsabas un botón y a veces, tardaba en reaccionar (aunque la orden estuviera dada). El 2 si salió bien en la pantalla (nada más pulsarlo), pero luego el 0 tardaba aparecer. Mi mujer pulsó varias veces el cero, pero la pantalla estaba como congelada (ya que la máquina estaba lentísima, como cuando un ordenador tiene conexión lenta a Internet). No salía nada (aunque la orden estaba dada, y al pulsar tres ceros, estaba apostando realmente 2000 euros y no 20).

Al final, salió un cero en la pantalla (apareció el número 20 en el marcador de apuestas). Por tanto, como era lo que quería, mi mujer le dio al OK (aceptar). Sin embargo, ella había pulsado antes tres veces el cero, de tal forma que la orden era apostar 2000 euros. Cuando salió el ticket por la máquina, vio que ponía 2000 euros, y en la máquina, el contador de dinero había bajado de 2003'27 euros a 3,27 euros.

Imaginad el disgusto que se llevó mi mujer. Ella se puso muy nerviosa y se lo comentó al encargado. El encargado decía que no se podía hacer nada, ya que cuando apuestas una cosa en las máquinas, no se puede dar marcha atrás, ya que el ticket había salido ya impreso. Mi mujer se quejó por la lentitud de la máquina (que fue la que provocó todo el tinglado). El encargado se disculpó pero decía que no se podía hacer nada (hizo una llamada a soporte técnico por si se podía dar marcha atrás, pero le dijeron que no).

Mi mujer estaba al borde del colapso (es que le birlaron 2000 euros por la cara). El encargado a punto de llorar, disculpándose y diciéndole que lo sentía, pero que era un fallo técnico. Dijo que algunas veces, la red (por lo que sea) va lenta y que sabiendo eso, a lo mejor no tenía que haber hecho apuestas deportivas hasta que la máquina volviera a moverse fluidamente. En otros juegos da igual la lentitud, pero en este que hay que utilizar las teclas de la máquina continuamente, tendría que haberse esperado. Además, le dijo que podría haber cobrado los 2000 euros y luego, con el dinero ya en la mano, podia haber jugado 10 euros en las apuestas deportivas.

Mi esposa decía que eran unos ladrones y unos sinvergüenzas, ya que si la máquina tiene fallos, su obligación como trabajador era llamar a soporte técnico. Cuando mi mujer le dijo que la máquina iba lenta, su contestación fue "ya se arreglará". El trabajador le decía a mi mujer que tiene que entender que todos están quemados, ya que tienen que estar pendientes de un montón de cosas a la vez (pagar premios, servir copas, enseñar a jugar a la gente, resolver incidencias, registrar a la gente que entra y sale, ir a por dinero, etc...). Por eso, hay cosas que se pasan.

Cuando yo llegué a por mi mujer, ella estaba nerviosa por todo lo que había pasado. Mi mujer quería poner una reclamación. El encargado pidiendo por favor que no lo hiciera, ya que al final, el que pagaría el pato sería él (como trabajador).

Le dijo a mi mujer que se calmara y viera las cosas de una manera más relajada. Le comentó que había perdido 2000 euros, pero esos 2000 euros no eran suyos, sino del premio que había ganado en el juego de las tumbas. Por tanto, le dijo que en realidad no ha perdido 2000 euros, sino que no ha ganado 2000 euros (que no es lo mismo). Le dijo que la "putada" hubiera sido perder 2000 euros de tu bolsillo, pero ella lo que ha perdido ha sido dinero del propio casino.

Además, le dijo que esa apuesta de los 2000 euros tampoco era tan traumática, pues era de las "fáciles" (al "sí" o al "no"). Le dijo que hay más posibilidades de acertar que de perder, ya que la pregunta era "¿España ganará el Mundial"? Le dijo que hay más posibilidades de "no" que de "sí", así que le dijo que lo más seguro es que recupere de 2000 euros e incluso se lleve una pasta con esa apuesta, ya que la gente "normal", normalmente no apuesta esa cantidad de dinero. Por eso le dijo que se calmara, ya que tampoco era tan "dramático" lo que había pasado. Además, una de las clientas que estaba viéndolo todo le dijo a mi mujer que seguro que "luego gana la apuesta y los del casino no son tan ladrones". La señora decía que lo veía venir: ahora todos son unos sinvergüenzas y unos ladrones, pero por si algún casual la apuesta le sale a su favor (no gana España), seguro que empieza a decir que todo es una maravilla y que qué alegría. Esta mujer le decía a la mía que no hay que ser tan hipócrita: que los 2000 euros es una putada, pero que tampoco es para armar un escándalo.

