Debate Uno de ForoCoches se ha follado a una vieja de 79 años
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𝖠𝗎𝗍𝗈𝖡𝖺𝗇𝗇𝖾𝖽
Uno de ForoCoches se ha follado a una vieja de 79 años
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Jeje
Pega el op y los mensajes mas lucidos
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𝖠𝗎𝗍𝗈𝖡𝖺𝗇𝗇𝖾𝖽
no pasa nada
peor es hacerse una paja
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la dejo preñada seguro
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****Ban Spam/Flood/Troll
Es el reporte hijo
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Alphista
Ilphisti
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Yo me he follado a una discapacitada y no voy abriendo hilos
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Aquí no somos de foroflanders así que o pones el tema que se pueda ver o no lo pongas
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Os pego el OP
Procedo a relatar el asunto, sé que esto va a derivar en burlas hacia mi persona, pero me tiemblan un poco las manos y necesito contarlo, aunque sea para aclarar mis propias ideas ahora mismo. Siento que os parezca largo, pero es lo que ha pasado.
Los hechos se remontan a finales de mayo de este mismo año. En mi bloque, con dos viviendas por piso, se alquilaba la vivienda de enfrente a la mía, y como he dicho, en mayo alguien la adquirió.
Al principio yo notaba únicamente que el piso tenía más afluencia de gente de lo que se considera normal, aunque como era todo gente joven pues deduje que los que lo alquilaron estarían de estreno, invitando a todos sus amigos a tomar algo y demás. Pero empecé a tener la mosca detrás de la oreja cuando vi que la afluencia de gente y el abrir y cerrar de puertas se sucedía durante la noche, incluso entre semana.
A los pocos días ya empecé a coincidir en el ascensor con mujeres excesivamente maquilladas, medias de rejilla, tacones... y bueno, sumando dos más dos, deduje que me habían montando un piso de putas delante de casa. Como no voy a estar aquí mucho más tiempo después de haber tenido conflicto con una vecina por asuntos que no vienen al caso, tampoco le di mucha importancia. Pero poniendo la oreja de vez en cuando en la pared del salón, que limita con el piso de putas, y asociando con la llegada de hombres con cuerpos trabajados en el gimnasio que no parecían precisamente clientes, pues pude comprender que además de putas había putos: eso también explicaba el turbio hecho de que de vez en cuando mujeres casi ancianas y poco agraciadas se dejasen caer por ahí.
Pues nada, piso de putas y putos pared con pared, pero para mi sorpresa, eran tremendamente discretos. Dejando de lado el sonido del timbre y el abrir y cerrar de puertas, ahí era todo bastante silencioso y realmente no puedo quejarme de mis nuevos vecinos.
La cosa es que hace unas horas me tocó subir en el ascensor con una anciana que iba al mismo piso que yo. Mi cara era un poema y me estaba dando la risa imaginándome lo que quería, pero bueno, allá ella. El caso es que cuando vio que íbamos al mismo piso empezó a decirme que si trabajaba ahí, que era muy guapo. Yo me reía, le decía que no, que era el vecino de enfrente, pero la señora no parecía comprenderlo e insistía constantemente en que yo trabajaba ahí. Al llegar al piso no hice ni caso, entré a mi vivienda y a otra cosa.
A los 20 minutos me llaman al timbre... y es la señora de antes Me mira fijamente y me dice "oye, escucha, ¿tú por qué no trabajas ahí?". La pregunta me pilló a contrapié y sólo pude reirme, es que la señora era para verla. Pero ella insistía, erre que erre, que se había fijado en mí y que parecía muy majo, que los que había ahí adentro no valían para nada.
Y aquí viene lo gordo, y es que la señora, ni corta ni perezosa, saca una cartera y empieza a contar billetes de 50. Me dice "mira, yo aquí tengo bastante, tú dime cuánto quieres". Me estaba sintiendo entre acosado y espeluznado, pero la señora seguía sacando cosas. "Mira, yo no tengo problema en identificarme y lo que tú quieras, si vivo aquí al lado" y la señora me sacaba el carnet de socio del Eroski, el DNI, el de la Seguridad Social... Yo deseaba que estuviera mi pareja ahí para que pudiera contemplar aquella rocambolesca escena
Yo no paraba de decirle que no, que picara enfrente, pero la señora estaba ahí como una lapa en mi rellano, decía que quería negociar y que no fuera corto de miras. La situación era para verla. Y de pronto, la señora coge los billetes, suma 200€ y me los pone en la mano, y me dice que por "media horita" me da eso.
