Ahora mismo, no. Quizás lo era al principio, con el programa para las europeas escrito en gran parte por Izquierda Anticapitalista (el sector más radical de Podemos). Ahora se ha relegado a estos a un segundo plano a nivel estatal -aunque siguen dominando en Andalucía- e incluso se puede ver cierta evolución en Iglesias y compañía, hasta el punto de que han delegado su programa económico en dos economistas socialdemócratas.
En realidad no son pocos los comunistas que critican a Podemos. Algunos, por minimizar a los movimientos sociales. Otros, porque creen que un gobierno de izquierdas no hace más que retrasar la revolución obrera (
). A lo sumo encontrarás comunistas que, aún aceptando que Podemos no lo es, consideran que este sí supone un avance sobre la materia y blablabla (historias marxistas varias). La realidad es que Podemos no es comunista porque sus postulados no coinciden ni en la organización política que quieren para el país ni en el sistema económico que quieren aplicar.
Ni hay rastro de gobiernos sin partidos políticos ni de socialización de los medios de producción ni nada identificable con el comunismo entre sus propuestas.
Distinto tema sería que en realidad estuvieran ocultando sus intenciones, pero eso ya no es más que pura especulación. A mi lo que me da miedo de Podemos no es que sus dirigentes sean o hayan sido comunistas sino su poca preparación -ser profesor de universidad no implica que vayas a ser un buen gestor, igual que la buena fe no es suficiente para gobernar bien- y la poca autocrítica de sus bases, que te tachan de casta por decir que la RBU es una chorrada pero cuando Iglesias sale aceptando que no se puede aplicar callan como putas sin aceptar que igual se equivocaron. Haber sabido delegar en materia económica honra, y mucho, a Pablo Iglesias....pero al mismo tiempo los sectores más extremistas han criticado el giro socialdemócrata de la formación. Parece mentira pero, al final, están siendo Iglesias, Errejón y compañía los que están luchando contra el extremismo ideológico dentro de su partido.