Mi mujer decía que le da igual, que quiere poner la reclamación. El trabajador llorando (literalmente). Al final, le dijo a mi mujer que esperara unas semanas, y si la apuesta le sale mal "yo mismo le doy los 2000 euros, y entre todos los que trabajamos aquí hacemos una bolsa para usted, pero no ponga la reclamación porque nos tienen cogidos por los huevos".

Al final, yo vi que lo que decía este señor era sensato, y le dije a mi mujer que era lo mejor. A mí también me daba cosa por el chico, porque el hombre lo estaba pasando muy mal (llorando y todo). Me decía que el ambiente está muy tenso entre los jefes y los trabajadores y a la mínima que ocurre algo, ya hay bronca y despidos. De hecho, me decía que todos los trabajadores están quemados haciendo un montón de cosas a la vez (parece que los propios jefes lo hacen para que ellos mismos se acaben "autodespidiendo").

Este lunes, cuando sonó el timbre después de la primera clase, los chicos salieron al pasillo. Como ya sabéis, al tener con este grupo las dos primeras horas, no hace falta que yo haga el desplazamiento. De todas formas, quise adaptarme a la normativa "interpretada" por los chicos. Cogí mis cosas, salí del aula, puse el pie en el pasillo y volví a entrar al aula. Les dije que legalmente se ha producido lo que ellos quieren (ha salido el profesor de primera hora y ha entrado el profesor de segunda). Por tanto, podemos decir que ha empezado la clase (ya que el profesor está dentro del aula).

La manzana donde vivo está formada por 4 casas. Cada casa tiene su azotea particular, pero también, hay una parte de la azotea que es común a las 4 casas (justo, en el centro, donde cofluyen las 4 azoteas). Esa zona central, que es común, está techada y tenemos una piscina climatizada (para las 4 casas). Cada casa tiene un acceso particular a la zona de la piscina (por lo tanto, cada uno entra desde su azotea a la habitación de la piscina).

En principio, la habitación de la piscina estaba dividida en 4 partes iguales, separadas por una mampara (para no ver lo que pasa al lado). Cada sección tenía su puerta de acceso, su parte de piscina y su suelo, de tal forma que a pesar de ser zona común, cada vecino tiene su porción independiente.

Hará cosa de 3 años, la propietaria de una de las casas (era ya mayor) murió y mi mujer y yo decidimos comprar su parte de la azotea (lo acordamos con los hijos), y así pudimos quitar la mampara y tener dos partes para nosotros.
El año pasado, los propietarios de otra de las casas se fueron a vivir a otro sitio y también vendieron su vivienda y mi mujer y yo les compramos su parte de la azotea.

En la casa de al lado tenemos unos vecinos que llevan más de 12 años viviendo en la manzana. Es un matrimonio de mediana edad con sus dos hijos. El verano pasado la mujer se quedó en paro, y el mes pasado, también despidieron a su marido, así que la cosa está bastante fea. Entonces, mi mujer y yo les dijimos que le comprábamos la parte de la azotea, ya que era la única zona que nos quedaba. El matrimonio dijo que le parecía bien e hicimos un acuerdo bastante generoso para ellos. De esta forma, la zona de la piscina se puede considerar legalmente nuestras (ya que las 4 partes las hemos comprado nosotros).
Por eso, tiramos las mamparas y quitamos las puertas de acceso (quedando solamente la puerta nuestra). Para hacer todo esto tuvimos que hacer obras, ya que pintamos, pusimos suelos nuevos e incluso mi mujer montó un pequeño gimnasio con algunas cosillas tanto de ejercicio como de baño. Así el gimnasio normal de la casa (el que teníamos antes) lo dejamos como biblioteca, ya que en el trastero tenía muchísimos libros y era un caos cada vez que tenía que coger uno.