Y aquí yo creo que mi gran problema fueron las tres cervezas que me tomé por la mañana, que hicieron lo justo para nublarme el juicio, y le dije "a ver, pasa". Yo juro que no tenía intención de hacer nada, no sé qué es exactamente lo que quería conseguir con eso, pero una vez estábamos sentados en el sofá del salón, ya era un poco tarde. La señora sacó más billetes, puso 300€ encima de la mesa y me dijo que eso era mío si yo quería, que si no se iba al de enfrente. Yo le pregunté qué quería a cambio, y ella dijo "pues lo que yo te vaya pidiendo". Me dijo su nombre, que tenía 79 años y que para gastarse la pensión en el Bingo, que prefería estar con hombres, que su marido murió hace 15 años y estaba muy aburrida, y que para lo que le queda de vida ya que prefiere pasarlo bien.
Y acepté. Vi los 300€, y dije... ¿why not? Es una jodida señora, esto va a ser rápido. Juro que no sabía qué se me estaba pasando por la cabeza. La señora tenía exactamente este aspecto, hasta la ropa era parecida. Sólo cambiaba la mirada, que la de la foto parece que está sedada y la real tenía una mirada de anciana normal y corriente:
Pues nada, al turrón. La señora sin más se me tiró a la boca y empezó a besarme. Aquí ya me estaba arrepintiendo, pero si una vieja me había metido la lengua, el dinero ya tenía que ser mío. La señora completamente a cuchillo, en dos minutos ya me dijo que me quitase la ropa, y estando yo de pie empezó a hacerme una paja. Yo mantenía el rostro fijo en la pantalla de la televisión apagada, intentando borrarlo todo de mi mente, y a la par rezaba porque mi pareja no entrase en ese momento (aunque en teoría llegaba a las 18:00, pero nunca se sabe). Mi pene, obviamente, flácido. No se levantaba. La señora acabó cansándose y me dijo que le quitase la ropa a ella.
Y vaya estampa. No sé si alguna vez habéis visto el cuerpo desnudo de una casi octogenaria, pero os recomiendo que no lo hagáis. Tetas por el ombligo, lorzas colgantes por todos lados, más pelos en el coño que el forocochero medio en la cabeza... terrible. Se tumbó, me dijo que le comiera las tetas, y yo puse cara de ufff... La señora dijo que si no quería que cogía el dinero y se iba, pero en ese momento el camino no tenía retorno. Lo hice. Mi boca no hizo contacto con su cuerpo, yo saqué la lengua al máximo y con la puntita estimulaba el pezón como podía. La señora gemía como una cerda, así que deduje que le estaba gustando.
El problema vino cuando me pidió que le metiese los dedos. Eso ya no. Al final llegamos al acuerdo de que se los metería con un condón en el dedo, para "evitar enfermedades". Aceptó, así que mi dedo tampoco tuvo que tocar su piel. Yo me puse el condón alrededor del dedo corazón y adentro que fue. No entiendo cómo, pero aquello estaba más lubricado que muchos coños de veinteañeras, y teniendo en cuenta la gran dilatación de aquello, deduje que no era su primera experiencia precisamente
Lo más trágico fue cuando me pidió sexo. Levantar mi rabo fue una auténtica odisea, y la anciana me decía que ese tiempo lo descontaba del servicio porque no era justo. Yo tuve que hiperconcentrarme para lograr que aquello se pusiese mínimamente decente, me puse otro condón, y adentro. A todo esto, quedaban 5 minutos de servicio (pusimos el reloj en la mesa al principio). Se lo dije, y me insistió: "tú dale, dale". Pues nada, 5 minutos bombeando en misionero a una señora de 79 años que gemía haciendo "oyoy oy oy oyyyy". Me dieron hasta ganas de llorar en un momento dado, no sabía si saltar por la ventana o qué cojones hacer. La señora me decía que más suave, que la iba a romper, y yo ya estaba bombeando a un ritmo ridículo, pero mejor. Cuando terminaron los 5 minutos, la saqué. La señora muy cordial, se vistió, me dijo que había sido genial y que volvería. Yo le dije que no, que ni de coña, que era suficiente, pero se volvió a poner pesada como al principio y me dijo que bueno, que ella se pasaría y me ofrecería "cosas nuevas" y que yo ya decidiría si aceptaba o no. Yo le insistí en que no volviese, pero me da en la nariz que lo va a hacer .
