Lanbide no aclara cómo unos congoleños defraudaron 300.000 euros en ayudas

https://www.elmundo.es/pais-vasco/20...56e8b4571.html

El Departamento de Mikel Torres asegura que abrirá un "expediente de reclamación". Los desfraudadores tenían dos pisos en Bilbao y en Amorebieta y cobraban ayudas de alquiler de vivienda. Las pesquisas se iniciaron desde una oficina de Lanbide y la Ertzaintza ha arrestado a dos varones



El Servicio Vasco de Empleo detectó la pasada primavera el presunto cobro fraudulento de la Renta de Garantía de Ingreso (RGI), del Ingreso Mínimo Vital (IMV) y de las ayudas al alquiler de vivienda de dos parejas de origen congoloño que se habrían embolsado irregularmente 300.000 euros. Lanbide, que se niega a aclarar desde cuándo se produjo este cobro indebido, asegura ahora que ha abierto un "expediente de reclamación" para intentar recuperar lo aportado. Dos de los cuatro implicados en el fraude fueron detenidos por la Ertzaintza imputados por estafa y falsedad documental.


La Ertzaintza inició una investigación el pasado mes de agosto y dos de los presuntos autores del fraude fueron detenidos y puestos a disposición judicial la pasada semana. Los dos varones detenidos y sus respectivas parejas cobraban varias ayudas. El presunto fraude fue detectado por trabajadores de Lanbide que activaron el protocolo puesto en marcha por la ex vicelehendakari Mendia tras comprobarse que un ciudadano senegalés había percibido más de un millón de euros de forma irregular en ayudas sociales.

Según ha podido saber EL MUNDO, una de las parejas solicitó cobrar las ayudas tras su presunto divorcio y optó a su cobro al repartirse el cuidado de sus hijos. Fuentes policiales aseguran que estos ciudadanos de origen congoleño obtuvieron la nacionalidad española y habían comprado dos pisos en Bilbao y en Amorebieta antes de su separación ficticia. Al cobro irregular de prestaciones se le sumó más tarde un hermano también casado y que utilizó la misma estrategia para cobrar ayudas sociales. La investigación confirmó las sospechas de los trabajadores de Lanbide de que los cuatro implicados cruzaban sus empadronamientos para simular que estaban separados cuando seguían conviviendo.


Además, uno de los detenidos utilizó una identidad falsa para 'complementar' con más ayudas irregulares sus ingresos. Una práctica habitual en los fraudes en Lanbide que un ciudadano senegalés exprimió al falsificar hasta 62 identidades para cobrar un millón de euros.

62 identidades tenía uno, más de 60k al mes