Resulta que los vecinos de al lado (el matrimonio con los hijos a los que le compramos su parte), siempre nos están pidiendo de vez en cuando poder usar la piscina. Hace un par de semanas, la hija cumplió años y la madre nos dijo que si podíamos cederles la piscina para una tarde, ya que la chica traería a algunos amigos, y todos los años lo hacían en la piscina. Mi mujer, en principio, no le hacía mucha gracia, ya que en el gimnasio tiene aparatos, y no le apetece que niños desconocidos se pongan a jugar ahí y toquen cosas que no deben. La madre nos lo estuvo pidiendo (que nos lo pide como favor personal, que a su hija le apetece, que es su cumpleaños, etc...). Al final, cedimos (pero de mala gana) y nos arrepentimos muchísimo, ya que algunos niños se acabaron subiendo en los aparatos de mi mujer, toqueteando botones, ensuciando todo (la merienda la hicieron ahí) y metiendo las manos sucias en el jakucci...en fin, un desastre. La madre nos dijo que ella advirtió a los niños que no tocaran nada, ya que eso no era suyo, pero los chicos ni caso y ella como que pasaba un poco.

Encima, ayer el otro hijo cumplía también los años. El miércoles viene de nuevo la vecina y nos dice que si le podemos dejar otra vez la piscina (esta vez para la fiesta del pequeño). Evidentemente, después de lo que pasó, dijimos que no, que una vez está bien, pero no queremos que sea una costumbre. La madre nos dijo que tuviéramos un poco de compasión, que son niños y que para sus hijos la piscina era sagrada, y quitarla así de golpe y porrazo, que le daba un poco de palo. Mi mujer dijo que lo sentía, pero eso ya era demasiado, y no podía estar a cada rato dejando la piscina para sus eventos. A la vecina no le sentó nada bien (en ese momento entraba yo por la puerta) y nos dijo que éramos unos agarrados y unos estirados. También nos dijo que éramos unos desconfiados y habíamos tenido un gesto muy feo cuando hicimos la compra de la piscina.

Resulta que cuando les pagamos el dinero por su parte de la azotea, al día siguiente cambiamos la cerradura de la puerta de acceso de los vecinos. Legalmente está bien hecho, ya que en ese momento la habitación de la piscina era nuestra (y no tiene que pasar nadie más). Si lo hicimos, fue porque habíamos quitado la mampara, y mi mujer había subido ya los aparatos del gimnasio, y no queríamos, que por accidente, los hijos de los vecinos, entraran sin querer o algo (jugando) y se pusieran a hacer el tonto con los aparatos. Por eso, en cuanto nos hicimos con la parte de la azotea cambiamos la cerradura, para evitar malentendidos.

La madre nos dijo que eso de cambiar la cerradura nada más hacer el trato, ella se sintió muy atacada, ya que era como una forma de decir que nosotros no nos fiábamos de ellos, y que les estábamos tratando "como gitanos", ya que la cerradura la pusimos para que nadie de ellos entrara (según ella).

Algunos alumnos empezaron a protestar y a decirme que me estaba riendo de ellos, que es una tomadura de pelo, que lo he hecho por "vengaza" de la discusión del otro día, que los estoy tratando como si fueran tontos. Yo les dije que simplemente me ha adaptado a lo que ellos pedían. Ellos hicieron su argumentación (que no me gustó en la forma, pero sí respeté en el contenido) y he cumplido con esa supuesta "legalidad".

Los alumnos protestaron, empezaron a decir que no era justo, que no les parecía bien, etc...(lo típico). Una de las alumnas dio un golpazo en la mesa de la misma rabia. Como castigo, puse retraso en el parte de asistencia a todos aquellos alumnos que estaban fuera en el pasillo cuando yo entré al aula en la segunda hora. Si para ellos, la clase empieza cuando entra el profesor, si tú entras después de que haya entrado el profesor (aunque hayan sido 20 segundos después) se considera retraso. Si ellos quieren ponerse teóricos y normativos, vamos a hacerlo bien.