La acompañé a la puerta, salió, y cerré. Y en ese momento pude comprobar por la mirilla que se dirigía al piso de enfrente, que llamaba al timbre, y que entraba ahí. Yo sentía que estaba en una película, todo era surrealista.
Y nada, me he estado duchando, teniendo tremendas reflexiones internas... no sé por qué hice eso, si fue la cerveza o qué, y reflexioné muchísimo sobre quién soy y qué quiero ser. Todo eso mientras me frotaba como si no hubiera mañana, obviamente.
Ahora estoy en el sofá con el portátil encima, mirando por la ventana a ratos... no sé, no sé cómo debo sentirme. No tengo ni idea de nada. Hoy está siendo el día más raro de mi vida, y bueno, sólo quería ampararme en el anonimato de Internet para desahogarme un poco. Gracias a los que hayan llegado hasta aquí, y buena tarde...
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Liker
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mahoumetano
Os pego el OP
Procedo a relatar el asunto, sé que esto va a derivar en burlas hacia mi persona, pero me tiemblan un poco las manos y necesito contarlo, aunque sea para aclarar mis propias ideas ahora mismo. Siento que os parezca largo, pero es lo que ha pasado.
Los hechos se remontan a finales de mayo de este mismo año. En mi bloque, con dos viviendas por piso, se alquilaba la vivienda de enfrente a la mía, y como he dicho, en mayo alguien la adquirió.
Al principio yo notaba únicamente que el piso tenía más afluencia de gente de lo que se considera normal, aunque como era todo gente joven pues deduje que los que lo alquilaron estarían de estreno, invitando a todos sus amigos a tomar algo y demás. Pero empecé a tener la mosca detrás de la oreja cuando vi que la afluencia de gente y el abrir y cerrar de puertas se sucedía durante la noche, incluso entre semana.
A los pocos días ya empecé a coincidir en el ascensor con mujeres excesivamente maquilladas, medias de rejilla, tacones... y bueno, sumando dos más dos, deduje que me habían montando un piso de putas delante de casa. Como no voy a estar aquí mucho más tiempo después de haber tenido conflicto con una vecina por asuntos que no vienen al caso, tampoco le di mucha importancia. Pero poniendo la oreja de vez en cuando en la pared del salón, que limita con el piso de putas, y asociando con la llegada de hombres con cuerpos trabajados en el gimnasio que no parecían precisamente clientes, pues pude comprender que además de putas había putos: eso también explicaba el turbio hecho de que de vez en cuando mujeres casi ancianas y poco agraciadas se dejasen caer por ahí.
Pues nada, piso de putas y putos pared con pared, pero para mi sorpresa, eran tremendamente discretos. Dejando de lado el sonido del timbre y el abrir y cerrar de puertas, ahí era todo bastante silencioso y realmente no puedo quejarme de mis nuevos vecinos.
La cosa es que hace unas horas me tocó subir en el ascensor con una anciana que iba al mismo piso que yo. Mi cara era un poema y me estaba dando la risa imaginándome lo que quería, pero bueno, allá ella. El caso es que cuando vio que íbamos al mismo piso empezó a decirme que si trabajaba ahí, que era muy guapo. Yo me reía, le decía que no, que era el vecino de enfrente, pero la señora no parecía comprenderlo e insistía constantemente en que yo trabajaba ahí. Al llegar al piso no hice ni caso, entré a mi vivienda y a otra cosa.
