El 2 de abril de 2015 entorno a las 21:15 varias personas disfrazadas de técnicos de gas entraban el las instalaciones de la Hatton Garden Safe Deposit Company por una puerta de emergencia. Dos de ellos descendieron por el hueco del ascensor hasta el sótano, mientras sus compañeros bajaban por las escaleras. Los encargados de bajar por el hueco usaron una radial para forzar la puerta de las escaleras. Llevaban 2 contenedores de basura y herramientas pesadas. Era el fin de semana de Pascua y las calles estaban vacías.
La Hatton Garden
unSafe Deposit Company
En torno a media noche Scotland Yard recibía un aviso de alarma, pero nadie se desplaza a verificarlo. Un incendio en el subsuelo de la zona el día anterior había provocado problemas de comunicaciones e incluso el desalojo de algún edifico de oficinas por seguridad. Lo tomaron como una falsa alarma. Días después ataron cabos. El incendio fue premeditado para provocar distracción de cara al robo.
Una de las puertas que tuvieron que forzar los ladrones.
Una vez en la antesala de la cámara acorazada los ladrones comenzaban el trabajo pesado. Acoplaban un taladro similar al de este vídeo y comenzaban a taladrar la pared de hormigón de la cámara.
Estaban en un sótano profundo de gruesas paredes en una zona de oficinas un día festivo. Por lo que el ruido si es que llegó a oírse fuera del edifico no despertó suspicacias. Se iban turnando cada pocos minutos. Según se pudo ver en las grabaciones de seguridad de vez en cuando alguno abandonaba la escena para subir a hacer uso de los baños públicos de la empresa en la primera planta. En total tardaron unas 2 horas en perforar los 3 agujeros que les permitían el paso a la cámara:
Justo, pero por aquí cabe una persona.
Pero aún les quedaba un último obstáculo para poder hacerse con el botín, la pared de cajas de seguridad de acero. No obstante iban equipados con un ariete neumático y una bomba manual. Aseguraron el ariete y sorpresa, la bomba neumática no funciona.
¿Sería una de estas made in china?
Maldiciones sapos y culebras. Bronca y abandono de la escena con prisas y dejando todo el material. ¿Crimen frustrado? No. Como dije al principio era el fin de semana de Pascua y tanto bancos como depósitos disfrutaban de sus vacaciones. Sin embargo algunos centros comerciales si estaban abiertos, y uno de los miembros de la banda se fue a su Leroy Merlin mas cercano a por otra bomba manual. No obstante el sábado descansaron. De nuevo el domingo en torno a las 21:30 volvían a entrar por la salida de emergencia de la noche anterior, aunque alguno de los miembros se había rajado. Aseguraron el ariete y tumbaron una de las columnas de cajas de seguridad de acero. Uno de ellos entraba en la cámara y se dedicaba a forzar y sacar todo lo que encontraba de valor, mientras sus compañeros se esforzaban en ir llenando los contenedores de basura con joyas, diamantes etc... y limpiar huellas. A las 6 de la mañana salían de allí en una furgoneta con un botín estimado de unos 20 millones de euros.
Así encontraron la cámara el martes por la mañana.
A Scotland Yard le cayó la del pulpo por ignorar la alarma y asignaron hasta a 200 agentes para la investigación. Por desgracia para los ladrones. El 19 de mayo se efectuaban las primeras detenciones de 2 sospechosos, y en noviembre se detenía al resto de la banda excepto uno de los integrantes, apodado Basil del que se sigue sin saber nada.
¿Y donde está lo rockambolesco?
Pues veamos. Además del tema de la alarma ignorada y de que se lo tomaron con calma dejando todo patas arriba y volviendo 2 días después a completar el robo, os presento a los ladrones:
Efectivamente, la media de edad supera los 60 años fácilmente.
Viejos delincuentes conocidos por Scotland Yard, todos implicados con anterioridad en algún robo, blanqueo etc... y desde unos años antes en libertad tras haber cumplido sus condenas y jubilados. Asiduos del pub Castle de Islington donde se tomaban sus cervecitas, comentaban sus tropelias y arreglaban el mundo, y donde empezaron a gestar su último gran golpe. Las grabaciones del pub fueron decisivas para atar cabos y detener al resto de sospechosos. Eso explica los problemas de movilidad de alguno de los ladrones a la hora de taladrar el muro de hormigón, las constantes visitas a los baños, algún vial de insulina que se encontró en la escena etc... El cerebro de la operación, Brian Reader se desplazó en autobús a la escena del crimen, y de vuelta a su casa, con una tarjeta de jubilado. En casa de otro de los ladrones encontraron este libro:
Con anotaciones, marcas etc....
En marzo de 2016 fueron condenados a penas de entre 6 y 7 años de cárcel, si bien pocos llegarán a cumplirlas. Reader ni siquiera pudo asistir al juicio al encontrarse en la UCI.
Al ser detenido, Terry Perkins dijo:
"Que gran historia para un libro"
Tal vez se anime a escribirlo.
A día de hoy la identidad de "Basil" sigue siendo desconocida y 1/3 del botín sigue sin aparecer. La Hatton Garden Safe Deposit Company se vió obligada a cerrar en septiembre de 2015 debido a la pérdida de confianza de sus clientes.
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