Por lo que se ve, estos alumnos fueron llorando con el cuento a la profesora de Economía (es una profesora joven, con la que tienen bastante confianza). Hablando con ella el otro día, la profesora me dijo que haciendo eso me puse a la altura de los alumnos, y que los estuve tratando como si fueran tontos y que si me creo "listo" por eso. Me dijo que "así no se hacen las cosas" (así sin escuchar mi versión, dejándose llevar por lo que le dijeron los chicos, que seguro que manipularon cosas).

Como ya os he dicho, una de las profesoras de guardia pudo oír el comentario, ya que estaba cerca, pero no pudo verlo. En cuanto escuchó esas palabras, esa forma de hablar y ese vocaubulario tan soez en niños pequeños (que si puta, que si chulo, etc...), la maestra se enfadó muchísimo y preguntó quién había dicho semejante barbaridad.

Todos los niños que estaban en las filas se callaron. Mi sobrino pequeño empezó a poner miraditas "raras" y se puso muy nervioso, ya que le dio miedo la forma de hablar de la profesora (gritando y muy enfadada). Como la maestra vio a mi sobrinillo con la cara descompuesta (del "miedo" que tenía), pensó que había sido él el que había dicho ese comentario. Le dijo al niño, ¿Has sido tú? ¿Verdad? mientras le cogía del cuello del jersey y le gritaba. Como la maestra reaccionó de una manera tan "visceral", al niño no le dio tiempo a explicarse ni a poder hablar (que no había sido él). Simplemente, en cuanto la mujer le cogió del cuello del jersey, le sacó de la fila y se lo llevó al interior del colegio (para hablar con la dirección), mi sobrino montó una llorera de escándalo.

Según se ve, empezó a llorar, a chillar, a berrear, de una manera que dejó con la boca abierta a todo el mundo que había allí. Mi sobrino, viendo que la profesora le iba a llevar al despecho de la directora, se puso alterado perdido: no paraba de llorar, de hacer espasmos, con la voz rota y temblorosa, etc...De los nervios que tenía y de lo mal que estaba pasando acabó vomitando y haciéndoselo encima. Mi sobrino es un niño muy nervioso y cuando lo pasa mal reacciona así.

La maestra, en lugar de intentar calmar al niño para que se tranquilizara, no paró de echar leña al fuego: que era un maleducado por utilizar ese vocabulario faltando el respeto a una profesora, que iba a saber lo que es bueno cuando llegara la directora, que le esperaba un castigo de padre y muy señor mío, que le iba a costar caro hacerse el "listo" y el "gracioso" delante de los compañeros, que era un niño muy malo, etc...El chico no pudo explicarse ni nada. Solamente dijo una vez que no había sido, pero la profesora no le hizo ni caso.

Yo pienso que la profesora, en lugar de malmeter más, y viendo cómo estaba el niño (nervioso, alterado) tendría que haber apaciguado el ambiente para que el niño se calmara. Mi sobrino, oyendo hablar a la profesora de cosas como castigo, directora y demás, perdió los nervioso y se empezó a pegar y a arañar la cara. Una de las veces se pegó hasta un puñetazo en la nariz (le salió sangre y se desvió un poco el tabique). No sé con qué fuerza se pegaría, pero el cuadro que se montó fue tremendo.

Yo sé que mi sobrino en cuanto le regañas un poquito, exagera mucho las cosas y se coge unos enfados que dan miedo. Él es un niño demasiado tímido y sensible. En cuanto algo no le sale bien, se coge unos enfados con él mismo que dan "miedito". Por eso, no me quiero ni imaginar cómo fue el "cuadro" que montó con esta profesora.

Como la escena que montó mi sobrino fue tremenda (ya os he dicho que la manera de llorar escandalizó a la gente), el niño que dijo la barbaridad de la "profesora y su chulo" acabó confesando y diciendo que fue él el que dijo ese comentario y no mi sobrino.

Por tanto, después de todo el sofocón que tuvo que pasar mi sobrino, al final se dieron cuenta de que él no había dicho eso. Por tanto, la profesora tuvo que tragarse todo lo que dijo.