A los 20 minutos me llaman al timbre... y es la señora de antes Me mira fijamente y me dice "oye, escucha, ¿tú por qué no trabajas ahí?". La pregunta me pilló a contrapié y sólo pude reirme, es que la señora era para verla. Pero ella insistía, erre que erre, que se había fijado en mí y que parecía muy majo, que los que había ahí adentro no valían para nada.
Y aquí viene lo gordo, y es que la señora, ni corta ni perezosa, saca una cartera y empieza a contar billetes de 50. Me dice "mira, yo aquí tengo bastante, tú dime cuánto quieres". Me estaba sintiendo entre acosado y espeluznado, pero la señora seguía sacando cosas. "Mira, yo no tengo problema en identificarme y lo que tú quieras, si vivo aquí al lado" y la señora me sacaba el carnet de socio del Eroski, el DNI, el de la Seguridad Social... Yo deseaba que estuviera mi pareja ahí para que pudiera contemplar aquella rocambolesca escena
Yo no paraba de decirle que no, que picara enfrente, pero la señora estaba ahí como una lapa en mi rellano, decía que quería negociar y que no fuera corto de miras. La situación era para verla. Y de pronto, la señora coge los billetes, suma 200€ y me los pone en la mano, y me dice que por "media horita" me da eso.
Y aquí yo creo que mi gran problema fueron las tres cervezas que me tomé por la mañana, que hicieron lo justo para nublarme el juicio, y le dije "a ver, pasa". Yo juro que no tenía intención de hacer nada, no sé qué es exactamente lo que quería conseguir con eso, pero una vez estábamos sentados en el sofá del salón, ya era un poco tarde. La señora sacó más billetes, puso 300€ encima de la mesa y me dijo que eso era mío si yo quería, que si no se iba al de enfrente. Yo le pregunté qué quería a cambio, y ella dijo "pues lo que yo te vaya pidiendo". Me dijo su nombre, que tenía 79 años y que para gastarse la pensión en el Bingo, que prefería estar con hombres, que su marido murió hace 15 años y estaba muy aburrida, y que para lo que le queda de vida ya que prefiere pasarlo bien.
Y acepté. Vi los 300€, y dije... ¿why not? Es una jodida señora, esto va a ser rápido. Juro que no sabía qué se me estaba pasando por la cabeza. La señora tenía exactamente este aspecto, hasta la ropa era parecida. Sólo cambiaba la mirada, que la de la foto parece que está sedada y la real tenía una mirada de anciana normal y corriente:
Pues nada, al turrón. La señora sin más se me tiró a la boca y empezó a besarme. Aquí ya me estaba arrepintiendo, pero si una vieja me había metido la lengua, el dinero ya tenía que ser mío. La señora completamente a cuchillo, en dos minutos ya me dijo que me quitase la ropa, y estando yo de pie empezó a hacerme una paja. Yo mantenía el rostro fijo en la pantalla de la televisión apagada, intentando borrarlo todo de mi mente, y a la par rezaba porque mi pareja no entrase en ese momento (aunque en teoría llegaba a las 18:00, pero nunca se sabe). Mi pene, obviamente, flácido. No se levantaba. La señora acabó cansándose y me dijo que le quitase la ropa a ella.
Y vaya estampa. No sé si alguna vez habéis visto el cuerpo desnudo de una casi octogenaria, pero os recomiendo que no lo hagáis. Tetas por el ombligo, lorzas colgantes por todos lados, más pelos en el coño que el forocochero medio en la cabeza... terrible. Se tumbó, me dijo que le comiera las tetas, y yo puse cara de ufff... La señora dijo que si no quería que cogía el dinero y se iba, pero en ese momento el camino no tenía retorno. Lo hice. Mi boca no hizo contacto con su cuerpo, yo saqué la lengua al máximo y con la puntita estimulaba el pezón como podía. La señora gemía como una cerda, así que deduje que le estaba gustando.
El problema vino cuando me pidió que le metiese los dedos. Eso ya no. Al final llegamos al acuerdo de que se los metería con un condón en el dedo, para "evitar enfermedades". Aceptó, así que mi dedo tampoco tuvo que tocar su piel. Yo me puse el condón alrededor del dedo corazón y adentro que fue. No entiendo cómo, pero aquello estaba más lubricado que muchos coños de veinteañeras, y teniendo en cuenta la gran dilatación de aquello, deduje que no era su primera experiencia precisamente
Lo más trágico fue cuando me pidió sexo. Levantar mi rabo fue una auténtica odisea, y la anciana me decía que ese tiempo lo descontaba del servicio porque no era justo. Yo tuve que hiperconcentrarme para lograr que aquello se pusiese mínimamente decente, me puse otro condón, y adentro. A todo esto, quedaban 5 minutos de servicio (pusimos el reloj en la mesa al principio). Se lo dije, y me insistió: "tú dale, dale". Pues nada, 5 minutos bombeando en misionero a una señora de 79 años que gemía haciendo "oyoy oy oy oyyyy". Me dieron hasta ganas de llorar en un momento dado, no sabía si saltar por la ventana o qué cojones hacer. La señora me decía que más suave, que la iba a romper, y yo ya estaba bombeando a un ritmo ridículo, pero mejor. Cuando terminaron los 5 minutos, la saqué. La señora muy cordial, se vistió, me dijo que había sido genial y que volvería. Yo le dije que no, que ni de coña, que era suficiente, pero se volvió a poner pesada como al principio y me dijo que bueno, que ella se pasaría y me ofrecería "cosas nuevas" y que yo ya decidiría si aceptaba o no. Yo le insistí en que no volviese, pero me da en la nariz que lo va a hacer .
La acompañé a la puerta, salió, y cerré. Y en ese momento pude comprobar por la mirilla que se dirigía al piso de enfrente, que llamaba al timbre, y que entraba ahí. Yo sentía que estaba en una película, todo era surrealista.
Y nada, me he estado duchando, teniendo tremendas reflexiones internas... no sé por qué hice eso, si fue la cerveza o qué, y reflexioné muchísimo sobre quién soy y qué quiero ser. Todo eso mientras me frotaba como si no hubiera mañana, obviamente.
Ahora estoy en el sofá con el portátil encima, mirando por la ventana a ratos... no sé, no sé cómo debo sentirme. No tengo ni idea de nada. Hoy está siendo el día más raro de mi vida, y bueno, sólo quería ampararme en el anonimato de Internet para desahogarme un poco. Gracias a los que hayan llegado hasta aquí, y buena tarde...
La historia que conmovió a Torbe
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When the man comes around
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Lo del pelo no es mugre
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mahoumetano
Os pego el OP
Procedo a relatar el asunto, sé que esto va a derivar en burlas hacia mi persona, pero me tiemblan un poco las manos y necesito contarlo, aunque sea para aclarar mis propias ideas ahora mismo. Siento que os parezca largo, pero es lo que ha pasado.
Los hechos se remontan a finales de mayo de este mismo año. En mi bloque, con dos viviendas por piso, se alquilaba la vivienda de enfrente a la mía, y como he dicho, en mayo alguien la adquirió.
Al principio yo notaba únicamente que el piso tenía más afluencia de gente de lo que se considera normal, aunque como era todo gente joven pues deduje que los que lo alquilaron estarían de estreno, invitando a todos sus amigos a tomar algo y demás. Pero empecé a tener la mosca detrás de la oreja cuando vi que la afluencia de gente y el abrir y cerrar de puertas se sucedía durante la noche, incluso entre semana.
A los pocos días ya empecé a coincidir en el ascensor con mujeres excesivamente maquilladas, medias de rejilla, tacones... y bueno, sumando dos más dos, deduje que me habían montando un piso de putas delante de casa. Como no voy a estar aquí mucho más tiempo después de haber tenido conflicto con una vecina por asuntos que no vienen al caso, tampoco le di mucha importancia. Pero poniendo la oreja de vez en cuando en la pared del salón, que limita con el piso de putas, y asociando con la llegada de hombres con cuerpos trabajados en el gimnasio que no parecían precisamente clientes, pues pude comprender que además de putas había putos: eso también explicaba el turbio hecho de que de vez en cuando mujeres casi ancianas y poco agraciadas se dejasen caer por ahí.