Cuando mis cuñados se enteraron de todo lo que pasó, hablaron con la directora. Mi cuñada lo único que quería era una disculpa por parte de la profesora, tanto de forma pública como de forma privada. La directora dijo que una disculpa pública no, ya que queda muy "feo" que un maestro se rebaje de esa forma, ya que eso hace daño a su imagen, y más, delante de unos niños que van a entrar en una edad tan complicada. La directora dijo que es un error y que no hay que darle más vueltas. Además le dijo que vivir una cosa así le viene bien al niño, ya que tiene que aprender que las cosas no siempre son "perfectas", pues el niño está acostumbrado a que las cosas tienen que ser de una forma y no pueden ser de otra. La directora decía que si el niño no sabe estar a la altura de una tontería como esta, tomándoselo de esa forma tan excesiva, la vida le dará muchos palos cuando lleguen las cosas serias. Por eso le dijo que se olvidara de la disculpa pública y que en lugar de ver las cosas malas también analizaran qué cosas ha hecho mal el niño. También insinuó que el niño tiene un "problema" por reaccionar de esa manera (llegándose a lesionar y todo).

La profesora que acusó a mi sobrino, tampoco quiso disculparse (ni siquiera de forma privada). La mujer dijo que una disculpa hay que merecérsela y ganársela. Según ella, el niño no supo estar a la altura reaccionando de esa manera tan exagerada, y por tanto, no merece esa disculpa. Ella dice que si el niño reacciona de una manera seria y madura, no le importa disculparse, pero reaccionando de una manera tan infantil y desmedida no merece esa disculpa. Dijo que hablando se entiende la gente y que en lugar de patalear y perder la razón, tendría que haber hablando y haberse calmado.

A mi cuñada le sentó muy mal esto: la profesora dice que hay que actuar con la razón y que hablando se entiende la gente. Sin embargo, ella fue la primera en actuar desde la visceralidad, cogiendo al niño del cuello, llevándoselo dentro del colegio y no dejándole que se defendiera. Si hubiera reaccionado de una forma "tranquila" (no tocando al niño, no gritando, no enfadándose) tal vez mi sobrinillo no se hubiera puesto como se puso y las cosas hubieran salido de otra forma.

La profesora le dijo a mi cuñada que el comentario que uno de los niños había hecho en voz alta era muy grave, ya que se estaba faltando el respeto a una profesora de una forma brutal, empleando palabras como "puta" (niños de 10 años). Le dijo que si un profesora no actúa con mano dura, al final los niños te comen. Por tanto, la reacción de la profesora fue proporcional a la gravedad del caso (la burrada que el niño soltó por la boca). Según ella se equivocó a la hora de acusar a la persona, pero la reacción sí fue la correcta, ya que fue algo muy grave y esa reacción hubiera sido igual con mi sobrino que con otro niño cualquiera.

Además, la profesora le dijo a mi cuñada que las disculpas, en todo caso, deberían ser del niño (de mi sobrino) a ella (como maestra) ya que la forma de reaccionar del niño ha hecho que mucha gente del centro la cuestione como profesional.

Por ejemplo, muchas madres del centro ponen a parir a esta maestra por la manera que trató a mi sobrino. También los niños han exagerado la historia. La profesora cogió a mi sobrino por el cuello de la camisa, y algunos niños (e incluso padres) han llegado a decir que la profesora pegó a mi sobrino (cosa que no es verdad). Según se ve, este caso ha afectado bastante a la profesora e incluso compañeros suyos no paran de cuestionarla y de criticarla.

Por eso, la profesora decía que sin comerlo ni beberlo, se la está faltando el respeto (han surgido motes, no para de escuchar comentarios que la cuestionan como profesional e incluso como persona). Ella dice que es muy injusto, ya que ella ha reaccionado como todo profesor reaccionaría. Lo que pasa es que el niño escandalizó y exageró tanto las cosas (con esos berridos, esos lloros, lo del puñetazo, etc...) que la gente ha dado demasiada trascendencia al caso. Mucho ruido y pocas nueces. La profesora piensa que si el niño no hubiera sido tan "melodramático", el caso no hubiera sido tan grave, ya que los excesos de mi sobrino han sido los que han llamado la atención de la gente, la cual no para de meter mierda sobre la profesora.

Casi todos los meses, se castiga a niños y niñas del colegio y nadie se escandaliza ni cuestiona la profesionalidad de nadie, ya que no hay una exageración por parte de los niños.