Pues nada, piso de putas y putos pared con pared, pero para mi sorpresa, eran tremendamente discretos. Dejando de lado el sonido del timbre y el abrir y cerrar de puertas, ahí era todo bastante silencioso y realmente no puedo quejarme de mis nuevos vecinos.
La cosa es que hace unas horas me tocó subir en el ascensor con una anciana que iba al mismo piso que yo. Mi cara era un poema y me estaba dando la risa imaginándome lo que quería, pero bueno, allá ella. El caso es que cuando vio que íbamos al mismo piso empezó a decirme que si trabajaba ahí, que era muy guapo. Yo me reía, le decía que no, que era el vecino de enfrente, pero la señora no parecía comprenderlo e insistía constantemente en que yo trabajaba ahí. Al llegar al piso no hice ni caso, entré a mi vivienda y a otra cosa.
A los 20 minutos me llaman al timbre... y es la señora de antes Me mira fijamente y me dice "oye, escucha, ¿tú por qué no trabajas ahí?". La pregunta me pilló a contrapié y sólo pude reirme, es que la señora era para verla. Pero ella insistía, erre que erre, que se había fijado en mí y que parecía muy majo, que los que había ahí adentro no valían para nada.
Y aquí viene lo gordo, y es que la señora, ni corta ni perezosa, saca una cartera y empieza a contar billetes de 50. Me dice "mira, yo aquí tengo bastante, tú dime cuánto quieres". Me estaba sintiendo entre acosado y espeluznado, pero la señora seguía sacando cosas. "Mira, yo no tengo problema en identificarme y lo que tú quieras, si vivo aquí al lado" y la señora me sacaba el carnet de socio del Eroski, el DNI, el de la Seguridad Social... Yo deseaba que estuviera mi pareja ahí para que pudiera contemplar aquella rocambolesca escena
Yo no paraba de decirle que no, que picara enfrente, pero la señora estaba ahí como una lapa en mi rellano, decía que quería negociar y que no fuera corto de miras. La situación era para verla. Y de pronto, la señora coge los billetes, suma 200€ y me los pone en la mano, y me dice que por "media horita" me da eso.
Y aquí yo creo que mi gran problema fueron las tres cervezas que me tomé por la mañana, que hicieron lo justo para nublarme el juicio, y le dije "a ver, pasa". Yo juro que no tenía intención de hacer nada, no sé qué es exactamente lo que quería conseguir con eso, pero una vez estábamos sentados en el sofá del salón, ya era un poco tarde. La señora sacó más billetes, puso 300€ encima de la mesa y me dijo que eso era mío si yo quería, que si no se iba al de enfrente. Yo le pregunté qué quería a cambio, y ella dijo "pues lo que yo te vaya pidiendo". Me dijo su nombre, que tenía 79 años y que para gastarse la pensión en el Bingo, que prefería estar con hombres, que su marido murió hace 15 años y estaba muy aburrida, y que para lo que le queda de vida ya que prefiere pasarlo bien.
Y acepté. Vi los 300€, y dije... ¿why not? Es una jodida señora, esto va a ser rápido. Juro que no sabía qué se me estaba pasando por la cabeza. La señora tenía exactamente este aspecto, hasta la ropa era parecida. Sólo cambiaba la mirada, que la de la foto parece que está sedada y la real tenía una mirada de anciana normal y corriente:
Pues nada, al turrón. La señora sin más se me tiró a la boca y empezó a besarme. Aquí ya me estaba arrepintiendo, pero si una vieja me había metido la lengua, el dinero ya tenía que ser mío. La señora completamente a cuchillo, en dos minutos ya me dijo que me quitase la ropa, y estando yo de pie empezó a hacerme una paja. Yo mantenía el rostro fijo en la pantalla de la televisión apagada, intentando borrarlo todo de mi mente, y a la par rezaba porque mi pareja no entrase en ese momento (aunque en teoría llegaba a las 18:00, pero nunca se sabe). Mi pene, obviamente, flácido. No se levantaba. La señora acabó cansándose y me dijo que le quitase la ropa a ella.
Y vaya estampa. No sé si alguna vez habéis visto el cuerpo desnudo de una casi octogenaria, pero os recomiendo que no lo hagáis. Tetas por el ombligo, lorzas colgantes por todos lados, más pelos en el coño que el forocochero medio en la cabeza... terrible. Se tumbó, me dijo que le comiera las tetas, y yo puse cara de ufff... La señora dijo que si no quería que cogía el dinero y se iba, pero en ese momento el camino no tenía retorno. Lo hice. Mi boca no hizo contacto con su cuerpo, yo saqué la lengua al máximo y con la puntita estimulaba el pezón como podía. La señora gemía como una cerda, así que deduje que le estaba gustando.
El problema vino cuando me pidió que le metiese los dedos. Eso ya no. Al final llegamos al acuerdo de que se los metería con un condón en el dedo, para "evitar enfermedades". Aceptó, así que mi dedo tampoco tuvo que tocar su piel. Yo me puse el condón alrededor del dedo corazón y adentro que fue. No entiendo cómo, pero aquello estaba más lubricado que muchos coños de veinteañeras, y teniendo en cuenta la gran dilatación de aquello, deduje que no era su primera experiencia precisamente
Lo más trágico fue cuando me pidió sexo. Levantar mi rabo fue una auténtica odisea, y la anciana me decía que ese tiempo lo descontaba del servicio porque no era justo. Yo tuve que hiperconcentrarme para lograr que aquello se pusiese mínimamente decente, me puse otro condón, y adentro. A todo esto, quedaban 5 minutos de servicio (pusimos el reloj en la mesa al principio). Se lo dije, y me insistió: "tú dale, dale". Pues nada, 5 minutos bombeando en misionero a una señora de 79 años que gemía haciendo "oyoy oy oy oyyyy". Me dieron hasta ganas de llorar en un momento dado, no sabía si saltar por la ventana o qué cojones hacer. La señora me decía que más suave, que la iba a romper, y yo ya estaba bombeando a un ritmo ridículo, pero mejor. Cuando terminaron los 5 minutos, la saqué. La señora muy cordial, se vistió, me dijo que había sido genial y que volvería. Yo le dije que no, que ni de coña, que era suficiente, pero se volvió a poner pesada como al principio y me dijo que bueno, que ella se pasaría y me ofrecería "cosas nuevas" y que yo ya decidiría si aceptaba o no. Yo le insistí en que no volviese, pero me da en la nariz que lo va a hacer .
La acompañé a la puerta, salió, y cerré. Y en ese momento pude comprobar por la mirilla que se dirigía al piso de enfrente, que llamaba al timbre, y que entraba ahí. Yo sentía que estaba en una película, todo era surrealista.
Y nada, me he estado duchando, teniendo tremendas reflexiones internas... no sé por qué hice eso, si fue la cerveza o qué, y reflexioné muchísimo sobre quién soy y qué quiero ser. Todo eso mientras me frotaba como si no hubiera mañana, obviamente.
Ahora estoy en el sofá con el portátil encima, mirando por la ventana a ratos... no sé, no sé cómo debo sentirme. No tengo ni idea de nada. Hoy está siendo el día más raro de mi vida, y bueno, sólo quería ampararme en el anonimato de Internet para desahogarme un poco. Gracias a los que hayan llegado hasta aquí, y buena tarde...
Joder es que ni disimula el relato para que parezca verdadero, ni lo hace demigrante para echarse unas risas.
Malo, muuuy malo.
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Turuturutututuru
Al menos ya ha follado mas que el 95% del foro.
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ForoParalelo: Miembro
Joder, yo no soy follaviejas, pero 300 euros son 300 euros.
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ForoParalelo: Miembro
Es un paralelo, el original era una tia con un chorvo
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Miembro premium
Iniciado por
Sr.Laser
Es un paralelo, el original era una tia con un chorvo
Cuenta más mamonazo
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Barcos y Putas
Había que verle a el y a ver si tiene otros 79 años....
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ForoParalelo: Miembro
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